Disney compra el 33% de Hulu a Comcast y se hace con el control total de la empresa

Movimiento de placas en el mundo del 'streaming'. Disney va a comprar el 33% de Hulu a Comcast, que tiene en propiedad NBCUniversal. Tal y como ha anunciado la Casa del ratón en un comunicado, la operación supondrá en principio el desembolso por parte de Disney de más de 8.100 millones de euros.

El gigante del entretenimiento toma como referencia los 27.500 millones de dólares de valor mínimo garantizado para Hulu que ambas empresas firmaron cuando en 2019 acordaron la compraventa del servicio de suscripción a Disney, que desde entonces ofrece el contenido Hulu en su propia plataforma, Disney +.

Pero en aquel trato Hulu se aseguró la posibilidad de reclamar en unos años a Disney la compra total de la empresa. A esta cláusula se han agarrado ahora para reclamar a Disney que se haga con el 33% que aún obraba en poder de Comcast.

Pero a la operación aún le faltan algunos pasos.

"El valor razonable del capital de Hulu se evaluará a 30 de septiembre de 2023, y si finalmente se determina que el valor es superior al valor mínimo garantizado, Disney pagará a NBCU su porcentaje de la diferencia entre el valor razonable del capital y el valor mínimo garantizado", ha dicho Disney en su comunicado. 

Esto quiere decir que la empresa se compromete a pagar más en caso de que, finalmente, una evaluación independiente arroje que Hulu vale todavía más. Se trata de un proceso de tasación que, aunque Disney define aún como "incierto", debería completarse a lo largo de 2024.

Aunque previsto, el movimiento no llega en el mejor momento para Disney. En 2019 la compra de Hulu se leyó por parte del sector como un movimiento hostil más en mitad de lo que se terminó conociendo como las Streaming Wars, la guerra sin cuartel que las plataformas de streaming libraron durante años por ofrecer el servicio más completo al menor precio. Sin embargo, hoy el contexto es otro.

Lo es porque hace unos años la hipótesis era que lo principal era ganarse la atención del público y destronar a Netflix: ya habría tiempo para cuestiones que entonces parecían menores como la rentabilidad.

Hoy, una economía cada vez más fría debido a los altos tipos de interés y al consiguiente temor de los inversores ha dado la vuelta a la situación. Los fondos exigen, ante todo, cuentas saneadas y buenos resultados en un cambio de paradigma que ha cogido a muchos con el pie cambiado.

En este caso en concreto, Hulu cuenta actualmente con unos 48,3 millones de abonados, una cifra nada desdeñable pero que palidece ante los frente a los 146,1 millones de Disney en todo el mundo.

Además, en lo que va de año Disney ha ingresado un 30% menos y ha perdido suscriptores. Entre sus problemas, la empresa ha subrayado el mediocre rendimiento de sus películas y la fuerte caída de las ventas de publicidad en su negocio tradicional de televisión.

A ello se ha unido desde verano una huelga conjunta de actores y guionistas que ha detenido algunas de las producciones más esperadas. Los 100 años de Disney no han sido, ni mucho menos, el aniversario anhelado.

Como respuesta, el CEO de Disney, Bob Iger, ya ha anunciado una completa reestructuración que podría suponer la venta de activos que a ojos de las altas esferas tienen mal encaje. Habrá que ver qué lugar ocupa la completamente adquirida Hulu en estos movimientos.