España pagará 13 millones a una teleco por las redes y la ciberseguridad de la presidencia de la UE: el concurso público aún está abierto

Se acerca la presidencia española de la Unión Europea, que nuestro país ocupará de forma rotatoria durante el segundo semestre del año, y en paralelo avanzan también los preparativos para los 27 encuentros europeos que se celebrarán en territorio español durante este periodo.

Como parte de estos preparativos, también entran en juego las redes de telecomunicaciones que se utilizarán para garantizar el buen rumbo de las citas, así como las medidas para garantizar la ciberseguridad de estos encuentros de primer nivel.

En la actualidad, el Gobierno de Pedro Sánchez está buscando a un operador de telecomunicaciones para que se haga cargo de las redes y de la ciberseguridad durante la presidencia española de la UE, como ha informado la Junta de Contratación del Ministerio de la Presidencia en el pliego de la licitación.

El contrato, que se anunció originalmente el mes de febrero y que posteriormente se rectificó en marzo, tiene un valor estimado de 12.869.608 euros, que sin impuestos se reduce a algo más de 10,7 millones de euros.

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De momento, la Junta de Contratación no ha decidido qué empresa de telecomunicaciones se ocupará de estos servicios, pero sí que está tramitándolo de forma urgente porque los procedimientos ordinarios no garantizan que llegue a tiempo para los plazos previstos, entre el 22 de mayo y el 10 de diciembre.

El documento público informa de que los servicios incluidos en el contrato son los de mantenimiento y reparación de los equipos de las redes de datos, proporcionar equipo para telecomunicaciones y facilitar servicios de mantenimiento, telecomunicaciones, sistemas y apoyo.

El Gobierno ha establecido una serie de condiciones mínimas para las empresas, con elevados mínimos de facturación anual, lo que en la práctica reduce los postores a los grandes operadores de telecomunicaciones.

En la primera fase del proyecto de selección, la única compañía que obtuvo el visto bueno del Gobierno fue Vodafone, pero posteriormente se añadieron también Orange y Teléfonica tras corregir algunos errores que se les habían indicado, como ha dado a conocer La Información.

Asimismo, el Ministerio de la Presidencia ha optado por rebajar en algunos aspectos las exigencias técnicas que demandaba inicialmente en el contrato y ha reducido las cantidades de algunos equipos debido a la "escasez mundial de componentes electrónicos", a pesar de que el contexto actual está más próximo al exceso de inventario que a la escasez de semiconductores y memorias.