Estas son las claves para entender el final de 'Oxígeno', una de las últimas sensaciones de Netflix

Después de asombrar al mundo con la fantástica El Inocentey haber causado furor con La familia Mitchell vs Las máquinas, una de las películas de animación más brillantes de los últimos años, una nueva película está acaparando todas las miradas en Netflix: Oxígeno. 

La película dirigida por Alexandre Aja y protagonizada por Mélanie Laurent propone un viaje claustrofóbico con tintes de ciencia ficción en el que una mujer se despierta encerrada en una cápsula junto a una inteligencia artificial llamada MILO sin recordar quién es ni por qué ha acabado allí. 

¿El gran problema? Sus reservas de oxígeno están cerca de acabarse y tiene muy poco tiempo para poder escapar y tratar de dar respuesta a esos interrogantes que le rondan la cabeza. 

El algoritmo de Netflix sí que acierta (aunque tú creas que no)

No es una propuesta totalmente original, ya que se ha podido ver en propuestas como Buried, protagonizada por Ryan Reynolds, pero sí que logra distanciarse de ella gracias a una propuesta visual fantástica, una actuación soberbia y uno de esos finales que vas a tener en el cabeza durante mucho tiempo. 

Y de esto precisamente es de lo que toca hablar: del final de Oxígeno. Una cinta que igual te ha logrado descolocar con ese plano final y con todo lo que plantea en su último tercio.

Como es lógico a partir de aquí hay spoilers de todo tipo, así que si todavía no la has visto, vuelve cuando lo hayas hecho —te la recomiendo bastante— y tendrás las claves para entender el final de Oxígeno, una de las películas de ciencia ficción más sugerentes del catálogo de Netflix. 

El final de Oxígeno explicado

Cuando Liz despierta al principio de la película no tiene claro qué hace allí, ni tiene recuerdo alguno de quién es. A medida que se desarrolla la película, se van viendo pequeños flashbacks que van construyendo la historia, pero el gran giro final es descubrir que Liz es únicamente un clon y que lleva viva únicamente 101 minutos, la misma duración de la película. 

Con esto en mente, el director de la película se planteó dos cuestiones clave en una entrevista para Inverse que recoge Cultura Ocio: "¿Qué mantiene a la gente en pie cuando, probablemente, va a morir? ¿Qué hace que las personas sigan luchando incluso en los momentos más aciagos?".

A pesar de que ha descubierto que es un clon, ella se siente como un ser humano por todos los recuerdos implantados de su vida pasada y hace todo lo posible por mantenerse con vida y así poder juntarse con su marido en el nuevo planeta al que se dirigen.

El motivo por el cual se crean clones para enviarlos fuera de la Tierra es simple: una gran pandemia ha acabado con un montón de personas y con tal de salvar lo que queda de la Humanidad, la doctora Elizabeth 'Liz' Hansen logra crear un proceso de clonación que también lleve consigo la memoria del huésped inicial. 

La película tiene 2 interpretaciones: o bien Liz logra resistir al viaje, ya que Milo consigue llevarla al criosueño y puede vivir con su marido en el nuevo planeta o simplemente es un último vestigio de su memoria que trata de dar al personaje un final más o menos feliz.