Es indudable que teletrabajar aporta muchas ventajas: ahorras tiempo de transporte, dinero y tienes la posibilidad de ajustar mejor tus horarios diarios para exprimir la jornada al máximo. Pero muchos estudios señalan que el teletrabajo puede ser igualmente perjudicial en algunos aspectos. 

Un caso claro es el que supone el estrés por teletrabajo, y que puede tener causas muy diferentes. En este artículo repasamos algunas recomendaciones para evitar que te afecte, y también para salvaguardar el bienestar de tu salud mental. 

¿Qué es el estrés por teletrabajo y cuándo se produce?

Cada día es más habitual que mucha gente se decante por el teletrabajo, sobre todo en aquellas profesiones que dan la oportunidad de gestionarte por ti mismo. De primeras, teletrabajar puede parecer una auténtica bendición que te libera de sufrir atascos, tener que comer fuera de casa (o cargar con el táper) o soportar a ese compañero que no te cae especialmente bien. 

Pero en realidad, el teletrabajo tiene riesgos, como ha alertado la propia Organización Mundial de la Salud (OMS). En primer lugar, resulta más difícil “desconectar”. El hecho de utilizar tu espacio personal (tu casa) y no tener un ambiente laboral específico, hace que los horarios en ocasiones se difuminen más de lo aconsejable. 

Por no hablar de la soledad que puede sentir quien teletrabaja. Al no contar con compañeros ni clientes, las necesidades sociales se alteran, apareciendo con frecuencia episodios de apatía o depresión del exceso de soledad. Algo más pronunciado si cabe en personas solteras o que viven solas. 

Según diversos estudios, el teletrabajo provoca más casos de ansiedad o estrés que ir a la oficina, y los teletrabajadores tienden a percibir que todos los días se parecen demasiado entre sí. Todo esto se conoce como estrés por teletrabajo, y cada día lo padecen más personas. 

Así puedes evitar el estrés por teletrabajo

Lo primero que los expertos en temas laborales como la Universidad Abierta de Cataluña (UOC) han recomendado siempre para escapar de los peligros del estrés por teletrabajo pasa por marcarse unos horarios. Y cumplirlos, claro. No solo ahora de afrontar las responsabilidades laborales, sino también respetar una rutina de duchas, comidas, descansos, etcétera. 

Además, es igualmente importante no pasar demasiado tiempo encerrado en casa. Hay personas más o menos caseras, pero al final hablar con los demás y tomar un poco de aire fresco es imprescindible para todo el mundo. Si teletrabajas, debes forzarte incluso más a salir, aunque sea a dar un paseo por tu manzana. 

El ejercicio físico y mantener una dieta saludable también ayudan a mantener a raya el estrés por teletrabajo. Al contrario de lo que podría pensarse, muchas veces se come peor estando en casa que yendo a la oficina, por propia pereza de no preparar nada. Además, la falta de movimiento debe compensarse con algo de ejercicio, aunque sean estiramientos básicos. 

Uno de los principales problemas que tiene el estrés por teletrabajo, es que este puede invadirte poco a poco sin que prácticamente te des cuenta. 

La mejor recomendación consiste en llevar a cabo los consejos que te hemos dado desde el primer momento, y convertir esas rutinas en inamovibles.