El 'genio' detrás de ChatGPT se ha vuelto invisible dentro de OpenAI y su futuro es incierto

Kali Hays,
Darius Rafieyan
| Traducido por: 
El CEO de OpenAI, Sam Altman (izquierda), y el científico jefe de la empresa, Ilya Sutskever (derecha).
El CEO de OpenAI, Sam Altman (izquierda), y el científico jefe de la empresa, Ilya Sutskever (derecha).

Kevin Dietsch vía Getty Images; Jack Guez/AFP vía Getty Images.

  • Las enormes contribuciones de Ilya Sutskever a OpenAI quizá no puedan compensar su papel en el despido de Sam Altman.
  • Su posición aún no se ha abordado oficialmente en OpenAI y hay indicios de que el caos continúa.

Las obras de arte de Ilya Sutskever aún cuelgan de las paredes de la oficina de OpenAI, aunque se haya vuelto invisible tras el regreso de Sam Altman.

El científico jefe y cofundador detrás de algunos de los mayores avances de OpenAI en IA generativa, que desempeñó un papel clave en la sorprendente destitución en noviembre del CEO y cofundador Altman, no se dejó ver por las oficinas de la compañía en San Francisco durante la semana pasada, según dos personas familiarizadas con la empresa. Business Insider ha hablado con tres personas al tanto de la visibilidad de Sutskever en la empresa desde que concluyó el dramón, además de con dos personas familiarizadas con los implicados. Todas han solicitado el anonimato porque no están autorizadas a hablar de asuntos internos. Sus identidades son conocidas por Business Insider.

Mientras que Sutskever continúa en los sistemas de la empresa como Slack, y su presencia es perceptible a través de sus dibujos y pinturas utilizadas como decoración, su presente y futuro en OpenAI aún no ha sido abordado oficialmente por el liderazgo, señala una fuente.

"Ilya siempre tendrá un papel importante", asegura una persona. "Pero, ya sabes, hay un montón de otras personas que están recogiendo y tomando esa responsabilidad que históricamente tenía Ilya".

Otra persona asegura que se está hablando de que Sutskever obtenga un nuevo cargo en la empresa, y que hay un deseo de "encontrar un papel para él." Una foto sonriente publicada en X el pasado viernes de Sutskever con el cofundador y presidente Greg Brockman, que fue el primero en renunciar en solidaridad con Altman, fue una "clara señal de que todos quieren volver al trabajo", dice esta persona. Aun así, su posición en la empresa es "indefinida", añade esta fuente.

Sam Altman.

Este aparente estado de limbo no es exactamente sorprendente dada la posición de Sutskever en la empresa, y su implicación en el despido pobremente justificado de Altman. El despido llevó a Brockman a dimitir y a casi todos los demás empleados de OpenAI a amenazar con hacer lo mismo si Altman no era readmitido y se despedía al consejo que lo echó. La mayoría de ellos lo están. Sutskever también estaba en ese consejo, pero su importancia e influencia en la empresa, así como su condición de cofundador, es exponencialmente mayor que la de cualquiera de los otros miembros anteriores del consejo.

Una señal del actual conflicto con Sutskever es un post publicado el miércoles en X, el primero desde la foto con Brockman la semana pasada, que fue borrado el jueves. El mensaje decía: "He aprendido muchas lecciones este último mes. Una de ellas es que la frase 'las palizas continuarán hasta que mejore la moral' se aplica más a menudo de lo que tiene sentido". La popular frase se utiliza a menudo en memes para denotar el ciclo irónico en el que la baja moral engendra castigos, los cuales a su vez aumentan la baja moral. Un diseño digital publicado el martes en su página de Instagram, donde sólo publica su arte, sigue en pie: una cara grande con expresión adusta que lleva pantalones y lo que parecen ser botas.

Otra señal es que Sutskever ha contratado a su propio abogado: Alex Weingartensasasasasa de Willkie Farr & Gallagher, que dirige su área de litigios, tal y como BI ha informado anteriormente. Weingarten no ha respondido a las peticiones de BI para comentar esta información. Previamente se limitó a decir lo siguiente: "Ilya quiere lo mejor para la empresa". Un portavoz de OpenAI tampoco ha respondido a una solicitud de comentarios.

Sutskever es una persona "muy profunda", emocional e intelectualmente, cuenta una de las personas consultadas. Es alguien que "puede no parecer totalmente presente en el momento, pero simplemente está procesando las cosas de manera diferente".

Suele recomendar a los empleados de OpenAI que lean El archipiélago Gulag, un extenso ensayo de casi 700 páginas sobre el sistema de trabajos forzados en la Unión Soviética. Nació en la Rusia soviética y se marchó muy joven. Otra fuente describe a Sutskever como alguien que "se considera a sí mismo un dios de la inteligencia artificial" y que se sintió frustrado al "verse apartado de las decisiones" sobre ChatGPT-5 y los planes para ampliar el producto y la empresa.

IA

Sutskever está considerado internamente como un "visionario" de la IA, y aunque su estilo "académico" no le granjeó tanta lealtad entre los ingenieros como Altman y Brockman, las contribuciones de Sutskever siguen siendo ampliamente respetadas por muchos empleados.

Aunque Altman aseguró en un comunicado tras su regreso a la empresa que no tiene "ninguna animadversión hacia Ilya" y que deseaba "continuar nuestra relación de trabajo", confesó a The Verge estar "dolido y enfadado".

Una persona con información interna sobre Microsoft y familiarizada con Altman, Sutskever y Brockman no cree que los tres puedan volver a trabajar bien juntos, especialmente Sutskever y Brockman. En Silicon Valley, que los fundadores se enfrenten entre sí se considera un sacrilegio.

Del mismo modo, algunos de los ingenieros de OpenAI que son leales a Altman y Brockman también podrían tener dificultades para trabajar con Sutskever debido a su papel en el despido, según un antiguo empleado.

"Una vez que se rompe la confianza", señala el exempleado, "no se puede recuperar".

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.