Esta ejecutiva de Google sabe cómo mantener la motivación de los empleados: así ayudó a la compañía a conseguir un récord Guinness con su trabajo

Si el fomento de la sensación de bienestar en la plantilla es la principal medida de éxito para los ejecutivos del bienestar, Lauren Whitt, directora global de Resiliencia en Google, tiene la corona, o al menos un récord Guinness.

En 2015, Whitt dirigió una vacuna contra la gripe en la que Google donó 9 euros por cada persona vacunada. La campaña recaudó 150.000 euros para apoyar la inmunización de los niños en todo el mundo y le valió a la empresa el récord Guinness de mayor recaudación de dinero para fines benéficos en una campaña de vacunación de 24 horas.

En su puesto, Whitt es responsable de impulsar el bienestar de los empleados y de guiar a los googlers para que alcancen el máximo rendimiento mental a través de vídeos de formación, ejercicios de reflexión y entrenamiento diario.

Dejando a un lado los récords mundiales, dar prioridad al bienestar de 135.000 empleados durante las crisis continuas tiene sus retos. 

Durante muchos años, Google fue considerado el estándar de oro en cuanto a entornos de trabajo saludables, con ventajas como salas de masaje internas y comida gourmet gratuita.Aunque en los últimos años, el gigante tecnológico se ha visto sometido a escrutinio por las acusaciones internas de una cultura empresarial cuestionable y por la destrucción de sindicatos. 

A pesar de todo, Whitt cree que ha sido inquebrantable en su compromiso con la salud mental, emocional y psicológica de los Googlers.

"En Google, hablamos de la resiliencia como la capacidad de responder y recuperarse del estrés", ha detallado Whitt a Business Insider.

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Para liderar eficazmente la resiliencia global en una de las empresas más renombradas del mundo, Whitt cultiva intencionadamente un entorno doméstico que le da energía para el trabajo. "Cuando comenzó la pandemia y pasamos a trabajar a distancia, mi familia y yo nos trasladamos a un apartamento en una ciudad costera de Florida", ha explicado.

 "Me ha dado una nueva perspectiva sobre las rutinas, las necesidades de los descansos en la naturaleza y el descubrimiento de lo que me aporta calma en tiempos siempre cambiantes", ha confesado Whitt.

Su secreto para el éxito consiste en la reflexión diaria, el liderazgo consciente, las colaboraciones creativas y la descompresión con la familia al final del día. Así lo ha explicado a Business Insider la jefa de resiliencia global de Google.

7.00 horas - Reflexión y movimiento matutinos

Mi rutina matutina previa al trabajo incluye levantarme, desayunar y reflexionar sobre las "grandes piedras" del día. ¿Cuáles son los principales objetivos para el trabajo y para la familia que debo cumplir? A menudo utilizo nuestro T.E.A., es decir, pensamientos, energía y atención, como ejercicio de autorreflexión para saber en qué centrar e invertir intencionadamente mi energía y mi atención.

Si el tiempo es lo suficientemente cálido, un baño matutino hace que la sangre fluya y la mente se acelere en direcciones creativas e innovadoras. Salir al exterior restaura nuestra energía; el tiempo que pasamos en la naturaleza nos da la oportunidad de restablecer nuestra atención.

09.00 horas - Trabajo de concentración y planificación creativa

Cuando entro en el modo de trabajo, lo primero que hago es ponerme las zapatillas. Claro que parece una tontería en un entorno de trabajo desde casa ponerse los zapatos para caminar desde el dormitorio hasta el escritorio instalado en el salón, pero es una rutina física clara que muestra que estoy entrando mentalmente en una mentalidad de trabajo enfocada. 

Tenemos un equipo global de resiliencia y entrenadores de rendimiento mental en todo el mundo que ayudan a nuestro programa y a los googlers. Por ello, suelo pasar las primeras horas de la mañana en reuniones con nuestros expertos en Europa, Oriente Medio y África antes de que terminen su jornada.

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El resto de la mañana lo dedico al trabajo de reflexión y a la planificación de la estrategia creativa. A menudo no reservamos suficiente tiempo en nuestros calendarios para concentrarnos en la reflexión.

12.00 horas - Liderazgo intencional y asociaciones 

A primera hora de la tarde, me tomo unos 30 minutos para hacer una pausa y repostar mi cuerpo con el almuerzo, reajustar mi mente para las prioridades de la tarde y abordar cualquier tarea personal o familiar que necesite atención. 

A mediodía, suelo haber realizado la mayor parte de mis proyectos de enfoque profundo del día y paso a una capacidad de liderazgo para las reuniones con mis subordinados directos y equipos de proyecto.

A medida que mis compañeros de equipo de la Costa Oeste de Estados Unidos se conectan y aumentan su energía, las primeras tardes son un momento para la dirección intencional de los próximos proyectos, las reuniones interfuncionales con los socios, los entregables con los proveedores y el contenido de las presentaciones.

15.00 horas - Colaboración y proyectos creativos 

Una parte fundamental para el alto rendimiento es reconocer cuándo se tiene más energía y creatividad y programar el día intencionadamente en torno a ello. 

En mi caso, por las tardes es cuando me siento más colaboradora e innovadora. Es el momento del día en el que suelo programar sesiones de brainstorming para nuevos proyectos, o programo sesiones de descubrimiento con otras empresas o expertos en rendimiento mental para discutir cómo están abordando los desafíos dinámicos de hoy con sus equipos. Las horas de la tarde son mis favoritas.

19.00 horas - Cambio de enfoque hacia la familia y los amigos

Las últimas horas de la jornada laboral suelen ser las más productivas. Suelo estar en ritmo y me muevo rápidamente con adrenalina adicional para terminar las últimas tareas antes de cerrar mi portátil para la noche. 

Como somos una organización global, este es también el momento del día en el que hay reuniones en el calendario con compañeros de equipo o expertos en rendimiento mental de todo el mundo que acaban de conectarse para comenzar su jornada.

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Una vez que mi marido llega a casa del trabajo, mi portátil se cierra. Mi atención se centra en los planes para la cena, las videollamadas con mis sobrinas en Alabama y las actividades nocturnas, como pasear por la playa o ver la puesta de sol junto a la piscina. 

Tenemos muchos amigos músicos que tocan en restaurantes al aire libre o en locales junto a la playa, así que las noches con cena, música en directo y gente estupenda son nuestra forma favorita de separarnos, descansar, recuperarnos, relajarnos y resetear del ajetreo del trabajo. 

Cada uno tiene que encontrar el equilibrio por sí mismo. Yo tiendo a trabajar durante largas jornadas, pero elijo pasar los fines de semana centrándome en la familia, los amigos y las aventuras al aire libre en lugar de ponerme al día o adelantar las tareas del trabajo. 

Este enfoque no funciona para todo el mundo, pero se ha convertido en un fuerte ritmo y rutina para mí. Es muy valioso establecer normas de trabajo para que tu equipo pueda planificar, adaptar y ajustar en consecuencia sus sprints de trabajo y sus períodos de recuperación. 

Mis patrones consistentes permiten a mi equipo separarse completamente y recuperarse los sábados y domingos, sabiendo que no tendrán noticias mías con ninguna tarea o petición urgente.