Microsoft da a Google la patada en el culo que lleva necesitando años

Satya Nadella, CEO de Microsoft.
Satya Nadella, CEO de Microsoft.

Reuters

  • Microsoft ha anunciado una actualización de Bing basada en OpenAI que aporta una innovación muy necesaria a las búsquedas.
  • Gane o pierda, Microsoft está dando a Google la patada en el culo que necesitaba desde hace tiempo. 
Análisis Faldón

No hace falta que diga que cada vez es más difícil encontrar lo se busca en Google. El resultado deseado parece estar siempre enterrado bajo una inmensa capa de anuncios o bien perdido entre una maleza de información a menudo irrelevante que el buscador intenta ofrecer.

Google nunca se ha enfrentado a nadie que desafíe a su imperio de motores de búsqueda. Bing, de Microsoft, se ha mantenido durante años como un motor de búsqueda constante pero distante desde su segundo puesto a pesar de los esfuerzos del titán tecnológico. ¿Recuerdas la desafortunada campaña Scroogled? Yo tampoco. 

Ahora, el rápido auge del chatbot ChatGPT de OpenAI ha presentado lo que podría ser una oportunidad única para replantear las búsquedas después de décadas en las que Google ha marcado el ritmo. 

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Este martes, Microsoft ha anunciado los primeros frutos reales de su asociación con OpenAI mediante una ingeniosa opción de búsqueda en lenguaje natural en Bing que abre nuevas posibilidades.

"El proceso de búsqueda sigue siendo el mismo desde la última gran revolución tecnológica", comentó el vicepresidente corporativo de Microsoft Yusuf Mehdi en el evento en el que se anunció la actualización, añadiendo que "la experiencia del usuario es la misma que hace 20 años".

Se puede pedir a este nuevo Bing cosas como preparar un itinerario para pasar 3 días en Roma, y responderá con uno casi al instante. 

Pídele que resuma cada página de un documento y obtendrás notas útiles. Las posibilidades son, por definición, ilimitadas. Es una buena señal para Satya Nadella, CEO de Microsoft, que ha recibido muchos elogios por haberse acercado tan pronto a OpenAI y haber actuado con tanta rapidez en la integración.

El mercado está recibiendo muy bien la integración de ChatGPT y Bing por su potencial de "desafiar el monopolio de Google", según un estudio de Microsoft

Lo que no está claro es si Microsoft acabará siendo la empresa que lidere la disrupción de la tecnología de los motores de búsqueda. Google está introduciendo rápidamente la IA en su propia gama de productos, lo que significa que Microsoft dispone de un estrecho margen para hacerse con toda la cuota de mercado que pueda antes de que la competencia se le eche encima.

Al mismo tiempo, este es un ejemplo de libro de cómo la competencia puede ser buena para los consumidores. Aunque todo esto no salga como Microsoft quiere y Bing nunca se convierta en el primer motor de búsqueda, este momento de la historia de la tecnología ha sido la patada en el culo que Google necesitaba para ponerse las pilas y aportar algo nuevo. 

El cambio se ha hecho esperar

Por sí solo, este hecho debería considerarse una gran victoria no solo para Microsoft, sino para el sector en su conjunto, ya que marca un momento excepcional en el que el reconocido líder del sector se ha visto sorprendido por un advenedizo como OpenAI. 

Sin embargo, la disrupción tiene sus costes. El modelo de publicidad en las búsquedas, del que Google es pionero y que se ha extendido a través de las distintas ramas de su negocio, es el modelo de ingresos que impulsa gran parte de la web. 

Si la forma en que buscamos cambia, también lo hará la capacidad de Google (y Microsoft) para mostrar los anuncios que mantienen el negocio funcionando. Quizá ahora no veamos tantos anuncios en pantalla, pero habrá algo que los sustituya.

El mercado está recibiendo muy bien la integración de ChatGPT y Bing por su potencial de "desafiar el monopolio de Google", según un estudio de Microsoft

También hay un coste más peligroso. ChatGPT tiene una propensión bien documentada a decir cosas engañosas, peligrosas o totalmente equivocadas

En palabras del autor Hank Green, todo esto "reducirá a cero el coste de mentir", sobre todo si agentes maliciosos intentan engañar a la IA del mismo modo que engañaron a los resultados de los motores de búsqueda. Para que los usuarios confíen en todo lo que dicen los chatbots habrá que trabajar más en la seguridad. 

En última instancia, sin embargo, creo que Microsoft y OpenAI merecen su parte del mérito por haber introducido cambios en una parte del sector que se ha resistido a ellos.

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