Te preocupas mucho por tu salud, en lo que comemos y el ejercicio que no hacemos, pero también debes de ser consciente de algo de lo más nocivo: los metales pesados. Es una realidad constante que nos rodea y que afecta a tu salud de manera silenciosa y, sorprendentemente, productos tan sanos como plantas y verduras pueden ser los principales agentes contaminantes. 

Desgraciadamente, es complicado librarse de los metales pesados, ya que están presentes en algo tan común como los plásticos, pero también la comida, el agua y el propio aire. Lo mejor es vivir en lugares naturales y alejados de las grandes ciudades, pero para la mayoría de la población es muy complicado o imposible. 

Exposición diaria y mitos

Esa exposición constante a metales pesados a través de la comida, agua, aire y productos comerciales es un hecho. Aunque las autoridades establecen valores máximos, la realidad es que incluso cantidades menores pueden afectar nuestra salud a largo plazo, desmitificamos la idea de que solo debemos preocuparnos cuando se superan ciertos límites establecidos.

Efectos de los metales pesados en el organismo

Sin embargo, no subestimes el problema, porque los metales pesados pueden tener efectos devastadores a largo plazo en nuestra salud, afectando incluso la genética y transfiriéndose a las nuevas generaciones. La acumulación constante de estos agentes tóxicos se asocia con problemas de salud como alergias, autismo o cáncer.

Métodos naturales para eliminar metales pesados

La mejor opción que sí puedes controlar y fomentar es sudar, para así extraer metales tóxicos como el arsénico, cadmio, plomo y mercurio. Lo ideal son tres o cuatro sesiones de sauna a la semana, pero haciendo deporte y sudando con ello ya es mucho avanzar, aunque es esencial mantener la hidratación y reponer electrolitos. La piel, nuestro órgano más grande, actúa como un sistema de "alcantarillado" al eliminar toxinas durante la sudoración.

Hacer ejercicio de forma regular

El ejercicio regular, especialmente aquel dirigido a la pérdida de grasa, puede movilizar y liberar toxinas almacenadas en la grasa corporal, pero si lo combinas con la sauna, amplificas los efectos de la desintoxicación al mejorar la circulación y la capacidad de filtrado del cuerpo.

Lo curioso es que las personas que hacen ejercicio con la intención de perder grasa y lo consiguen terminan con más disruptores hormonales en la sangre, pasando de una a otra, con lo que el cuerpo tiene más posibilidades de deshacerse de ellos. 

Suplementos quelantes

La quelación es un proceso que implica el uso de agentes quelantes para unirse y eliminar metales pesados del cuerpo. Algunos suplementos, como el ácido fúlvico, pueden actuar como quelantes naturales, ayudando en la eliminación de toxinas acumuladas.

Muchas plantas, incluyendo aquellas utilizadas en infusiones, pueden contener metales pesados absorbidos del suelo contaminado, con lo que, por ejemplo, si tomas tés, nunca dejes la bolsita más de 3 minutos en el agua. 

No digamos las verduras, con los pesticidas, químicos y la propia contaminación de la tierra. Se calcula que el 80% de la misma en todo el planeta contienen un exceso de metales pesados y las plantas no hacen sino chuparlos. Sobre todo de plomo y el aluminio, que tienen más tendencia a permanecer en las capas superiores del suelo de la Tierra.

La opción de las algas

Concretamente, la Chlorella, una microalga con efectos quelantes, pero que solo encuentras como suplemento. Lo paradójico es que la extracción del alga para ponerlo en suplemento se utiliza hexano, una substancia elaborada a base de petróleo, con lo que mejor optar por opciones siempre naturales.