Tu lavavajillas esconde un enemigo invisible: los restos de detergente podrían dañar la salud intestinal

Lavavajillas

Wendelin Jacober/Pexels

  • Un nuevo estudio publicado en The Journal of Allergy and Clinical Immunology apunta hacia las preocupantes consecuencias de los productos químicos pertenecientes a los detergentes lavavajillas.
  • Modelos de células intestinales de laboratorio revelan que dosis altas de componentes de los abrillantadores pueden dañar la salud intestinal.

Cada año se compran en España cerca de 576.000 lavavajillas, según los datos de la Asociación Nacional de Fabricantes e Importadores de Electrodomésticos. El aparato permite ahorrar unos 30,6 litros de agua diarios, según estudios como en realizado en el canal Isabel II. De media, usan 10 litros de agua por lavado.

Sin embargo, un nuevo estudio pone de manifiesto el peligro potencial de los detergentes lavavajillas para la salud. Publicado en The Journal of Allergy and Clinical Immunology, el informe cuestiona la seguridad de determinadas sustancias químicas.

En el laboratorio, varios modelos de células intestinales revelaron que altas dosis de componentes de los abrillantadores pueden dañar la salud intestinal. Hay que tener en cuenta que estos electrodomésticos están diseñados para ofrecer la máxima eficacia, empleando detergente y abrillantador con la mínima cantidad de agua. 

La reciente investigación ha querido conocer la cifra exacta de residuos químicos que se quedan en la vajilla después de que estos lavavajillas comerciales completen un ciclo de lavado, así como los efectos nocivos de estos componentes industriales en el tejido intestinal humano.

Con la edad tu intestino pierde la capacidad de bloquear sustancias tóxicas: estos 7 alimentos pueden impedir este deterioro, según un estudio europeo

"Las sustancias potencialmente tóxicas permanecen en los platos"

"Lo que resulta especialmente alarmante es que en muchos electrodomésticos no se realiza un ciclo de lavado adicional para eliminar los restos de abrillantador", explica Cezmi Akdis, director del Instituto Suizo de Investigación de Alergias y Asma de la Universidad de Zúrich. "Esto significa que las sustancias potencialmente tóxicas permanecen en los platos, donde luego se secan en su sitio".

Gracias a la nueva tecnología de organoides, que permite crear estructuras celulares tridimensionales parecidas a diversos órganos humanos como estómagos, cerebros o corazones en miniatura, el experimento escrutó los efectos de distintas sustancias químicas detergentes en el intestino. 

Los resultados alertan sobre el peligro potencial de estos productos: las sustancias químicas provocaron diversas alteraciones en genes "implicados en la supervivencia celular, la barrera epitelial, la señalización de citoquinas y el metabolismo".

Los investigadores se centraron en las sustancias químicas específicas causantes del daño e identificaron como culpables a los etoxilatos de alcohol, muy comunes en detergentes y limpiadores de superficies para ayudar a desplazar los restos de objetos domésticos.

 

Según investigaciones previas, en teoría los etoxilatos de alcohol no son tóxicos para las células humanas y no hay pruebas de que sean cancerígenos o mutágenos. Es el primer estudio que apunta a sus consecuencias perjudiciales para las células intestinales.

Al detallar las concentraciones químicas residuales en la vajilla, los científicos explican que los mayores daños en las células intestinales procedían de los etoxilatos de alcohol presentes en el abrillantador en diluciones de 1:10.000. 

Lo habitual es que los lavavajillas domésticos empleen un poco más de agua y ciclos de lavado más largos, con factores de dilución calculados en 1:80.000. Los investigadores están más preocupados por los lavavajillas comerciales de ciclo corto que tienen factores de dilución tan pequeños como 1:2.000.

No existen conclusiones claras: los daños intestinales son hipotéticos, pero en el caso de ser reales, estarían vinculadas a las enfermedades inflamatorias y crónicas, desencadenadas por la destrucción de la capa epitelial del intestino. "Es importante informar al público sobre este riesgo", indica el estudio, animando a seguir profundizando en el tema.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.