¿Quién se queda con el dinero del gordo de Navidad si nadie lo gana o lo reclama?

Lotería, venta de décimos en la calle

Jon Nazca/Reuters

  • ¿Qué pasa con los premios de la lotería de Navidad que no son reclamados? ¿Qué sucede si el gordo no se acaba vendiendo?
  • Esto es lo que pasaría con el dinero de los premios de la lotería de Navidad, o de otros sorteos, si nadie lo ha reclamado en el plazo o no lo ha comprado.

¿Te imaginas que en el sorteo de la lotería de Navidad de este 2023 los niños de San Ildefonso cantan el gordo, y resulta que no le ha tocado a nadie porque no ha sido vendido ese número? Peor aún: ¿te imaginas que te toca a ti el gordo, pero no te das cuenta a tiempo y te quedas sin el premio?

Son dos escenarios que pueden suceder, y que de hecho ya han ocurrido, aunque no sea algo frecuente. En uno o en otro caso, ¿qué pasa con el dinero de ese premio; quién se lo queda?

¿Qué pasa con los premios no reclamados de la lotería?

Los premios de la lotería de Navidad, y de otros sorteos y juegos, no se pueden cobrar cuando quieras: pasado el plazo de tiempo que marca la ley, caducan y ya no se pueden reclamar.

La Instrucción General de Loterías establece en su artículo 22 cuánto tiempo tienes para cobrar un premio y qué ocurre con ese dinero si no lo reclamas en tiempo y forma. 

"El derecho al cobro de premios caduca a los tres meses, contados desde el día siguiente al del sorteo a que correspondan. Pasado este plazo, el importe de los premios no reclamados quedará a beneficio del Tesoro", señala en referencia al Tesoro Público y, por extensión, al Estado.

"Este plazo se ampliará en un día si el último del período fuera festivo en la localidad en que se tramite el pago", añade.

Así, en el caso de la lotería de Navidad, el plazo para cobrar un premio empieza el 23 de diciembre, y termina tres meses después, en marzo.

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"Puede parecer increíble que a alguien le toque la lotería y se 'olvide' de cobrar el décimo, pero ocurre más a menudo de lo que imaginas. Según la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado (SELAE), cada año se quedan por cobrar premios de lotería 'fantasma': se trata de décimos o boletos premiados que nadie ha cobrado dentro del plazo, por diferentes motivos: extravíos, descuidos, no comprobar los resultados de la lotería, etc", explican desde Lotería Manises.

Aun así, no ocurre muy a menudo: "El porcentaje de premios que nunca llegan a cobrarse es muy reducido", apunta El Español, que cita también a la SELAE.

Sin embargo, la ley recoge dos excepciones en las que ese plazo de tres meses para cobrar un premio de la lotería puede cambiar: "En los casos de suspensión de pago como consecuencia de lo dispuesto en los dos artículos anteriores, quedará interrumpido el plazo de caducidad hasta que se dicte la resolución o sentencia firme en el procedimiento respectivo".

Uno de estos artículos anteriores que menciona es el 20: "Los billetes rotos o deteriorados que ofrezcan duda sobre su validez, así como aquellos que inspiren sospechas de falsificación, serán sometidos a reconocimiento oficial, y no serán satisfechos sin orden expresa del Jefe del Servicio".

El otro es el artículo 21: "Fuera de los casos previstos en los dos artículos anteriores, no podrá suspenderse el pago de premios, a menos que recaiga y sea comunicada en tiempo oportuno una providencia judicial dictada por la autoridad competente" y que se cumplan los requisitos correspondientes, establece.

Finalmente, Lotería Manises recuerda dos casos especiales que pueden darse y que modificarías las fechas de cobro de la lotería: una suspensión temporal del sorteo, como pasó en 2020, por la pandemia del COVID-19, y el cobro de participaciones (de un club, asociación, colegio, etc.) —estas organizaciones sí tendrán que cumplir con el plazo de tres meses, pero el comprador final puede cobrar su premio más tarde si ambas partes llegan a un acuerdo, al funcionar como un contrato privado—.

¿Qué pasa si el gordo de Navidad no se vende?

Otro hecho poco habitual, pero que puede suceder, es que el número que salga premiado con el gordo de la lotería de Navidad no haya sido vendido anteriormente, por lo que no puede cobrarlo ninguna persona.

En este caso, y en el de décimos con cualquier otro premio que no hayan sido vendidos, el dinero va a parar también a las arcas públicas.

La única vez en la que un número ganador del gordo de Navidad en España no fue comprado por nadie fue en 1931, cuando el primero premio valía 15 millones de pesetas (más de 90.000 euros, al cambio actual) la serie, para un total de 30 millones (más de 180.000 euros).

"¡Oído a la caja! El 24.717, ¡¡¡a la reserva!!!", se escuchó entonces sobre el número cantado, según cuenta ABC en una crónica titulada El año en el que Hacienda se llevó el Gordo

"Lo único que quizá podrán decir es que soy un hombre de suerte", declaró ante las quejas el entonces ministro de Hacienda, Jaime Carner Romeu.

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