Tengo 22 años y trabajo como conductor de reparto de Amazon: las cámaras de mi furgoneta me mantienen en máxima alerta, pero es el trabajo de los sueños y el horario flexible es fantástico

Victoria Goldiee
| Traducido por: 
Ulises Pérez, conductor de reparto de Amazon.
Ulises Pérez, conductor de reparto de Amazon.

Ulises Perez

Este artículo es una transcripción de una conversación mantenida con Ulises Pérez, un repartidor de Amazon de 22 años de Salt Lake, Utah, en EEUU. Se ha editado solo por motivos de extensión y claridad.

Siempre quise ser conductor de Amazon desde que supe de la existencia de un trabajo así.  Esto se debe a la flexibilidad y las ventajas ofrecidas por el trabajo.

Parecía el trabajo ideal para mí. Durante un año fui el responsable de un lavadero de coches, pero el sueldo no era muy bueno. Me encontré pronto al borde del agotamiento porque estaba a cargo de un gran número de empleados con poca o ninguna orientación.

Esperé hasta cumplir los 21, que es la edad oficial para trabajar como conductor de Amazon, y poder incorporarme a mi trabajo soñado. Un tiempo después de dejar mi anterior empleo, encontré una vacante de conductor en Indeed a la que me presenté. El proceso de solicitud fue relativamente fácil y me convertí en conductor en octubre de 2020.

Me gusta la flexibilidad del trabajo

Suelo conducir una furgoneta clásica. La prefiero por la amplitud de la zona de carga y algunos accesorios interesantes del interior. Hay un ventilador que ayuda durante las olas de calor y una puerta trasera que hace que mis movimientos sean accesibles.

Los autónomos con los que trabajo son flexibles con los horarios, lo que me permite compaginar mi trabajo con lo que hago fuera de él. Por ejemplo, soy muy aficionado al gimnasio, y soy creador de contenidos en diferentes plataformas, por lo que esta flexibilidad me ayuda mucho. 

(Nota de la autora: Ulises, como muchos conductores de entrega de Amazon, fue contratado por un socio de servicio de entrega local que se considera una subcontrata independiente con Amazon).

Ser conductor en una ciudad menos poblada tiene sus ventajas

Comparado con lo que supone conducir en ciudades más grandes, mi trabajo es más fácil la mayor parte del tiempo. De vez en cuando me persigue algún perro, pero aparte de eso, el trato con los clientes es muy limitado, salvo en los casos en los que tengo problemas para acceder a los edificios. 

Cuando hago entregas, me aseguro de dejar los paquetes de los clientes en la puerta de su casa. Siempre tengo que estar en alerta y hacer mis rondas con rapidez y eficacia para poder cubrir con éxito todas mis rutas.

A veces tengo ocasión de ver gente conocida como amigos y familiares cuando hago entregas en rutas que hago mucho. Me siento bendecido y agradecido por poder conectar con la gente que me rodea, aunque sea un poco, mientras trabajo.

Tengo que prepararme mentalmente para los turnos de más actividad

Las cámaras de 270 grados de Amazon que funcionan con IA y que se utilizan para detectar nuestros movimientos mientras conducimos fueron inicialmente una de las partes más molestas del trabajo para mí y para otros conductores, pero he llegado a acostumbrarme. 

Normalmente solo graba si me salto un stop o acelero, pero como no son cosas que haga, he llegado a verlo como un complemento necesario. No parece que vaya a desaparecer pronto.

Un día típico en el trabajo comienza cuando me despierto y me dedico un poco de tiempo a mí mismo para prepararme mentalmente para el día que me espera. Luego llego al almacén, normalmente sobre las 8 de la mañana, donde nos reunimos todos. Entonces cogemos nuestras bolsas, que llevan las llaves de la furgoneta, y nos ponemos en fila para cargar los paquetes de entrega en nuestras furgonetas.

Después de esto, suelo ponerme en marcha durante 10 horas o más sin apenas descansos. Llego a casa a última hora de la tarde con una media de más de 40 horas en la carretera cada semana. Nuestros supervisores y gerentes están constantemente subiendo el listón de cuántos productos más podemos repartir en un día en este lapso de este tiempo.

La carta que Jeff Bezos mandó a los accionistas de Amazon en 1997 es una clase gratuita de MBA sobre liderazgo: 4 lecciones que puedes aprender de ella

En ocasiones, ni mis compañeros ni yo tenemos tiempo para comer

En cierto modo, ser conductor de Amazon es un trabajo físicamente agotador en el que hay que estar muy atento para evitar que te reprendan o te pongan una multa, pero también es fácil al mismo tiempo.

Creo que sería una buena opción para estudiantes y quienes buscan un dinero extra. Sin embargo, en mi ciudad los vaivenes meteorológicos que se producen en ciertos momentos del año se suman al estrés del trabajo.

Utilizo las redes sociales como medio para aliviar mi estrés

Me gusta compartir información sobre el trabajo y comunicarme con mis compañeros. Utilizo regularmente mi TikTok para crear vídeos divertidos y atractivos mientras estoy en la carretera. Comparto consejos, información y conocimientos generales con mis seguidores, algunos de los cuales son compañeros conductores de Amazon u otras plataformas.

Me gusta pensar que he creado una especie de nicho. Ya hacía TikToks antes de entrar en la empresa, pero decidí utilizar mis experiencias laborales para crear contenidos. Ha sido hasta ahora algo muy satisfactorio.

A veces incluso me reconocen algunos de mis seguidores mientras conduzco por la carretera. Cuando esto ocurrió la primera vez, me desconcertó mucho. Pensé que era una broma o que me estaban confundiendo con otra persona, pero resultó ser real. Los dos nos reímos de lo absurdo de la situación antes de que me fuera.

"Arañas de agua" y "swaggies": este es el significado de 15 expresiones secretas que solo conocen los trabajadores de Amazon

Tenemos que abogar por una mejor remuneración

Tanto yo como otros empleados de Amazon que conozco apoyamos la organización de un sindicato. Espero que esto ocurra pronto, ya que todos nos merecemos mejores salarios y un entorno de trabajo saludable y con menos tensiones.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.