Veranillo de San Miguel: ¿cuándo es y por qué se le llama así?

"No quedan días de verano, canta Amaral". Aunque le faltaba decir que siempre nos quedará el veranillo de San Miguel —o que, por desgracia, los veranos son cada vez más largos a causa del cambio climático—.

¿Qué es el veranillo de San Miguel? Aunque algunos han acuñado la horrenda palabra de veroño —que todavía no recogen los diccionarios, pero sí ha sido incluido provisionalmente en el Observatorio de palabras—, este término de la cultura popular otorga este diminutivo de verano a un episodio atmosférico que tiene lugar en el hemisferio norte durante el otoño.

¿Cuándo es el veranillo de San Miguel?

Se produce en torno al 29 de septiembre —día del patrón— y sus días contiguos. 

¿Qué pasa en el veranillo? Como su propio nombre indica, alude a un último coletazo del verano: aunque el otoño meteorológico —y también el astronómico— ya hayan comenzado, las temperaturas sufren un momentáneo ascenso, que obedece a valores más típicos del verano. Dura unas jornadas y luego se recupera la bajada de temperaturas típica del otoño.

Como curiosidades, tiene más nombres: según la región, también se le llama veranillo de los Arcángeles o el veranillo del membrillo, por coincidir con la maduración de este fruto tan dulce. En Estados Unidos se produce un fenómeno similar llamado Indian Summer, mientras que en los países de habla alemana se le llama Altweibersommer.

¿Tiene alguna clase de evidencia científica?

Desde Eltiempo.es matizan esta cuestión: no hay evidencia científica del fenómeno, simplemente una atmósfera cambiante propia de las estaciones de transición —como son el otoño y la primavera— en las que se intercalan los días cálidos con los frescos. 

"Si miráramos más lejos, esa tendencia de cambios de tiempo continuaría unas semanas más hasta que el otoño esté plenamente instalado", señala el blog meteorológico.

¿Qué tiempo hará en España en otoño de 2023?

Para demostrar que unos años ocurre y otros no, recurren a las efemérides y recuerdan que en torno al 29 de septiembre hubo riadas en Murcia en 1664 y —con una veintena de muertos—; en 1764 en Málaga, en 1791 en Valencia y en 1858 en Cartagena. Los días 29 y 30 de septiembre de 1997 hubo también trágicas inundaciones en Alicante. 

Y hace menos tiempo, en 2012 se produjeron riadas entre el 27 y el 29 de septiembre que afectaron a Lorca, Puerto Lumbreras, Málaga, Almería o Alicante. No siempre vuelve el verano en estas fechas del calendario.

No es la única fecha de este estilo en otoño: en torno al 11 de noviembre también se produce el veranillo de San Martín, vinculado a nivel popular con otro coletazo del verano, traducido en días tranquilos y soleados, templados para la época del año.