5 errores de gestión del tiempo que debes dejar de cometer

reloj, gestión de tiempo
  • Puede que tengas muchas obligaciones, pero también que estés organizando mal tu día a día. Así que prueba a hacer las cosas de manera diferente.
  • Por ejemplo, puedes empezar a evitar estos errores básicos y comunes a la hora de gestionar tu tiempo.

Quieres ser más productivo en el trabajo y tener una vida plena en lo personal. Entonces te das cuenta de que es difícil de conseguir. No importa cuánto lo intentes, las obligaciones no dejan de crecer mientras que las horas parecen cundir cada vez menos, por lo que nunca llegas a todo.

Puede ser bueno que empieces a usar aplicaciones de gestión de tiempo, a anotar tus tareas y a saber cómo priorizar. Antes de eso quizá convenga darte cuenta de que hay ciertos errores de base que estás cometiendo por los cuales el tiempo se te escapa de las manos.

Presta atención a estos enfoques propuestos por el periodista Parker Klein basadas en el libro Four Thousand Weeks, de Oliver Burkeman. La premisa de la obra es que de media, una persona vive unas 4.000 semanas. "La vida humana promedio es absurda, aterradora e insultantemente corta", por lo que mejor aprende a no malgastarla.

Intentas hacer más sin saber en qué centrarte

Dedicar 10 minutos hoy a planificarte es una de las estrategias más poderosas que hay para ser verdaderamente proactivo, dirigiendo el día de acuerdo con los objetivos y prioridades marcados, tal y como recomendó previamente una coach organizativa que trabaja con empresas como Google o Lyft.

Lo que pasa es que a veces es difícil saber en qué tienes que centrar tus esfuerzos. Vamos, que quieres priorizar y todo resulta aparentemente igual de importante. Por ello todo empieza, por a aprender a tomar decisiones "conscientemente" sobre en qué centrarse y qué dejar a un lado.

Para ello puedes basarte en el consejo de Warren Buffet, sugerido por Klein: haz una lista de las 25 cosas principales que deseas de la vida y ordénelas, de la más importante a la menos. Las 5 primeros deberían ser aquellas en torno a los cuales organizas tu tiempo

Las 20 restantes deberían evitarse activamente a toda costa, porque son ambiciones que no son lo suficientemente importantes para ti.

Te concentras demasiado el futuro

Se ha llegado al punto en el que se valora cada momento según su utilidad para alguna meta futura, o para algún futuro oasis de relajación que esperas alcanzar una vez que tus tareas finalmente estén acabadas, advierte el autor.

Esto te saca del presente, inclinándote hacia el mañana. Te pasas la vida "preocupándote por si las cosas saldrán bien, experimentando todo en términos de algún beneficio posterior esperado, de modo que la paz mental nunca llega del todo".

Párate de vez en cuando a preguntarte cómo te sientes en este momento y qué necesitas hacer ahora mismo.

Ignoras tus limitaciones

Como señala en su libroBurkeman, es irracional sentirse preocupado por una abrumadora lista de tareas pendientes. "Harás lo que puedas, no harás lo que no puedas, y la tiránica voz interior que insiste en que debes hacerlo todo está simplemente equivocada".

Frente a esto, una buena actitud que acepta los límites del tiempo es aquella que organizar los días con el entendimiento de que definitivamente no habrá espacio para todo lo que se quiera hacer, o para lo que otras personas quieren que hagas, y así, como mínimo, puedes dejar de martirizarte por fallar.

 No te priorizas

Puede que la ociosidad sea algo en extinción en los días actuales. Sin embargo dedicarte un tiempo a ti, en el que simplemente no hagas nada puede convertirte en una persona más feliz, relajada y también eficiente.

"Si no te guardas un poco de tiempo ahora, cada semana, no habrá un momento en el futuro en el que mágicamente termines con todo y tengas mucho tiempo libre", enfatiza Klein.

De hecho, la especialista en gestión de tiempo Alexandra Barragán, ya señaló como uno de los grandes errores en gestión no bloquear en la agenda espacios de ocio o tiempo libre para uno mismo.

Quieres estar en todo

En un mundo que se encamina hacia las prisas, la capacidad de resistir el impulso de apresurarse es una forma de hacer el trabajo que cuenta y obtener satisfacción de hacerlo.

Trabajar demasiado apresurado te hará cometer más errores, que luego te verás obligado a corregir. "Ríndete a la realidad de que las cosas simplemente toman el tiempo que toman".

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.