5 problemas de salud que puedes prevenir gracias a las judías verdes

Las judías verdes son una hortaliza muy presente en la cesta de la compra en España. Pese a haber sufrido un descenso en los últimos años, solo en 2020 se consumieron 84 toneladas de judías verdes frescas, según datos de Statista.

Aunque se pueden disfrutar todo el año congeladas o procedentes de invernaderos, desde ComeFruta recomiendan comer judías de temporada entre octubre y julio. Además de ser versátiles y económicas, destaca su potencial nutritivo.

Según la Fundación Española de la Nutrición, 100 gramos de una porción comestible de judías aportan 37 calorías, 2,3 gramos de proteína, 0,2 de lípidos, 5 de hidratos de carbono, 3 de fibra y minerales como el calcio, el hierro, el yodo, el magnesio, el zinc, el sodio y el potasio. 

En cuanto a su composición vitamínica, las judías verdes suponen una fuente de folatos y vitamina C. También presentan pequeñas cantidades de alfa y betacarotenos y luteína, junto a numerosos compuestos polifenólicos. 

Desde Eat this, Not Thatdestacan algunos estudios que apuntan a las enfermedades que las judías verdes son capaces de prevenir. 

Evitan el estreñimiento y favorecen la función intestinal

Las judías son una fuente idónea para proporcionar fibra al cuerpo, clave para aumentar la frecuencia y el tamaño de las deposiciones y combatir el estreñimiento. 

Una de las principales ventajas de ingerir judías verdes es que tienen fibra soluble e insoluble. La primera conlleva beneficios como la capacidad de reducir el colesterol LDL o colesterol malo. 

De hecho, consumir de 2 a 10 gramos de fibra soluble por día está relacionado con una disminución significativa tanto del colesterol total como del colesterol LDL.

Bajan la posibilidad de defectos congénitos en el bebé

Un nutriente clave durante el embarazo es el folato o ácido fólico, esencial para reducir el riesgo de desarrollar ciertos defectos de nacimiento, como la espina bífida. 

Como indican desdeFood Data Central,una taza de judías verdes contiene 33 microgramos de ácido fólico, lo que ayuda a las mujeres embarazadas a satisfacer sus necesidades del nutriente. 

Estimulan el sistema inmunológico 

Las judías son buenas amigas para tus defensas gracias a los nutrientes que contienen, en especial la vitamina C, el zinc y la vitamina A. 

En concreto, es clave cuidar los niveles óptimos de este mineral para que la respuesta inflamatoria no suba y no ser más susceptibles a futuras infecciones. 

Reducen la presión arterial 

Estas pequeñas verduras también contienen un antioxidante único llamado quercetina, que combate el estrés oxidativo en el cuerpo y también reduce de forma natural la presión arterial. 

El corazón también se ve beneficiado por el potasio y magnesio, que previenen la formación de trombos. 

Menor riesgo de algunos tipos de cáncer

Detrás de esta propiedad se encuentra otro antioxidante flavonoide llamado kaempferol.

En diversos estudios se alude a su capacidad para inhibir el crecimiento de las células cancerosas y defender al cuerpo contra los radicales libres, que son moléculas muy reactivas, necesarias para realizar determinadas funciones y mantener el estado de salud. 

Otras de las ventajas de las judías verdes es su capacidad para mejorar tu metabolismo, el fortalecimiento de los huesos gracias a la vitamina K o su capacidad para controlar el peso, ya que son un 90% agua.