Los 3 secretos de la longevidad de un hombre de 100 años: empatía, pasión por la música y comer medias raciones

Cuando Roger Wonson celebró su 100 cumpleaños con amigos en la residencia en la que vive, él mismo se encargó de animar la fiesta ccon buena música.

Y es que este ingeniero jubilado, que cumplió 100 años el 20 de abril de 2024, toca la batería como líder del grupo The Current Voltage, con una ecléctica propuesta en la que tienen cabida desde jazz y swing hasta rock and roll.

"Me divierte mucho la música", explica Wonson a Business Insider. "Siempre me ha hecho feliz".

Destaca que su pasión le ha ayudado a tener una actitud positiva, sobre todo porque disfrutaba divirtiendo a los demás.

"Es estupendo ver a la gente cantar y mover los pies", celebra.

En su fiesta de cumpleaños, Wanson ocupó el centro del escenario en su fiesta junto a su compañera de banda Michelle Boudreau, de 39 años, coordinadora de actividades, que tocó la voz y la guitarra.

Wonson se alegra de no ajustarse al estereotipo de alguien de su avanzada edad.

Un tercer miembro de la banda —otro residente de la residencia— se incorporará al grupo musical oficialmente una vez que el centro adquiera un piano.

El bisabuelo de nueve hijos está orgulloso de no ajustarse al estereotipo de cómo debe ser y comportarse un hombre mayor. Atribuye su longevidad a los buenos genes (su madre casi llega a los 100 años y su padre a los 90) y a una actitud divertida.

Dice que las personas que quieran llevar una vida larga y plena apreciarán algunos de sus consejos.

Mostrar empatía

Wonson afirma que el secreto de las relaciones sólidas es la empatía.

"Es fácil caer en la confrontación si no te pones en el lugar de la otra persona e intentas ver las cosas desde sus zapatos", afirma.

"Lo mejor es tener en cuenta su punto de vista en lugar de defender el propio", indica.

El veterano dice que su matrimonio —que duró nada más y nada menos que 75 años— se ha nutrido de la empatía.

"Mi mujer y yo siempre nos escuchábamos y respetábamos el punto de vista del otro", dice de su esposa, Mary Sue, fallecida en 2022 a los 100 años.

"Evitábamos la confrontación y jugábamos limpio", relata.

"Ten cuidado con lo que dices a los que te rodean porque no puedes retirar nada una vez que se ha dicho", añade.

En este aspecto, Wonson ha aprendido esta actitud de su padre, quien, según él, "nunca perdía los nervios ni decía nada mezquino".

Para él, congeniar y ser cómplice es clave para una existencia sana y sin estrés porque "la tensión disminuye el milagroso control de nuestro sistema inmunitario".

Encuentra tu pasión

Wonson, especialista en comunicaciones, se labró una exitosa carrera tras la Segunda Guerra Mundial, cuando dejó las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos para trabajar en una empresa que desarrollaba misiles para el gobierno.

Pero no dejó que su trabajo de 40 años le definiera. Se estableció como músico —incluso fue contratado como vocalista profesional— y dedicó todo el tiempo posible a sus intereses personales.

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Tocó el saxofón y la batería en varias bandas de su estado natal, Massachusetts. "Me encanta el ritmo, el tono del saxofón y el sonido de la escobilla", afirma. "Cuando entretienes a la gente, obtienes placer de su placer".

El centenario —que llegó a poseer más de 40 saxofones— no limita sus pasiones a la música.

Explica que sigue manteniendo la mente despierta fotografiando naturalezas muertas y escuchando charlas Ted. Sus programas de televisión favoritos son los documentales de PBS, especialmente las series sobre la vida salvaje.

Comer ligero, beber agua y hacer ejercicio con pesas

Este centenario, que abandonó el tenis como deporte hace solo 15 años, se niega a ser sedentario. Ha ideado su propio régimen de ejercicios, levantando pesas por encima de la cabeza.

"Hago algunas series durante las pausas publicitarias de la televisión", dice, y añade: “Es importante mantener el tono muscular”.

Aun así, tiene cuidado de no excederse. Hace poco cambió sus mancuernas de kilo y medio por las de medio kilo siguiendo el consejo de un experto.

Wonson dice que otra de las razones por las que haccce ejercicio es proteger su equilibrio. "Me caí hace unos tres meses, pero no me rompí ningún hueso", señala a Business Insider.

"Desde entonces, he estado trabajando en mi estabilidad", cuenta. "Porque si vuelvo a caerme, será el principio del fin".

Bromeó diciendo que su bisnieto menor, Declan, de 2 años, comparte su mismo objetivo. "Estamos en la misma situación, solo que cuando él se cae, se levanta más rápido".

En cuanto a su dieta, relata que el chef de su centro asistencial, The Current Beverly, le sirve medias raciones de comida.

"No como mucho", dice Wonson. Se asegura de comer muchos vegetales y rara vez come postre. "Si lo hago, es en cantidades muy pequeñas".

Es consciente de los peligros concretos de que las personas mayores se deshidraten. "La gente recomienda beber ocho vasos de agua al día para que todo siga funcionando", dice. "Creo que ocho es demasiado, pero me aseguro de beber mucha agua con cada comida".

Mientras tanto, se permite algún que otro vaso de vino. "Me gusta el zinfandel porque es dulce. Pero es cierto lo que dicen de la moderación".