Acné en la adolescencia: por qué salen granos en la cara y cómo tratarlos

Durante la adolescencia es muy común que el acné haga acto de aparición en el rostro de los jóvenes. Muy pocas personas se libran de padecer granos durante esta etapa de su vida. Estudios han asegurado que el 80% de los adolescentes pasan por la fase del acné.

La pregunta es por qué salen granos en la cara durante la adolescencia. Se trata de un momento de cambios significativos en el cuerpo. El organismo se encuentra bajo una revolución hormonal que, según la OMS, abarca desde los 10 hasta los 19 años.

Al inicio de la pubertad, el cuerpo comienza a producir hormonas sexuales, responsables de los cambios que se experimentan durante esta etapa. Por ello, se produce un aumento en la producción de grasa, lo que desemboca en la acumulación de sebo junto a diferentes bacterias que inflaman la piel. Es entonces cuando aparecen las espinillas.

Este exceso de secreción de grasa afecta a la piel, concretamente a la llamada zona T de la cara (frente, nariz y barbilla), y al pelo. Los episodios más severos de acné suelen darse más en los hombres que en las mujeres.

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Cómo cuidarte la piel si tienes acné

Los casos más graves de acné han de ser atendidos por especialistas ya que podría ser necesario seguir un tratamiento antibiótico en forma de pastillas o crema. Algunas medicaciones son tan fuertes que deben ser supervisadas por el médico.

Si el acné es leve, pueden usarse cremas o lociones cuyos componentes ayuden a destapar el poro, y combinados con otros incluso pueden reducir la población bacteriana. Incluso existen remedios naturales para tratar este problema. Además de estos tratamientos se pueden seguir ciertas rutinas para evitar la aparición descontrolada de brotes de acné:

• Eliminar el uso de maquillaje. Un error muy común es querer tapar los granos. Sin embargo, esto hace que la piel no respire y la cantidad de granos se multiplique.
• Lavarse la cara. Para retirar restos de sudor, u otras sustancias grasas, es recomendable lavarse la cara dos veces al día con agua y jabón suave. Es importante que la limpieza se lleve a cabo con la yema de los dedos.
• No reventar los granos. Aunque sea difícil ver un grano y no explotarlo, es mejor que lo dejes como está. Tocar la zona puede empeorar la situación. Incluso dejar cicatrices.

Factores como una mala alimentación, un clima demasiado cálido o el estrés pueden perjudicar a las personas que padecen acné. Por ello, hay que ser consciente de qué cosas puedes cambiar para mejorar la situación, y que el acné no te domine.