Esto es lo que Goldman Sachs quiere que estudie un programador, y no es informática

Bianca Chan
| Traducido por: 
programadora
  • La IA puede generar código más rápido, y a menudo mejor, que los humanos. Eso está cambiando lo que se necesita para ser un desarrollador de software de éxito en Wall Street.
  • Los ejecutivos explican por qué es importante estudiar carreras de humanidades como filosofía, psicología o literatura. 

La inteligencia artificial está redefiniendo lo que se necesita para ser ingeniero de software en Wall Street.

Un desarrollador de software típico es licenciado en Informática. Son pensadores analíticos y suelen ser más introvertidos, pasan más tiempo hablando con máquinas, en lenguajes de programación, que haciendo negocios.

Pero en la era de la inteligencia artificial, en la que los modelos pueden generar código más rápido, y a menudo mejor, que los humanos, la formación típica de un ingeniero informático está cambiando.

El director de Informática de Goldman Sachs, Marco Argenti, animó recientemente a su hija, estudiante universitaria, a concentrar su educación en la Filosofía si quiere seguir una carrera en ingeniería. 

"Viniendo de un ingeniero, esto puede parecer contraintuitivo, pero la capacidad de desarrollar modelos mentales nítidos en torno a los problemas que quieres resolver y entender el porqué antes de empezar a trabajar en el cómo es un conjunto de habilidades cada vez más críticas, especialmente en la era de la IA", ha escrito Argenti recientemente en un artículo de Harvard Business Review

Tras décadas dirigiendo equipos de ingeniería en Goldman Sachs y Amazon Web Services, Argenti afirma que formular las preguntas adecuadas es una de las habilidades más importantes que ha aprendido. "No es muy distinto de la IA: la calidad del resultado de un gran modelo lingüístico es muy sensible a la calidad de la pregunta", añadió.

 

Para que quede claro, tener conocimientos técnicos, ya sean matemáticas, informática o análisis de datos, sigue siendo fundamental en la ingeniería de software. Sin embargo, cada vez es más importante entrenar la parte más creativa del cerebro a través de cursos de escritura y ciencias sociales, como literatura, filosofía y psicología, según algunos de los principales ejecutivos tecnológicos y reclutadores de Wall Street. De este modo se preparará a las próximas generaciones de ingenieros informáticos y se contribuirá a que sus puestos de trabajo estén a prueba de IA.

Con la IA generativa, es posible que las personas, incluso las que no trabajan en tecnología, escriban un comando en inglés sencillo y que los modelos generen líneas de código que se ejecuten con esa petición. Esta disciplina emergente se denomina ingeniería de instrucciones (ingeniería de prompts, según la palabra inglesa) y se está convirtiendo en una pieza clave para el éxito o el fracaso del código generado por IA.

"Si no se acierta, la IA generará un código que, en el mejor de los casos, será plausible y, en el peor, incorrecto y peligroso", afirma Argenti. El codirector de información de Citi, Shadman Zafar, se hizo eco de la importancia de una comunicación clara y concisa y de las habilidades de escritura cuando se trata de código.

"A medida que avanza la inteligencia artificial, la comunicación clara y convincente adquiere mucha más importancia, y la capacidad de formular las preguntas de forma correcta, sólida y segura también marca la diferencia", declaró Zafar a Business Insider. Por ello, la comunicación y la psicología se están convirtiendo en "especialidades más valoradas por los estudiantes", afirma.

Zafar dijo que está prestando más atención a personas con "una licenciatura en informática y una especialización en literatura", o "una licenciatura en psicología y una especialización en informática".

Jensen Huang, CEO de Nvidia, la empresa fabricante de chips que se ha disparado con el auge de la IA, llegó a aconsejar a las próximas generaciones que no aprendieran a programar. En la Cumbre Mundial de Gobiernos celebrada en Dubai en marzo, afirmó que la programación ya no es una habilidad crítica con la IA.

Ese sentimiento fue compartido por Ken Griffin, el multimillonario CEO del hedge fund Citadel, quien dijo que los días de ser "un buen programador están contados". En su lugar, el éxito de un tecnólogo dependerá de que sea realmente un buen solucionador de problemas, lo que implica comprender el negocio y los aspectos comerciales de la tecnología.

Aunque aún está por ver si la IA sustituirá a los ingenieros de software, aquellos que quieran preparar su trabajo para el futuro deberían pensar en las partes del trabajo de las que podría encargarse la IA y centrarse en las tareas en las que hay un humano en el bucle, según Deepali Vyas, responsable global de tecnología financiera e inteligencia aplicada de la empresa de búsqueda Korn Ferry.

"Ese ingeniero de software podría ser sustituido por una especie de ingeniero rápido", dijo Vyas. Si ese fuera el caso, "me aseguraría de tener buenas aptitudes para la resolución de problemas, el pensamiento crítico y la escritura", dijo. 

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