Así afecta a tu salud leer en cama con poca luz cada noche

Se sabe que la lectura diaria acarrea numerosos beneficios para la salud: estimula la mente, reduce los niveles de deterioro cognitivo, amplía el vocabulario o la imaginación, calma la ansiedad y te dota de destreza y concentración. Si además de comerte los libros como Matilda, sueles leer de noche, reducirás el estrés diario, te dormirás más rápido y obtendrás un sueño de mayor calidad.

Aunque no exista mayor placer que acurrucarse en la cama con una buena novela, es probable que te hayas preguntado en algún momento si es malo para la vista la lectura nocturna con luz tenue. ¿Es malo para tus ojos leer con poca iluminación? Luis Rojas, optometrista terapéutico de DeNovo Eye en McKinney (Texas) y asesor de Johnson & Johnson Vision lo resuelve para Livestrong.

Leer con una luminosidad inferior a la óptima no destrozará tu vista, pero tiene varios efectos negativos desagradables

"Nuestros ojos están diseñados para adaptarse a distintos niveles de luz y se ajustan automáticamente cuando nos esforzamos por leer un libro con poca luz", detalla el especialista. 

Sin embargo, sí que hay problemas asociados a este hábito persistente: si te ves obligado a forzar la vista, al cabo de un rato notarás la vista borrosa, los ojos cansados o dolor de cabeza. Además, gran parte de la población ya sufre fatiga visual debido a la exposición prolongada a las pantallas de los dispositivos tecnológicos durante muchas horas al día.

También puedes notar los ojos secos o irritados, tal y como explica Luis Rojas. "Nuestros ojos necesitan una lubricación constante para hidratar y proteger la superficie ocular de la sequedad, así como para ayudarnos a ver con claridad".

Uno de los efectos de la lectura prolongada con poca luz es que puede reducir el contraste general, lo dificultando la eficacia de la lectura. Otra consecuencia es que parpadees menos veces, lo que ocasiona la molesta sequedad ocular. 

Cuanto más tiempo leas con poca luz, más efectos negativos aparecerán. Por ejemplo, la oscuridad dilata tus pupilas, por lo que las palabras del libro podrían apreciarse brillantes o distorsionadas. "Esto puede llevar posteriormente a entrecerrar más los ojos para ver las palabras con más claridad, lo que puede provocar fatiga ocular", afirma la doctora Rojas.

Afortunadamente, estos problemas no dañan los ojos a largo plazo.

Trucos para reducir la fatiga ocular al leer de noche

Si de todos modos quieres reducir las molestias asociadas a la fatiga ocular, hay varios trucos que puedes poner en práctica: 

• Coloca la fuente de luz detrás de ti, de manera que se dirija a la página. Si tienes que forzar la vista para leer, precisas aumentar la luz o modificar la posición de la lámpara. 
• Descansa la vista 20 segundos cada 20 minutos, dirigiéndola a algo que esté a 6 metros de distancia.
• Limita el tiempo seguido de lectura y sobre todo, de pantalla. Puedes alternarlo, por ejemplo, con la escucha de música o de un pódcast, descansando la vista.
• Utiliza lágrimas artificiales si tienes sequedad ocular o irritación en los ojos. 
• Habla con tu oftalmólogo si persisten problemas como la visión borrosa, el picor de ojos, la sequedad ocular crónica, la sensibilidad a la luz o los dolores de cabeza, ya que podrían ser síntomas de un problema ocular subyacente.

En definitiva, leer con poca luz no daña tu vista a largo plazo, pero puede ocasionar una experiencia de lectura mermada o desagradable. Como ves, con un pequeño puñado de cambios puedes solucionarlo subiendo la intensidad de la luz, moviendo la lámpara o propiciando que tus ojos descansen.