Placas solares de Bricomart: características y precios

Un hombre instala unas placas solares en una casa.

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Con la tremenda subida en el precio de la luz que se está produciendo en los últimos meses, ha crecido también el interés de los ciudadanos por las instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo. Las tiendas más importantes amplían su gama de placas solares para que cada usuario pueda adquirir el producto que más se adapte a sus necesidades. 

Un buen ejemplo son los paneles solares para autoconsumo de Leroy Merlin. Y otra muestra es la oferta de Bricomart. En total, son 7 las placas fotovoltaicas que están a la venta en esta tienda. 

El más barato cuesta 85 euros y es el panel solar policristalino ATERSA GS 160W. Dispone de una caja de conexión que lleva incorporados diodos de protección para que en caso de sombreados parciales las células queden protegidas. 

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En el extremo contrario, en cuanto al precio, está el panel solar de 455W JA Solar mono. Su eficiencia, explican en Bricomart, es del 20,4% y sus células son monocristalinas PERC lo que hacen que su producción sea superior y tenga un mejor rendimiento térmico. Su corriente de máxima potencia es 11A y la tensión de máxima potencia es 41,44V. Cuesta 181 euros.

Además, también disponen de un kit de autoconsumo de 1.000 W, que está compuesto por 4 placas solares de 270w y un inversor de conexión a red 1500w compacto y ligero.

¿Cómo funcionan los paneles solares para autoconsumo?

El funcionamiento de los paneles solares para autoconsumo lo explican de manera muy sencilla en el blog de Endesa, y es el siguiente: los rayos solares chocan contra las placas solares fotovoltaicas, que están formadas por materiales semiconductores y transforman la energía recibida en electricidad. 

Quien se encarga de esta transformación son las conocidas como celdas solares, que son pequeñas células hechas de silicio cristalino o arseniuro de galio.

Estas celdas solares se mezclan con otros componentes como el fósforo y el boro para formar 2 partes: una cargada con electrones negativos y otra con positivos.

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Cuando la celda solar se expone al sol, los fotones consiguen mover los electrones de la parte donde sobra carga negativa hacia la parte en la que falta. A medida que los fotones van liberando electrones se va generando más y más electricidad

Los electrones que no se utilizan o que provienen del viento regresan al panel negativo, haciendo que todo empiece de nuevo en un proceso sin fin.

Con ello se produce corriente continua, la cual se almacena en baterías hasta ser convertida en corriente alterna (la que llega a tu hogar) a través de los inversores de voltaje, que son otro elemento imprescindible en el funcionamiento de las placas o paneles solares, puesto que cambian la dirección de la corriente continua de modo suave y constante y la convierten en alterna.

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