Así es el celo de una perra: duración, fases y comportamientos

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  • La castración es la forma más efectiva para asegurarse de que no sufrirán los cambios de comportamientos que implica.
  • ¿Cuántas veces al año puede tener el celo una perra? Estas son las épocas del año más propicias.

Si eres dueño de una perra, es importante que conozcas todo lo relacionado con su salud y bienestar y eso incluye su ciclo de celo. El celo es un proceso natural en el que el can experimenta cambios hormonales que preparan su cuerpo para la reproducción, pero tiene sus inconvenientes en cuanto al comportamiento del animal. Por ello, es necesario saber cuánto dura esta etapa para identificarla.

El ciclo de celo de una perra es un proceso complejo que varía de raza a raza e incluso según el mismo animal. En general, el ciclo de celo de una perra suele durar alrededor de 21 días, pero puede ir desde 18 a 24 días. Durante este tiempo, experimentará 3 fases distintas: proestro, estro y diestro.

La fase de proestro es el inicio del ciclo del celo de una perra, durante la cual se produce la hinchazón de la vulva y una descarga vaginal de color rosado. Esta primera fase puede durar de 4 a 20 días, en los que la perra puede mostrar signos de agresividad hacia los machos durante este tiempo.

La fase de estro es la fase más fértil del celo. En ella, la descarga vaginal se vuelve más clara y la hinchazón de la vulva alcanza su punto máximo. Es normal que muestre un comportamiento de apareamiento durante este tiempo. Dependiendo de la raza, esta fase dura de 5 a 13 días.

La de diestro es la última fase del ciclo de celo de una perra. Durante esta fase, la perra no es fértil y la descarga vaginal se vuelve más espesa y de color marrón. La hinchazón comienza a disminuir y suele haber menos interés en el apareamiento. La fase de diestro dura de 60 a 90 días.

Es importante destacar que el ciclo de celo de una perra puede variar mucho dependiendo de factores como la raza, la edad y la salud general de la mascota. 

También hay que tener en cuenta que las perras pueden experimentar ciclos de celo irregulares y que algunas pueden entrar en celo dos veces al año, mientras que otras solo una vez. La realidad es que puede ocurrir en cualquier época, pero lo más normal es que se dé al inicio de la primavera y del otoño. Para evitarlo, lo mejor es la castración.

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