Un propietario de un Tesla asegura que escuchó un silbido procedente de la batería el día antes de que se incendiara en su garaje. 

El vehículo, un Model X, se incendió el viernes y los bomberos tardaron horas en apagarlo después de que lo cubrieran con una lona y lo sacaran a la calle en la ciudad de Plano, Texas, según informó la cadena local WFAA, afiliada de ABC.  

El propietario del Tesla explicó a WFAA que le instalaron la nueva batería el jueves en un concesionario Tesla de Plano, que forma parte del área metropolitana de Dallas-Fort Worth.

Cuando comprobó el coche en las primeras horas de la mañana del viernes, vio llamas procedentes de la batería y llamó a los bomberos. 

Un vídeo del incidente compartido por la BBC muestra el vehículo envuelto en llamas con varios bomberos intentando apagarlo con mangueras. A continuación, muestra el coche levantado por un lado y cubierto de ceniza después de que el fuego fuera extinguido, mientras que todavía sale humo del vehículo.

"Los chicos pensaron rápido. Una vez que pusieron la lona en el coche y fueron capaces de contener el fuego debajo de esa lona, rápidamente engancharon algunas cadenas de remolque debajo y lo arrastraron usando uno de nuestros camiones", explica Daniel Daly, teniente de Plano Fire-Rescue, a la cadena de noticias. 

Daly explicó que aún se está investigando la causa del incendio. Añadió que sabían que "tenían que llegar a esa batería" porque se trata de un vehículo eléctrico. 

Afortunadamente, el equipo de rescate de bomberos en Plano están especialmente entrenados sobre cómo contener un incendio de batería de litio y enfriarlo. 

Los incendios de coches eléctricos son "extremadamente difíciles de extinguir", según un servicio de bomberos y rescate del Reino Unido. Esto se debe a que las baterías de litio desprenden calor por la energía que almacenan, además de gases tóxicos. 

Además, las baterías corren el riesgo de incendiarse varias veces después del primer incidente, lo que supone un peligro de incendio durante varios días, explica el Servicio de Incendios y Rescate del Condado de Essex en un comunicado de prensa de julio sobre la adaptación al nuevo peligro. 

Otro Tesla "se incendió espontáneamente" en una autopista de California en enero y se necesitaron unos 22.000 litros de agua para extinguirlo.

"Un vehículo de combustión tradicional totalmente involucrado puede extinguirse con el suministro de agua de un solo camión de bomberos de 2700 litros", señalaron los Bomberos Metropolitanos de Sacramento en una publicación de Facebook. Añadieron que el incendio se originó en el compartimento de la batería del Model S. 

Tesla no ha querido hacer comentarios al respecto.