Los motivos de la fuga de 'streamers' de Twitch: entre la irrupción de Kick y críticas que vienen de lejos

En su momento fue Twitch la que dedujo a muchos creadores de contenidos, que dejaron espacios como Youtube para unirse a la plataforma de streaming propiedad de Amazon. Ahora, sin embargo, es Twitch la que ve una fuga de talento.

En el aspecto temporal, han sido claves las últimas semanas, pero también una serie de circunstancias que se empezaron a dar desde hace al menos un par de años.

En cuanto a los motivos del 'éxodo' de streamers de Twitch, estos se pueden encontrar tanto dentro como fuera de la plataforma.

Falta de empatía, rebaja en las suscripciones y poca competencia

La plataforma nació en 2011, fue adquirida por el gigante del comercio electrónico Amazon en 2014 por cerca de 800 millones de euros y se convirtió en pionera de la llamada economía de los creadores: apostó por retribuir el tiempo y el trabajo de quienes retransmitían a través de su servicio. Luego fueron llegando las críticas y los problemas.

En 2021, 300 trabajadores decidieron dejar sus puestos en Twitch, mientras que en 2022 fueron decenas de empleados más y varios altos cargos los que abandonaron el 'barco'. Uno de los principales motivos que alegaron es que la plataforma había perdido el contacto con su comunidad de streamers.

"El cliente era el creador de contenido. Si no te apasiona el producto, no lo miras desde el punto de vista del cliente, y entonces no tienes el mismo nivel de empatía", explicó uno de los exempleados con los que habló Bloomberg.

Según trabajadores contactados por el medio, la plataforma se centró en buscar nuevas formas de ganar dinero con sus streamers, en vez de escucharlos y conocer qué les hacía falta, y contrató a personas ajenas a la cultura y el negocio del vídeo en directo que no entendían la comunidad. Antes habían llegado también críticas desde creadores más 'pequeños' y una rebaja del precio de las suscripciones.

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Esta supuso una pérdida de ingresos para muchos streamers de Twitch, que criticaron que el liderazgo de la plataforma ha permitido "ahorcar a los creadores y llevarlos al límite", según revelaron 11 streamers a Business Insider España el año pasado.

Varios de ellos señalaban entonces que "la competencia hace que uno se esfuerce en ser el mejor" y en cuidar a sus clientes, pero admitían que "competir contra Amazon es muy, muy difícil". 

"Es precisamente esa posición dominante la que está permitiendo ahora a Twitch ahorcar a los streamers y llevarlos al límite, porque, ¿qué van a hacer? ¿Irse? ¿A dónde?", se preguntaba Eric Rod, Leyendas y Videojuegos.

Entra en escena Kick

"Todos se están yendo. ¿Por qué no se irían? Van a darles igualdad y millones de dólares". Quien así se expresa es Adin Ross, creador de contenidos con 3,74 millones de suscriptores en Youtube y 2,2 millones de seguidores en Twitter, quien ha pasado de transmitir en Twitch (donde fue bloqueado) a ser estrella de Kick (incluidas imágenes exclusivas ilegalmente del Superbowl y emisión de pornografía).

Kick es la nueva plataforma de streaming que parece haber irrumpido con fuerza en el mundo de las transmisiones en vivo y que se postula como competidora de Twitch. Además de Ross, ya ha fichado a nombres populares como Amouranth, Ninja, Mr. Beast y xQc, entre otros.

Kick es similar a Twitch en varios aspectos (su esencia, la estructura de canales y categorías, streamers y espectadores, modelo de negocio...), pero ofrece varias características diferenciales que están atrayendo a creadores de su rival.

Entre ellas destacan un muy beneficioso reparto de ingresos del 95%-5% en favor de los creadores —cuya sostenibilidad a largo plazo se ha puesto en duda, desde medios y desde estrellas como Rubius—, permitir que estos reciban el 100% de las propinas de los espectadores y en el mismo día, opciones de monetización más flexibles y una moderación de contenidos que parece ser más laxa. 

Todo ello se ha sumado a los motivos ya mencionados, y a un reciente cambio en su política de publicidad que no ha sido bien recibido por la comunidad, para terminar de convencer a varios streamers de dar el paso de abandonar Twitch.