La guerra en Ucrania causa otro dolor de cabeza al sector de los coches eléctricos por la subida del níquel, clave para fabricar baterías

Imagen de archivo de la planta de producción de níquel de la empresa rusa Norilsk
Imagen de archivo de la planta de producción de níquel de la empresa rusa Norilsk

REUTERS/Polina Devitt

Las implicaciones económicas de la invasión de Ucrania por parte de Rusia no dejan de sucederse, y el sector de la automoción es uno de los más afectados. Especialmente la automoción eléctrica, a la que las materias primas no hacen más que darles dolores de cabeza.

Si ya venían sufriendo con el aumento de los precios del litio, fundamental para la tecnología predominante de baterías, la de iones de litio, que ha subido más de un 400% en el último año, y venían arrastrando los problemas de la escasez de semiconductores, un sector en el Rusia y Ucrania son parte muy relevante por su producción de neón, ahora es el níquel el que sube alarmantemente de precio.

Tanto es así que durante la jornada del martes este metal llegó a duplicar su precio en una sola jornada, hasta superar los 100.000 dólares por tonelada (91.600 euros), lo que llevó al mercado de materias primas de Londres (London Metal Exchange) a paralizar su cotización. 

Hace dos semanas, la tonelada de esta materia prima, que también se utiliza para producir material bélico como tanques, misiles o fusiles de asalto, cotizaba por unos 24.000 dólares (21.900 euros), cuatro veces menos.

De las pilas alcalinas a los discos duros: cómo afectará la salvaje escalada del níquel a tu bolsillo, según los expertos

El regulador del mercado apuntó en su explicación a la situación entre Rusia y Ucrania. "Es evidente que ha afectado al mercado del níquel en particular", señaló este martes en un comunicado. Además, la empresa china Tsingshan Holding Group, otro gran productor de níquel y acero, había apostado en corto a una bajada del precio, según Reuters, lo que provocó que comprara grandes cantidades de níquel para protegerse de las pérridas.

Al cierre de la jornada del martes, la entidad que regula este mercado, LME, señaló que "continuaba monitorizando la situación del mercado" sin especificar cuándo se reabriría.

Rusia no es el principal proveedor del mundo de níquel —produce aproximadamente el 10% de las existencias mundiales de este metal— pero sícuenta con la principal empresa que produce este material específicamente para baterías, la compañía Nornickel, que es responsable de entre el 15% y el 20% del total que se utiliza en el planeta, según datos de JP Morgan mencionados por Reuters.

Elon Musk ya llevaba tiempo planeando sustituir el níquel por hierro

La preocupación por el suministro de níquel no es algo nuevo para los productores de coches eléctricos. De hecho, el fundador de Tesla, Elon Musk, ya señaló hace un año que el níquel era "su mayor preocupación" para aumentar su producción de baterías. 

"Por eso estamos probando a cambiar a un cátodo de hierro, con mucho hierro (y litio)", dijo el multimillonario en un tuit de febrero de 2021.

Tesla ya había intentado previamente llegar a contratos con compañías dedicadas a la exploración de esta materia prima en previsión al aumento de la demanda e incluso invirtió en una empresa australiana, KoBold, especializada en exploración de metales.

El litio, fundamental para las baterías de los coches eléctricos, se ha encarecido un 440% en el último año y los analistas no se ponen de acuerdo sobre cómo evolucionará la producción

Una de las empresas más prometedoras del sector de las baterías, la estadounidense Our Next Energy, que cuenta con el apoyo de Bill Gates y BMW, propone una estructura de doble batería que utiliza tecnología de litio ferrofosfato, por lo que no emplea níquel y tampoco cobalto, dos materias primas cuya demanda se ha catapultado con la expansión de la movilidad eléctrica.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.