El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, pide no quedarse de brazos cruzados ante las monedas digitales que “amenazan la política monetaria de los bancos centrales”

El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, ha llamado la atención este miércoles, en una conferencia sobre soberanía monetaria, acerca del 'peligro' de las monedas digitales. 

Tal y como apunta Europa Press, de Guindos ha afirmado que la Unión Europea no debe quedarse "de brazos cruzados" ante estas monedas, ni el BCE puede arriesgarse a que le desplacen de su papel como "prestamista de último recurso". 

Las monedas digitales de los bancos centrales

Para el vicepresidente, en ausencia de CBDCs (monedas digitales de los bancos centrales), "puede argumentarse que las monedas digitales privadas y extranjeras podrían desplazar a las divisas domésticas, como el euro, amenazando la política monetaria de los bancos centrales". 

El exministro de Economía del Gobierno de España sostuvo que el universo crypto había evolucionado y explotado. Por ello, cree que las CBDCs pueden hacer frente a este fenómeno y convertirse en un "ancla de estabilidad" para el sistema tradicional y de pagos frente a "posibles disrupciones". 

No obstante, de Guindos también ha avisado de que, si se permitiera el uso de manera general de las CBDC para los pagos internacionales, esto podría hacer perder atractivo al euro y exponerlo a otras alternativas, que podrían ser criptomonedas como el bitcoin, o las monedas estables (stablecoins). 

A favor de la regulación de las criptomonedas

En diciembre de 2022, antes de que Europa aprobara la primera gran regulación de las criptomonedas: el Reglamento sobre los Mercados de Criptoactivos (MiCA por sus siglas en inglés), Luis de Guindos realizó unas declaraciones en las que se mostró favorable a una regulación global. 

Europa no puede jugar sola, señaló, si no, "habrá una plataforma que funcione en Bahamas o no sé dónde, que estará fuera de la regulación de Europa, Estados Unidos, Japón, o cualquiera de los mercados avanzados, y podría jugar con el arbitraje de regulación, lo que sería indeseable"