Las marcas chinas de vehículos eléctricos quieren conquistar el mercado europeo compitiendo en costes

El desarrollo de vehículos eléctricos se ha impulsado por parte de los fabricantes chinos, de hecho, sus ventas han superado a las de los rivales extranjeros dentro de su país. Parte de estos vehículos se exportan a Europa, lo que presenta una nueva serie de retos.

El mercado automovilístico chino tiene que hacer frente a los estereotipos sobre la baja calidad de la fabricación en china, los costes de la importación y un mercado de vehículos eléctricos (VE) aún en desarrollo con marcas como BYD, Nio y MG, ha recogido Reuters.

El mercado de los coches eléctricos chinos empieza a ser prometedor

China quiere hacerse un hueco en el sector de los VE: ha realizado una serie de lanzamientos mundiales de vehículos eléctricos y ha desarrollado planes para reducir los costes de fabricación. Con esto, pretenden integrarse en el mercado europeo compitiendo al mismo nivel. 

Chen Shihua, Director General Adjunto de la Asociación China de Fabricantes de Automóviles, ha advertido a sus miembros en una reunión informativa celebrada en Pekín de que los planes de expansión de los VE podrían ser demasiado ambiciosos.

"No es fácil internacionalizarse para nuestros fabricantes de automóviles", ha expresado Shihua para Reuters. Shihua ha advertido de un riesgo que están pasando por alto: las empresas chinas podrían pecar de expandirse demasiado, lo que implica un enfoque difuso en algunas zonas.

Presencia de los vehículos eléctricos chinos en Europa

El Congreso Mundial de Vehículos de Nuevas Energías de los fabricantes chinos se celebrará en Múnich el próximo mes de septiembre como muestra del deseo de abrirse a nuevos mercados. Alemania es un punto clave para ello y los fabricantes chinos ofrecerán así la primera conferencia en el extranjero de su congreso.

Los fabricantes chinos tienen claro que si en algo pueden competir con Europa es en el precio. El coste medio de un VE en China es inferior a 32.000 euros en el primer semestre de 2022. En Europa, el precio de un VE ronda los 56.000 euros, según los investigadores de Jato Dynamics.

No todo es tan bonito como parece, es bastante probable que las marcas chinas tengan dificultades para vender sus VE en Europa a tan bajo coste. Los impedimentos para ello son la logística, los impuestos sobre las ventas, la normativa europea de certificación y los derechos de importación.

Las preferencias europeas no se ajustan a las chinas, por lo que los fabricantes tendrán que adaptar sus vehículos a la nueva demanda con baterías más potentes para trayectos más largos, según Alexander Klose, director de la empresa china de vehículos eléctricos Aiways.

MG es una de las marcas más conocidas en Europa, aunque la gran mayoría tendrán que labrarse la confianza de sus consumidores, los cuales incluso desconocen las marcas que se mueven en el mercado chino. Algo similar ha sucedido con los fabricantes de automóviles japoneses y surcoreanos y al final han conseguido adaptarse a los gustos europeos.

Según Reuters, algunas marcas de VE chinas quieren ganarse la confianza de los consumidores mediante pruebas de conducción y exposiciones en las que los compradores europeos puedan evaluar la calidad de sus coches.