Así será viajar en AVE o Larga Distancia en la nueva normalidad

Después de tres meses de restricciones, la movilidad por todo el territorio vuelve a estar permitida a partir del 21 de junio. Con ello, también vuelven a operar los trenes AVE y larga distancia. Aunque lo harán a menor ritmo que antes del COVID-19 y con nuevas medidas de seguridad que atañen a los usuarios. 

El Estado de Alarma llega a su fin, las restricciones desaparecen y ya se puede viajar por el motivo que quieras, sin tener que dar ninguna explicación ni presentar ningún documento. Pero, ¿cómo serán los nuevos viajes en la denominada nueva normalidad? 

Según ha anunciado la operadora pública Renfe, el uso de mascarilla será obligatorio tanto en el tránsito por la estación, como en el interior del tren y durante todo el trayecto. En cuanto al aforo del tren, podrá ser al 100% sin tener que dejar asientos vacíos entre usuarios. 

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¿Cómo es el embarque y desembarque? 

El acceso a la zona de embarque solo se podrá realizar dentro de la hora previa a la salida del tren. Si llegas con más tiempo, sí puedes esperar en el vestíbulo de la estación.

El embarque se realizará de forma organizada, con acceso preferente para las personas mayores, familias, personas que viajen con niños o con carritos de bebé y personas de movilidad reducida.

Durante este proceso se garantizará la distancia interpersonal mediante rotulación o marcas en el suelo y emisión de mensajes recordatorios. 

El desembarque será de forma progresiva al llegar a la estación de destino, iniciándose siempre la salida en las filas más cercanas a la puerta y continuando de forma ordenada.

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¿Qué servicios tengo? 

Para evitar contactos, Renfe ha suspendido el servicio a bordo de restauración, el reparto de auriculares y de prensa, y la venta de artículos en las salas club de las estaciones

Sí repartirán toallitas desinfectantes entre los viajeros. 

¿Los trenes están desinfectados? 

Renfe asegura que ningún tren se pondrá en marcha sin antes ser desinfectado. Los usuarios podrán ver el registro de las limpiezas realizadas en fichas situadas en zonas visibles del tren. Entre las medidas de higiene a tomar están: 

• Sustitución de los reposacabezas de todos los asientos antes de cada viaje.
• Limpieza profunda y sistemática de todo el tren, incluyendo asientos, suelos, revestimientos horizontales y verticales
• Desinfección cuidadosa de todas las zonas de contacto: pulsadores de apertura y cierre de puertas, apoyabrazos, bandejas de los asientos, pasamanos, etc.
• Limpieza profunda de baños y todos sus elementos, así como de coches cafetería y cabinas de conducción, donde abundan dispositivos especialmente sensibles, como pantallas táctiles, botoneras, picaportes y paneles

El desinfectante utilizado por los trabajadores de Renfe será el OX VIRIN. Además de estas medidas, cada cinco viajes se realizará una desinfección más profunda. 

Otra de las medidas a tener en cuenta es que la frecuencia de trenes por trayecto será de un tercio respecto a la oferta habitual. La operadora pone en circulación unos 98 trenes diarios, que suman 30.000 plazas, cuando antes de la COVID-19 cada día ponía en circulación 330 trenes AVE y Larga Distancia. De todas maneras, la oferta irá en aumento en función de la evolución de la demanda de viajeros tras concluir la desescalada y se inicie la nueva normalidad. Eso sí, desde Renfe estiman que no se recuperará los niveles de pasajeros transportados previos a la crisis hasta al menos 2023, según un estudio realizado recientemente, que estima en un 46% el desplome de viajeros que se anotará este ejercicio.