Puig vende cientos de productos en 150 países: ¿cuál fue el primero?

Puig está estos días en boca de todos. El gigante catalán de belleza y moda es una de las 100 empresas familiares más grandes de España y cerró su pasado ejercicio fiscal 2023 con un beneficio neto de 465 millones de euros, un 16% más que en 2022, pulverizando récords por tercer año consecutivo. 

La gran noticia es su salida a bolsa el próximo 3 de mayo, con la que espera captar cerca de 3.000 millones de euros con acciones de clase B. El precio de cada acción se situará entre los 22 y los 24,50 euros, y la valoración de la empresa podría situarse entre los 12.700 y 13.900 millones de euros.

Los 3 años que cambiaron todo dentro de Puig, el gigante español de la cosmética que va a salir a bolsa

El gran ojeador de la belleza —dueño de enseñas tan importantes como Carolina Herrera, Jean Paul Gaultier, Nina Ricci, Charlotte Tilbury o Paco Rabanne— tiene 110 años de historia, y en su web definen sus valores como "curiosidad insaciable", "entusiasmo contagioso", "imparcialidad y respeto", "compromiso con crear valor a largo plazo" o "audacia emprendedora".

Pero toda gran compañía comienza con un pequeño paso. ¿Cuál fue el primer —e icónico— producto con el que Puig inició su andadura? El imperio nacía en 1914 de la mano de Antonio Puig, y ocho años después aterrizaba en el mercado un artículo de belleza que sería el primero de uno de los catálogos de cosmética y moda con mayor proyección internacional.

Fue en 1922 y marcó todo un hito: se trata de Milady, nada más y nada menos que el primer pintalabios fabricado en España. En el cartel publicitario del producto, este se definía como "el lápiz perfecto preferido de nuestras elegantes". Detallaba que "la belleza del rostro aumenta siempre con ayuda de un retoque en los labios".

La compañía esgrimía que su pintalabios permanente, de largo y profundo estudio científico, solucionaba esta "preocupación de la mujer moderna". De hecho, Puig garantizaba tal persistencia de Milady que solamente era preciso aplicarlo una vez al día.

Como curiosidad final prometía, "la misma eficacia en morenas que en rubias".

Más hitos: en 1940 vio la luz la emblemática fragancia Agua Lavanda Puig y en 1948, L’Air du Temps de Nina Ricci. Hoy tiene un porfolio con más de 17 marcas de lujo y vende cientos de productos en 150 países, incluyendo superventas mundiales como One Million, la fragancia de Paco Rabanne. Un éxito global que se debe, al menos en parte, a un pionero pintalabios en los años veinte.