Samsung vuelve a crecer en ingresos 3 trimestres después, aunque gana un 77,6% menos

Tras un periodo de calvario para las empresas del sector tecnológico, la situación comienza a mejorar en la segunda mitad de 2023, como demuestran los resultados de Samsung, líder mundial del mercado de móviles en unidades.

La multinacional surcoreana ha presentado este martes los resultados económicos del tercer trimestre de 2023, un periodo en el que celebra que vuelve a crecer en ingresos después de 3 trimestres consecutivos anteriores en los que había facturado menos.

Samsung ingresó entre julio y septiembre de este año un total de 67,4 billones de wones surcoreanos, lo que equivale a 47.003 millones de euros, un 12% más que en el mismo periodo del 2022.

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La compañía ha achacado este crecimiento en un comunicado al lanzamiento de su serie de smartphones plegables Galaxy Z Fold 5 y Flip 5 el pasado mes de agosto, así como al incremento de las ventas de pantallas a otras marcas, coincidiendo con el lanzamiento de nuevos modelos de gama alta en la segunda mitad de año.

Después de desplomes del 95% en los 2 últimos trimestres e incluso rozar las pérdidas operativas, todas las miradas estaban puestas en los beneficios de Samsung en este trimestre y, aunque no ha logrado crecer, la situación al fin comienza a estabilizarse.

La surcoreana tuvo un beneficio operativo de 1.694 millones de euros en el tercer trimestre de 2023, lo que supone un descenso del 77,6% con respecto a los datos del año pasado, mejorando las previsiones de los analistas como ya se esperaba.

Estos son los datos más destacados de los resultados económicos de Samsung en el tercer trimestre de 2023:

• Ingresos: 47.003 millones de euros (+12%).
• Beneficio bruto: 14.507 millones (-27,6%).
• Beneficio operativo: 1.694 millones (-77,6%).

La unidad de memorias y semiconductores sigue en pérdidas operativas aunque se espera que mejore en 2024

La caída en el beneficio operativo se debe casi exclusivamente al mal momento que atraviesa su unidad Device Solutions, la que se encarga de fabricar unidades de memoria, almacenamiento y semiconductores, tanto para sus propios dispositivos como sobre todo como proveedora para otros fabricantes.

Solo en el tercer trimestre, esta división de Samsung tuvo unas pérdidas de 2.617 millones de euros, mientras que en el mismo periodo del año pasado estaba en uno de sus mejores momentos y le proporcionaba beneficios de 3.573 millones.

Pese a los datos, Samsung es relativamente optimista y pronostica que el mercado mundial de memorias volverá a crecer en 2024, a pesar de que no descarta que siga estando afectado negativamente por las incertidumbres en la macroeconomía. 

Además, espera que sus resultados mejoren gracias a que acaba de implementar sus primeros semiconductores con arquitectura de 3 nanómetros, como la más avanzada de TSMC, mientras que el negocio de memorias crecerá con productos de banda ultra-ancha.

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