Septiembre es el mes de los divorcios: por qué las parejas se separan después del verano

La llegada de septiembre parece no traer muchas cosas buenas. Entre la caída de las temperaturas, las lluvias torrenciales y la vuelta a la rutina, hay quienes temen este mes. También porque después del verano es cuando se registran más divorcios.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), son 90.000 las rupturas que hubo en 2021, entre separaciones y divorcios. Además, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha señalado que el número de divorcios alcanza su máximo durante septiembre, según ha recogido el diario As. ¿Y por qué sucede esto?

Aunque las vacaciones de verano pueden parecer un periodo de relajación, en el que las preocupaciones quedan relegadas a un segundo plano, lo cierto es que también son meses de mayor convivencia. Pasar tanto tiempo en pareja puede crear asperezas. Tampoco ayuda que los abogados cierren sus despachos durante el mes de agosto.

Claves para afrontar un divorcio: todo lo que debes saber y hacer antes de la separación

-Motivos por los que se producen tantos divorcios en septiembre

Las razones por las que muchas parejas terminan rompiendo su relación son varias. Una de ellas se debe a que, durante los meses de rutina se centran en sus obligaciones, pero cuando se ven con tiempo libre se sienten como dos desconocidos al no haber pasado tiempo juntos. Esto puede derivar en momentos tensos, falta de compatibilidad y, por consiguiente, la separación.

Convivir con una persona no es fácil. Es precisamente en momentos de cercanía cuando más fricciones pueden originarse. Si se le suma a la ecuación el tema hijos, puede aumentar más el estrés y las disputas familiares. Esto pudo comprobarse en la época de cuarentena donde la gente se vio obligada a permanecer en sus casas.

Obviamente, otra de las situaciones más comunes se da cuando hay terceras personas implicadas, aunque no sea siempre a raíz de una infidelidad. En ocasiones, la falta de conexión en una pareja, hace que una de las partes busque cubrir esa carencia en otra persona.

A veces también son influencias de gente cercana las que afectan a la relación. Disputas familiares, riñas con amigos, pueden provocar momentos tensos en la pareja que desemboquen en los casos más extremos en una separación. En verano, que es cuando más libertad tiene la gente, y una de las épocas de mayores reuniones sociales, se pueden crear más tensiones.