12 alimentos que hacen más lento tu metabolismo y te hacen engordar, según la ciencia

Según la enciclopedia Medline Plus,el metabolismose refiere a todos los procesos físicos y químicos del cuerpo que convierten o usan energía, tales como la respiración, la circulación sanguínea, la contracción muscular o la digestión de alimentos. 

No se trata de un sistema que permanezca igual a lo largo de la vida ni que sea parecida entre los individuos. La genética y la edad son determinantes en sus engranajes: hasta los 30 años el metabolismo va en aumento y a partir de los 40 se va haciendo cada más lento, condicionando el gasto de calorías diarias. Es una de las razones que explican que ganemos peso con la edad, o que resulte más difícil adelgazar con 50 años que en la veintena. 

Pero la dieta también influye: hay hábitos y alimentos que ralentizan el metabolismo y otros que lo activan y lo hacen más veloz, como el picante, el pomelo, el té verde, el jengibre, el brócoli o las almendras. Desayunar a diario, equilibrar los macronutrientes y hacer ejercicio con regularidad te brindarán ayuda. 

No obstante, comer poco resulta contraproducente, ya que de este modo tu cuerpo tiende a reducir el gasto calórico y la masa de tus tejidos como los huesos o los músculos se merma. A menor músculo, menor tasa metabólica. Dormir poco también es perdudicial, ya que en la fase REM se incentiva la quema de calorías.

Por supuesto, el sedentarismo tampoco es un buen amigo de un metabolismo rápido. Si miramos a la dieta, medios especializados en nutrición como Eat This, Not That o The Healthy recomiendan borrar o reducir de la dieta los siguientes alimentos que ralentizan el metabolismo. 

Granos refinados

Los granos simples o refinados como el pan blanco, la pasta normal, la pizza, los bocadillos y un largo etcétera no son tus mejores aliados para mantener a raya la grasa abdominal ni tampoco acelerar tu metabolismo. 

Los hidratos de carbono son el combustible de nuestro motor energético, pero es mejor que sean complejos e integrales para propiciar una absorción y liberación más lenta del azúcar en sangre, causando menores picos de glucosa. Cuando los niveles son altos, conducen a un almacenamiento adicional de grasa. 

En este sentido, un artículo publicado en el American Journal of Clinical Nutrition publicó un estudio que explicaba que al elegir cereales integrales en lugar de refinados, tu cuerpo pierde más calorías y activa su metabolismo porque debe trabajar más para descomponer estos alimentos.

Alcohol

Los CDC advierten de que el consumo de alcohol está ligado a numerosas enfermedades crónicas. Pero además, beber alcohol es malo para tu metabolismo. Contiene muchas calorías vacías, engorda, y hay estudios que apuntan a que disminuye la capacidad de quemar grasa del cuerpo en un 73%.

Además, al beber demasiado, se forma acetaldehído, una sustancia altamente tóxica que genera muchas señales de alerta internas en el sistema digestivo de su cuerpo. En vez de quemar las calorías, el organismo se ve obligado a desintoxicar esta sustancia. 

Las bebidas alcohólicas también irritan el tracto gastrointestinal, lo que a largo plazo deteriora la capacidad de su cuerpo para absorber los nutrientes que necesita. 

Bebidas azucaradasy carbonatadas

Los edulcorantes artificiales presentes en refrescos azucarados y bebidas carbonatadas son tu enemigo number one. Según una investigación publicada en 2014 en Nature, pueden aumentar tu azúcar en sangre, cambiar las bacterias intestinales y aumentar las papeletas para tener obesidad o diabetes tipo 2. 

En especial el jarabe de maíz alto en fructosa, y presente en numerosos refrescos, es responsable de ralentizar tu metabolismo e incluso está vinculado con trastornos metabólicos, un fenómeno que recoge una revisión de 2010 publicada en la revista Current Hypertension Reports. 

Comida congelada

Si optas por alimentos congelados hipocarlóricos puedes padecer efecto rebote o retrasar tu metabolismo. Además, muchos de estos preparados son procesados, carecen de fibra, se pasan con el sodio o tienen exceso de conservantes y aditivos. Revisa bien el etiquetado y opta por congelados que solo contengan los ingredientes que necesites. 

Demasiada o poca proteína

Según Mayo Clinic, la cantidad diaria de proteínas en un adulto sedentario promedio es de 0,8 gramos por kilogramo de peso corporal. Si eres una persona muy activa, la mayoría de las investigaciones sugieren ingerir 1.2 a 2 gramos de proteína por kilogramo de peso corporal.

Azúcar añadido

El azúcar añadido tampoco se lleva nada bien con tu cuerpo, y es peligroso por su carácter inflamatorio, cancerígeno y ligado a numerosas enfermedades crónicas. Desdeña la bollería industrial y otras golosinas y snacks. También están vinculados a las grasas trans, 

Demasiados ácidos grasos Omega-6

Es importante que en tu alimentación exista un equilibrio entre ácidos grasos omega-6, propios de aceites vegetales, pollo o cereales- y los omega-3, habituales en los pescados grasos azules, el aguacate o las semillas. Si el desequilibrio se inclina a favor de los omega-6 la respuesta de tu organismo puede ser inflamatoria y negativa para tu metabolismo.

Frescos cultivados con pesticidas

Comer alimentos contaminados con pesticidas puede conducir a un metabolismo más lento. De hecho, un estudio en Obesity Review descubrió que las personas cuyos cuerpos muestran altos niveles de organoclorados, un tipo de pesticida, tienden a tener un metabolismo más lento y experimentan mayores dificultades para adelgazar. 

Otra investigación encontró que aquellos con las concentraciones más altas de estos pesticidas nacieron con una tasa de natalidad más baja que aquellos sin el químico en su torrente sanguíneo.

Yogur de frutas o azucarado

Mientras que el yogur griego atesora muchos beneficios para tu organismo, muchos yogures de frutas contienen cantidades ingentes de azúcar, menos cantidad de proteínas y escasos nutrientes. El azúcar añadido puede provocar un gran aumento del azúcar en sangre, picos de hambre y más predisposición a los atracones, haciendo tu metabolismo más lento. 

Zumos industriales

Los expertos han aclarado en muchas ocasiones que es mejor consumir las piezas de fruta enteras, ya que sacian más y muchos de sus beneficios están en la piel. Pero si tomas zumo de vez en cuando, que sea casero y recién exprimido. El jugo industrial tiene altas cantidades de azúcar, disparando a la estratosfera tus niveles de azúcar en sangre. También se ha asociado con más papeletas para padecer cáncer. 

Alimentos fritos

Las patatas y otros alimentos fritos suelen freírse en aceites parcialmente hidrogenados o grasas trans, que pueden hacer tu metabolismo cada vez más lento.

En este aspecto, una investigación publicada en el American Journal of Clinical Nutrition vincula el consumo de alimentos fritos con un mayor riesgo de obesidad abdominal y aumento de peso en adultos.

Sal marina

Si tienes un metabolismo lento o quieres acelerarlo, en lugar de la sal marina puedes inclinarte por la sal yodada, enriquecida con este mineral y que tiene un efecto positivo en la tiroides. "Sin niveles suficientes de yodo, la función de la tiroides se deteriora y es más difícil para el cuerpo quemar grasa", dice a Eat This, Not That Dana James, cuya propuesta es incluir vegetales marinos como las algas al menos 3 veces por semana en la dieta. 

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