Las grandes tecnológicas se preparan para una posible recesión y hacen saltar las alarmas en otros sectores

Despidos y reducciones de plantilla, pérdida de suscriptores, acciones en caída libre, peores resultados de lo esperado... el panorama pinta revuelto para las big tech, que empiezan a atrincherarse.

Las grandes tecnológicas se preparan para una recesión, y sus temores han hecho saltar las alarmas en los mercados.

La semana que viene, la mayoría de los gigantes tecnológicos presentan sus resultados trimestrales, y las señales que envían no están siendo muy optimistas. 

La incertidumbre derivada de la guerra en Ucrania y una inflación completamente descontrolada han puesto la economía mundial al borde del precipicio. Una situación que está afectando a las grandes compañías del sector tecnológico, que están anunciando despidos o paralización de contrataciones.

Google, Apple, TikTok o Meta ya han comenzado a reestructurar sus plantillas. Durante años, estas compañías han estado contratando plantilla a todo gas, pero ahora las big tech comienzan a notar la presión, y empiezan a trasladarla a sus trabajadores.

Recientemente, Microsoft ha retirado de Internet las ofertas de empleo, según informa Bloomberg.

El viernes, Twitter reportó números decepcionantes, con caída de ingresos y pérdidas en el segundo trimestre que atribuye al enredo en tribunales con Elon Musk.

Musk, dueño de Tesla, dijo a principios de este verano que tenía un "súper mal presentimiento" sobre la economía, y que esperaba que el fabricante de automóviles redujera sus trabajadores asalariados en aproximadamente un 10%.

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Amazon, por su parte, se enfrenta a una oleada de descontento entre sus empleados, donde el 44,6% reconoce estar buscando empleo por estar insatisfecho con su salario. Las acciones de Amazon han caído más de un 40% desde su máximo histórico del verano pasado, lo que ha hecho que se desplome el valor de las remuneraciones, ya que una parte se paga precisamente en acciones.

Amazon fue uno de los primeros gigantes tecnológicos en advertir a principios de este año que había contratado a demasiados trabajadores en sus almacenes y que había construido en exceso anticipando una mayor demanda de los clientes que, en cambio, comenzó a disminuir a medida que se levantaban los cierres por el coronavirus y los hábitos de la pandemia cambiaban.

En el caso de Facebook, la compañía se enfrenta a un nuevo clima publicitario, y los reguladores nacionales y extranjeros amenazan con tomar medidas enérgicas contra la industria en su conjunto. El portavoz de Meta, Tracy Clayton, ha dicho que la compañía seguirá haciendo cambios en algunas partes de su negocio, debido al entorno económico más incierto. 

La situación de incertidumbre y el lento crecimiento de la economía ha llevado a Netflix a la mayor caída en suscriptores en la historia de la compañía: una estampida de casi un millón de clientes.

También Facebook comunicó por primera vez, a principios de este año, un descenso de usuarios diarios, lo que unido a la mayor competencia, una previsión de ingresos más baja y los obstáculos del negocio publicitario hizo que sus acciones se desplomaran. Las acciones de la empresa han bajado un 50% en el año. 

La semana pasada, Facebook pidió a sus directores de ingeniería que eliminaran a los empleados de bajo rendimiento ante el descenso. "Si un subordinado directo no hace nada o tiene un bajo rendimiento, no es lo que necesitamos; está fallando a esta empresa", escribió el jefe de ingeniería de la compañía en un memorando.

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Snap afrontó caídas del 40% en sus acciones el pasado viernes, tras informar de un crecimiento de los ingresos peor de lo esperado y se negó a dar una predicción para el beneficio futuro debido a "incertidumbres relacionadas con el entorno operativo." 

Los analistas pronostican que las cifras que publicarán esta semana Amazon, Microsoft, Google, Facebook y Apple podrían ser la señal definitiva de cómo encaran estas empresas los próximos meses. 

La semana pasada, Bloomberg informó de una desaceleración de la contratación y el gasto en Apple, lo que supone un indicador de cuánto están dispuestos a gastar los consumidores, una noticia que contribuyó a una caída generalizada de las bolsas.

Al tratarse de algunas de las empresas más valiosas del mundo, también ejercen una enorme influencia en la percepción de la economía, en parte debido a la naturaleza de sus negocios, que dependen de los clics y el gasto de los consumidores.