La carga mundial de cáncer de hígado podría dispararse más del 55% para 2040: estos son los síntomas silenciosos que pueden revelarlo

El hígado es el órgano interno más grande del cuerpo. También destaca en importancia porque se encarga de secretar bilis y enzimas que ayudan en la absorción de nutrientes, además de eliminar desechos y filtrar toxinas.

A diferencia de los riñones o pulmones solo tenemos un hígado y no podemos vivir sin él. La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) estima que a lo largo de este año 6.604 personas serán diagnosticadas con un cáncer de hígado en nuestro país. 

El de hígado es uno de los cánceres que está detrás de más fallecimientos a nivel mundial, apenas por detrás del cáncer de pulmón y cáncer colorrectal, porque normalmente suele detectarse un cáncer avanzado debido entre otros factores a la dificultad para detectar los síntomas, lo que complica la esperanza de vida.

Un nuevo análisis acaba de revelar que la carga mundial de cáncer de hígado podría aumentar en más del 55% para 2040. El estudio, publicado en el Journal of Hepatology, apunta que para ese año la cantidad de personas diagnosticadas o que mueren por este tumor podría aumentar en casi 500.000 casos o muertes.

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Para llegar a esa conclusión, los investigadores extrajeron los datos relativos a la enfermedad de la base de datos GLOBOCAN 2020 de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer. Las estimaciones para el año 2040 se basan en las proyecciones de población producidas por la ONU.

Los resultados concluyen que en 2020 aproximadamente 905.700 personas fueron diagnosticadas y 830.200 murieron a causa de este cáncer en todo el mundo. 

Síntomas que revelan un cáncer de hígado

El carcinoma hepatocelular (HCC) representa alrededor de 9 de cada 10 diagnósticos primarios de cáncer de hígado. La gran mayoría de las personas que lo desarrollan tienen cirrosis, que puede deberse a varias causas como la infección por virus de la hepatitis o infección crónica del hígado, pero también por beber alcohol en exceso.

El alcohol fue responsable del diagnóstico de unos 1.500 casos de hepatocarcinoma en 2020, según las estimaciones de la SEOM. Otro estudio de 2018 apunta a que los pacientes con cáncer de hígado relacionado con el alcohol tienen una menor tasa de supervivencia.

Entre los factores asociados a un mayor riesgo de padecer cáncer de hígado destacan también la edad, ser hombre, padecer diabetes o una infección de hepatitis B o C.

La mayoría de los síntomas del cáncer de hígado pueden confundirse con otras afecciones y habitualmente suelen presentarse en etapas avanzadas de la enfermedad.

Algunos de los siguientes signos pueden alertar del cáncer hepático, según los expertos:

• Pérdida de peso sin causa justificada.
• Falta persistente de apetito.
• Fatiga o debilidad.
• Agrandamiento o abombamiento de la región superior derecha del abdomen.
• Dolor persistente en la zona central superior del abdomen
• Hinchazón abdominal generalizado progresivo.
• Coloración amarillento-verdosa de la piel y los ojos (ictericia).
• Fiebre.
• Náuseas, vómitos, sensación de saciedad precoz tras ingerir alimentos.
• Coloración oscura de la orina (coluria) y heces blanquecinas (acolia).
• Picor o quemazón excesivo y generalizado en la piel.
• Confusión o somnolencia excesivas.
• En caso de padecer cirrosis o hepatitis crónica, empeoramiento del estado.

Un consumo moderado de alcohol, mantener un peso saludable y la vacunación frente a la hepatitis B son las mejores fórmulas para ayudar a disminuir el riesgo de desarrollar un cáncer de hígado.