Carlos Gómez, emprendedor y CEO de Vivla: “Cuando dejé Google me sentí como un niño marchándose de Disneyland”

El emprendedor Carlos Emilio Gómez en las oficinas de Google
El emprendedor Carlos Emilio Gómez en las oficinas de Google
  • Carlos Emilio Gómez fue uno de los primeros españoles en trabajar desde San Francisco para Google. Entró en la compañía en 2007, cuando la multinacional comenzaba a aterrizar en Europa. 
  • "Vi las oficinas y me explotó la cabeza. Me encontré con los futbolines, los billares, con gente normal que no iba en traje, llevaban chándal, camisetas…", rememora en una entrevista con Business Insider España.

"Escapando de Disneyland", así se sintió Carlos Gómez cuando dejó Google tras 10 años de trayectoria, tras haber sido uno de los primeros españoles contratados por la multinacional para abrir mercado en Europa

Gómez  explica que en su presentación de despedida quiso hacer un símil divertido de cómo se sentía, porque para él llegar a Google fue como cuando un niño entra en un parque de atracciones: “Todo es maravilloso y no te quieres ir nunca. Sin embargo, poco a poco creces y te das cuenta de que también hay cosas interesantes fuera". 

“Se vive, se trabaja muy bien, conoces gente apasionante, la calidad del talento es increíble. Estás haciendo proyectos que van a cambiar el mundo todos los días”, añade.

Carlos Emilio Gómez fichó por Google y se trasladó a sus oficinas de Dublín en 2007, nada más salir de la carrera. Había vivido toda su vida en el barrio madrileño de Usera y estudió Derecho y Económicas en ICADE. 

En esos años Google ya era grande en Estados Unidos, había salido a bolsa en 2004, sin embargo, el proyecto en Europa aún estaba germinando y empezaban a formar equipos.

Gómez cuenta que cuando fue a hacer la entrevista se dio cuenta de que no era un lugar típico para trabajar. "Vi las oficinas y me explotó la cabeza. Me encontré con los futbolines, los billares, con gente normal que no iba en traje, llevaban chándal, camisetas. Solo pensé, tengo que trabajar aquí”.

Poco después le ofrecieron entrar en el recién creado equipo de la suite de Google Apps que se lanzaba a nivel global. Eran solo 15 personas. “Lo hacíamos todo, el producto se vendía solo, así que estuve 8 meses haciendo soporte técnico telefónico”. 

Lo que necesitas saber para estar informado

Lo que necesitas saber para estar informado

¿Te gusta lo que lees? Comienza tu día sabiendo qué piensan y qué les preocupa a los ejecutivos de las principales empresas del mundo con una selección de historias enviada por Business Insider España a primera hora cada mañana.

Recibe la newsletter

De Argentina a San Francisco

A los dos años y medio ya se sentía muy veterano en ese equipo y buscó un cambio. Era el que hablaba español con más antigüedad y pensó que el producto no tenía aún mercado en Latinoamérica. 

“Se lo propuse a mis jefes globales y pedí que me dejaran ir. Me fui a Argentina durante cinco meses. Todo empezó a funcionar muy bien, pero pedí trasladarme a California y seguir liderando el proyecto desde allí”. 

Cuenta que años antes había ido de viaje allí a conocer los equipos centrales y el ambiente le había atraído mucho. “Sabía que todo se cocía allí. Con la que era mi novia, hoy mi mujer, nos mudamos en 2010 a San Francisco para seguir gestionando el equipo de Google Enterprise para Latinoamérica". 

Fue el primer empleado en Europa, luego el primer empleado en Latinoamérica y le tocó volver a montar equipo para Google Enterprise desde California. En dos años y medio, con solo 29 años, ya tenía un equipo de 35 personas y la región facturaba decenas de millones de euros.

Él era un joven con ambiciones, pero aun así, la mentalidad americana le seguía sorprendiendo: “No hablabas con nadie que no tuviera un máster en Harvard, en Stanford, todo mundo estaba montando una startup. Siempre había eventos, foros, hackatones, era increíble. También la vida fuera del trabajo, nuestro tiempo libre estaba vinculado al emprendimiento y a la tecnología. Era una cultura 24/7"

 

La venta de Motorola y el salto a España con Waze

La compañía Motorola vivía horas bajas en 2013, año en el que Google la adquiere por 12.500 millones de dólares, unos 9.800 millones de euros. Es entonces cuando la multinacional lanza un programa para 50 empleados que quisieran irse a “levantar” esta nueva compañía. 

“Yo me apunté y me seleccionaron. Nuestro trabajo era incorporar los sistemas, la metodología, la cultura, los procesos de Google dentro de la estructura de Motorola, que hacía diez años o 12 había sido la empresa más innovadora de América y de repente había caído como Nokia y BlackBerry”. 

Gómez recuerda que fue un proceso muy interesante y también efectivo, porque en poco tiempo consiguieron venderla al gigante chino Lenovo por 2.910 millones de dólares, manteniendo gran parte de las patentes adquiridas. 

Tras la venta, en 2014, Carlos cuenta que al equipo se le da la oportunidad de volver a Google. Afirma que se tomó unos meses valorando distintos equipos y proyectos pero finalmente decide que quiere volver a España

Lo hace como primer empleado de Waze Europa, la startup de origen israelí de navegación para coches que había sido adquirida por Google en 2013 por 1.100 millones de dólares. Ahí estuvo otros dos años y medio liderando la implantación de ventas y equipo en Europa. Gómez ya cumplía 10 años en Google, se sentía veterano y cada vez “le picaba más el bicho emprendedor”. 

En 2017 nace su hija, conoce al que sería su futuro socio y acaba dejando Google para crear y lanzar 7R. 

Inicio del camino emprendedor

Gómez cuenta que siempre había sentido ese espíritu emprendedor, pero sobre todo empezó a aflorar durante su etapa en San Francisco. Tuvo algunos proyectos en ese periodo pero no llegaron a nada. “Estabas expuesto a nuevas ideas constantemente, veías algo y decías: joder, esto es la bomba, vamos a intentar montarlo”. 

Su primer paso certero en el mundo emprendedor fue en 2017 al lanzar 7R como socio fundador, un venture builder que crea startups tecnológicas junto a socios industriales y emprendedores experimentados. 

Ya han montado más de una decena de negocios y han trabajado con grandes grupos y compañías como Sareb, el grupo SM, Atresmedia, el grupo Pascual, etc. Entre las startups lanzadas por 7r se encuentran Ringo (exit), Rento (exit), Apprender (exit) y otras como Zityhub.

Fue en 2021 cuando Gómez da el salto como CEO y cofundador de Vivla, junto a sus socios Carlos Floria e Iván Rodríguez. Montan la primera startup 100% independiente de 7R. Se trata de una startup proptech que democratiza la compra y disfrute de segundas viviendas de lujo en toda Europa mediante el modelo de copropiedad.

Ese mismo año, en diciembre, Vivla cerró su primera ronda de 26.5 millones de euros: "En España somos los líderes. Seguramente somos la primera o segunda empresa en Europa y eso hace que todos los grandes fondos internacionales a los que les pueda interesar esta categoría quieran saber de nosotros", apunta Carlos. 

El emprendedor, en su día a día, afirma estar al 120% en Vivla, pero sigue como socio accionista de 7R, también es cofundador y parte de Junípero.vc, mentor Endeavor e inversor a nivel particular en varias startups. 

En menos de 10 años, a sus espaldas, ya son más de 20 startups las que ha fundado o ha ayudado a montar de forma directa. Y sí, entre risas, afirma que algo de tiempo libre le queda, "esos ratos siempre son para mí y para poder disfrutarlos con mi familia". 

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.