Cómo funcionan los analgésicos: así eliminan el dolor

El dolor es "sensación desagradable, como un pinchazo, hormigueo, picadura, ardor o molestia", describe la biblioteca médica de EEUU. Puede ser agudo o sordo; intermitente o constante; centrarse en algún lugar del cuerpo concreto o ser generalizado.

Aunque no lo creas, sentir dolor tiene su lado positivo. Es la forma que tiene tu cuerpo de decirte que algo no va bien (aunque a veces estos indicios sean silenciosos).

Además, esta capacidad te mantiene alejado de amenazas ambientales que pueden ocasionarte heridas, infecciones, fracturas y en última instancia acortar la vida. Como cuando sabes que debes manejar un cuchillo con cuidado para no cortarte o evitar golpes en la cabeza.

Sentir dolor de manera prolongada es desesperante e incapacitante, de ahí que la medicina haya desarrollado vías de amortiguarlo o hacerlo desaparecer. Pero ¿cómo se consigue?

A esta pregunta han respondido en The Conversationla neurobióloga Rebecca Seal y el anestesiólogo Benedict Alter ambos de Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Pittsburgh (EEUU). Tratarlo depende de la dolencia, pero puede necesitarse recurrir a medicamentos, como los analgésicos.

Así puedes desintoxicar tu cuerpo de medicamentos de forma natural

A este respecto y según explican en su artículo, la ciencia conoce desde hace tiempo la existencia de múltiples vías que señalan el daño tisular en el cerebro y hacen sonar la alarma del dolor, activándosesegún el tipo de dolencia. 

"Funcionan abordando diferentes partes de estas vías". Sin embargo, no todos los analgésicos funcionan para todos los tipos de dolor.

Analgésicos antiinflamatorios

Cuando te haces un hematoma o un esguince se genera una inflamación del tejido —una respuesta inmunitaria que puede provocar hinchazón y enrojecimiento mientras el cuerpo intenta sanar—. 

Entonces, las células nerviosas especializadas en el área de la lesión, llamadas nociceptores, detectan los químicos inflamatorios que produce el cuerpo yenvían señales de dolor al cerebro. Así, este tipo de medicamentos funcionan al disminuir la inflamación en el área lesionada.

Los antiinflamatorios no esteroideos como el ibuprofeno o la aspirina bloquean una enzima llamada COX que desempeña un papel clave en "la cascada bioquímica que produce sustancias químicas inflamatorias". Al detener esta, se reducen las sustancias generadas y por tanto las señales de dolor enviadas son menores.

Si bien el paracetamol (Tylenol) no reduce la inflamación como lo hacen los AINE, también inhibe las enzimas COX y tiene efectos similares para reducir el dolor.

¿Qué tomar para el dolor de cabeza? Los casos en los que debes tomar ibuprofeno o paracetamol

Los que requieren recetas incluyen corticosteroides y medicamentos que atacan e inactivan directamente a los químicos inflamatorios.

Estos químicos están involucrados en otras funciones fisiológicas importantes más allá de hacer sonar la alarma del dolor, por ello los medicamentos que los bloquean tendrán efectos secundarios y riesgos potenciales para la salud, que incluyen irritar el revestimiento del estómago y afectar la función renal, señalan los autores.

Los antiinflamatorios sin receta generalmente son seguros si se siguen estrictamente las instrucciones del envase. Aunque algunos estudios recientes también señalan potenciales riesgos sobre algunos como el ibuprofeno.

Medicamentos tópicos

Muchos medicamentos tópicos se dirigen a los nociceptores, los nervios especializados que detectan el daño tisular (de los tejidos). Evitan, como la lidocaína, que estos envíen señales eléctricas al cerebro.

Otros analgésicos locales se dirigen a los sensores de proteínas en las puntas de otras neuronas sensoriales en la piel. "Activarlas puede disminuir el dolor al reducir la actividad de los nervios sensibles al daño, como la sensación refrescante del mentol o la sensación ardiente de la capsaicina".

Estos medicamentos se usan mejor para el dolor que afecta directamente la piel.

Medicamentos para lesiones nerviosas

Según escriben los especialistas, las lesiones nerviosas, más comúnmente por artritis y diabetes, pueden hacer que la parte del sistema nervioso que detecta el dolor se vuelva hiperactiva. Es decir que esta alarma se active aunque no haya daño a reparar.

Por ello, "los mejores analgésicos en estas condiciones son los que amortiguan esa alarma".

Los medicamentos antiepilépticos, como la gabapentina (Neurontin), suprimen el sistema de detección del dolor al bloquear la señalización eléctrica en los nervios. Sin embargo, también pueden reducir la actividad nerviosa en otras partes del sistema nervioso, lo que podría provocar somnolencia y confusión.

Se cree que los antidepresivos, (como la duloxetina y la nortriptilina) funcionan aumentando ciertos neurotransmisores en la médula espinal y el cerebro que participan en la regulación de las vías del dolor. Pero también pueden alterar la señalización química en el tracto gastrointestinal, lo que provoca malestar estomacal.

Todos estos medicamentos son recetados por médicos.

Opioides

Los opioides son sustancias químicas que se encuentran o se derivan de la adormidera (Papaver somniferum), planta que produce ciertas sustancias como la morfina y la codeína.

Los opioides disminuyen el dolor al activar el sistema de endorfinas del cuerpo. Las endorfinas que tu cuerpo produce de forma natural, disminuyen las señales entrantes de lesión y produce sentimientos de euforia. 

Aunque los opioides pueden disminuir algunos tipos de dolor agudo, como una cirugía, lesiones o dolor por cáncer, suelen ser ineficaces para las lesiones neuropáticas y el dolor crónico.

Los efectos secundarios y los riesgos incluyen estreñimiento y supresión de la respiración potencialmente mortal. El uso prolongado de opioides también puede conducir a desarrollar tolerancia, pudiendo resultar adictivos.

Cannabinoides

Aunque el cannabis ha recibido mucha atención por sus posibles usos médicos, no hay suficiente evidencia disponible para concluir que puede tratar el dolor de manera efectiva, remarcan los autores.

Los investigadores saben que el cuerpo produce naturalmente endocannabinoides, una forma de los químicos del cannabis, para disminuir la percepción del dolor. Estos además pueden reducir la inflamación.