Si quieres que el pan forme parte de una dieta saludable así es como debes comerlo, según el nutricionista Luis Alberto Zamaro en su libro 'Comer bien es fácil si sabes cómo'

panadería
Reuters/ Charles Platiau

En España gusta el pan y mucho. Desde la tostada al bocadillo de tortilla no es de extrañar que más de uno lo incluye en todas y cada una de las comidas que hace a lo largo del día. Gusta tanto que prepararlo de forma casera se ha convertido en toda una moda desde la pandemia.

Y qué pasa por ello. En general lo que ocurre con este alimento y otros hidratos es que además de comerse exceso se tiende a que no sea de muy buena calidad.

Los hidratos de carbono son la principal fuente de energía del cuerpo, por lo que está bien incluirlos en la dieta, pero si los tomas en demasía y además elaborados a base de harinas refinadas, entonces estarás aportando a tu cuerpo calorías y azúcares pero escasos nutrientes.

Frente a esto "no se trata de dejar de comer arroz o pasta, sino de comer raciones más ajustadas y de mejor calidad", recomienda el dietista y nutricionista Luis Alberto Zamora en su libro Comer bien es fácil si sabes cómo.

Escrito junto al periodista Alberto Herrera, el manual ofrece pautas sencillas y realistas sobre cómo comer, a través de las cuales el especialista en alimentación, conocido por su participación en el programa Más vale tarde (La Sexta), muestra lo realmente sencillo que puede ser seguir una dieta saludable.

Cómo hacer pan casero (hasta sin gluten) paso a paso y sin necesidad de una panificadora

Entre sus consejos dedica un capítulo entero al pan, con el objetivo de dar a conocer la manera de incluir este popular alimento dentro de un plan de alimentación enfocado a promover la salud.

"El pan puede formar parte de una alimentación equilibrada y saludable siempre y cuando sea de calidad y respetemos la cantidad recomendada"

Para que el pan forma parte de una dieta equilibrada este debe ser de calidad.

Como remarca el libro, no se trata de empezar a comprar la barra más cara, sino simplemente de hacerse con aquel que "aporta el mayor número de nutrientes".

Y este no es otro que el pan integral, o dicho de otra manera, aquel elaborado con harinas a base de grano completo (lo que asegura que contenga las vitaminas, minerales y fibra presentes en los cereales).

Para hacerte una idea, mientras que el plan blanco (refinado) aporta 3,5 gramos de fibra o 1,7 microgramos de vitamina B, el pan 100% integral conlleva 6 gramos de fibra y 6,7 microgramos de vitamina B.

Si eres de los que tiene el buen hábito de mirar la etiqueta, un pan de calidad debería estar elaborado a base de harina integral, masa madre, agua y sal.

Pero que sea de calidad no da vía libre para comer este alimento a todas horas.

Cómo saber escoger el pan de molde más saludable del supermercado

El segundo requisito para tomar pan de manera sana, pasa por ingerirlo en la cantidad adecuada.

¿Cuánto puedes comer sin arrepentirte? 

"La respuesta está en tu mano", afirma el nutricionista en Comer bien es fácil si sabes cómo. "La ración recomendada de pan es aproximadamente de dos o tres dedos en la comida y otros dos o tres dedos en la cena".

Y si eres de los que solo se come la corteza porque engorda menos, estás equivocado. Ambas partes del pan están hechas con los mismos ingredientes y "aportan un contenido de calorías similar", advierte en su libro.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.