Qué edulcorante es mejor y cómo reconocer buenas opciones en el supermercado

Sacarina, stevia, aspartamo, eritritol... Te sonarán porque son los edulcorantes de moda que llevan años intentando ser la opción saludable para endulzar tus comidas.

Y aunque han entrado en la vida de las personas como una opción más de consumo, con menos calorías, es importante entender que su razón de ser es algo incongruente. 

Predilección por lo dulce

Desde que eres pequeño tu paladar se inclina por alimentos dulces, muy dulces. Esto es evolutivo ya que en la naturaleza los alimentos dulces indican que están en buen estado, a diferencia de otros amargos o ácidos que podrían estar en descomposición. 

En los tiempo modernos tú ya sabes que los alimentos que estás ingiriendo están en buen estado, pero has adoptado mecanismos de recompensa con esos alimentos, así que los eliges, principalmente, por 2 factores: predilección natural y premios para tu cerebro.

Los alimentos se vuelven más dulces a medida que pasan los años: un estudio revela el aumento de los edulcorantes en la última década

Así, tu paladar se ha acostumbrado a estos sabores tan artificiales y dulces por lo que, en vez de reducir su consumo y volver a educar tu paladar, estás buscando alternativas al azúcar porque te han explicado que es mala para la salud.

Lo natural sería ir reduciendo el consumo de azúcar hasta que comiences a apreciar los matices del propio alimento y te acostumbres a él sin tener que endulzarlo, pero si te es imposible puedes empezar con los edulcorantes, aunque sabes una cosa... ¡Suelen ser más dulces aún! 

Esta es la incongruencia de la que se hablaba antes. Lo saludable sería ir desprendiéndote de esa necesidad poco a poco para comer los alimentos de manera natural, pero los edulcorantes dificultan el camino porque aunque pueda ser 'mejores', siguen alterando tus sensaciones.

Y además, pese a que parece imposible, las últimas revisiones los relacionan con aumento de probabilidades de padecer obesidad.

Mejores edulcorantes: ¿cuál elijo?

Todo va a depender de cuáles sean tus objetivos. Por eso debes tener en cuenta que no todos los edulcorantes son acalóricos (que no tienen calorías) así que en ese sentido, si lo haces por perder peso, será lo primero que debas identificar en el súper. 

Siempre mira primero los ingredientes y después su valor nutricional, los ingredientes te ayudarán a identificar cuán natural es el producto y el valor nutricional si está en sintonía con lo que buscas de él. 

Es cierto que también debes entender para qué estás usándolo y las cantidades que usas, si es solo para endulzar tus cafés la cantidad será tan pequeña que tampoco debe suponer un gran quebradero de cabeza. Recuerda: en la dosis está el veneno.

Para tu tranquilidad recuerda que todos los edulcorantes que puedas encontrar en el supermercado son seguros, es decir, son sustancias reguladas que están sujetas a una evaluación de la seguridad por la European Food Safety Authority.

Pero sí que es cierto que los estudios apuntan a que algunos edulcorantes como la sacarina, alteran la microbiota, la flora intestinal y los niveles de azúcar en sangre, por ello, es mejor optar por otras opciones como sustitutivos de azúcar: 

1. Stevia

En We Life, explican que en el caso de los edulcorantes naturales, cuanto menos refinado sea más saludable será. 

Y en este caso la stevia es considerada el mejor endulzante según las últimas revisiones, ya que es natural y no tiene calorías. Eso sí, cuidado al usarlo por primera vez, ya que es mucho más dulce que el azúcar. 

Es apto para personas diabéticas, pero como siempre, es mejor moderar su consumo y sobre todo, observar si el producto del supermercado es natural o se han aislado los glucósidos de esteviol (cuya seguridad ha sido analizada por la EFSA) entonces, seguiría siendo una buena opción, pero no tan natural.

2. Aspartamo

El aspartamo es otra buena opción y, del mismo modo que la stevia, endulza mucho más que el azúcar de mesa, se estima que entre 150 y 200 veces más. 

Se elabora a partir de 2 aminoácidos (ácido aspártico y fenilalanina) que aparecen de forma natural en alimentos como la carne, cereales, lácteos y fruta madura, pero los productos de aspartamo que puedes encontrar en el supermercado suelen estar procesados. 

3. Xilitol o azúcar de abedul

El xilitol o azúcar de Abedul es un endulzante de origen 100% natural que se procede de la madera del abedul. Aunque lleva el mismo nombre 'azúcar' de abedul, aporta solo el 40% de las calorías. 

Los estudios apuntan a que es seguro para salud dental y que podría ayudar a prevenir la formación de placa y evitar el mal aliento. El xilitol se suele recomendar a personas con diabetes por su bajo índice glucémico.

4. Eritritol

Es otro polialcohol como el xilitol, y es una de las opciones más populares hoy en día ya que no aporta calorías, no eleva la glucosa en sangre y no daña los dientes. 

De hecho, se tolera mejor que el anterior y su sabor es más agradable que el de la stevia, aunque sigue siendo muy dulce.