Las nuevas tecnologías impulsan 61 nuevas profesiones, pero las empresas no encuentran perfiles cualificados: "Tiene que haber una forma en la que oferta y demanda se encuentren"

Los retos del futuro de los que se hablaba hace menos de una década ya están aquí. 

Uno de los desafíos que más preocupaban hace algunos años era la capacidad de digitalización de las empresas, pero existía uno mayor al que parece que se está llegando tarde: la formación tecnológica de los trabajadores y futuras generaciones. 

La mayoría de empresas han completado su proceso de digitalización y muchas de ellas están incorporando las nuevas tecnologías para desarrollar nuevos modelos de negocio, pero también para aumentar su eficacia productiva, un proceso que la pandemia aceleró. Y como consecuencia de ello, las compañías están buscando talento capaz de dominar estas nuevas tecnologías. 

Mientras que la inteligencia artificial amenaza con destruir puestos de trabajo, la visión de los expertos tecnológicos y del sector de recursos humanos, afirman que la revolución tecnológica creará más puestos de los que destruirá –de hecho, ya ha empezado a hacerlo–.

Según el último informe presentado el pasado viernes por DigitalES, la Asociación Española para la Digitalización, que hace una radiografía de los empleos emergentes en España, han surgido 61 profesiones nuevas cuyas ofertas de empleo han aumentado un 200% en España entre 2019 y 2022.

Respecto a la revolución de la industria 4.0 que están provocando tecnologías como el metaverso o la inteligencia artificial, Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, en el discurso de apertura del evento en el que se presentaba el informe, ha denominado a este proceso una "destrucción creativa". 

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Es decir, las nuevas herramientas harán que desaparezcan puestos, pero generarán otros. El futuro del modelo laboral pasa por integrar las nuevas tecnologías garantizando la empleabilidad de las personas, donde los trabajadores vayan adquiriendo nuevas funciones, dejando las que solían hacer en manos de las máquinas. 

En la nueva economía digital, las empresas de todos los sectores están demandando cada vez más talento tecnológico para desarrollar sus modelos de negocios.

Las 2 principales tendencias de contratación para este año 2023, según las expertas consultadas por Business Insider España, implicaban perfiles que supiesen adaptarse al cambio y que tuviesen unos amplios conocimientos digitales, ya que la digitalización de esta economía requiere que imperen perfiles capaces de seguir formándose continuamente. 

Según el informe, a cierre de 2022, las profesiones emergentes sumaban más de 11.500 ofertas de empleo en portales generalistas como InfoJobs y otros especializados. 

Por ejemplo, uno de los nuevos trabajos que ha traído la digitalización y los avances tecnológicos ha sido el de machine learning engineer, cuya demanda de perfiles se ha multiplicado por 6 desde 2019: de 53 a 297, y que está detrás de herramientas como ChatGPT. 

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Pero no solo, las posiciones de cloud engineer e ingeniero de datos son los puestos más ofertados en nuestro país y los más novedosos son los que tienen que ver con la tecnología blockchain aplicada al entorno de las finanzas y de la economía, con un aumento de ofertas del 205%. 

Pero aunque la oferta haya aumentado en tales dimensiones, no existe demanda para la cantidad de puestos generados por las nuevas tecnologías porque no hay talento formado que sepa dominarlas. Por ello, el mercado laboral se enfrenta al reto del cambio tecnológico, pero no solo: también hay que tener en cuenta el envejecimiento de la población y el cambio climático, según apunta el informe. 

En este sentido, Román Campa, CEO de Adevinta, apuntada aque tiene que existir "un talento capaz de cubrir estas necesidades" para que de alguna forma "la oferta y la demanda se encuentren" y deje de existir ese desequilibrio. 

Las soluciones temporales mientras las nuevas generaciones se forman conjuntamente tanto en habilidades características de las humanidades como de las tecnológicas, el uspkilling y el reskilling es "la forma en la que se puede abordar ese mercado",  señala Campa.