"El tema más tabú que he visto nunca": La lucha interna de Microsoft en torno a la guerra de Gaza

Los mensajes internos de Microsoft ofrecen una visión de la ira con la que se está lidiando en las empresas a medida que la guerra avanza.
Los mensajes internos de Microsoft ofrecen una visión de la ira con la que se está lidiando en las empresas a medida que la guerra avanza.

Chelsea Jia Feng/BI

  • Microsoft diseñó la plataforma Viva Engage como una especie de "Facebook para el trabajo", cuyo objetivo era ser una alternativa a Slack. Pero se le ha ido de las manos.
  • La guerra entre Israel y Hamás, ha avivado el conflicto entre los trabajadores en esta plataforma, con numerosos insultos entre aquellos que defienden Israel y los que apoyan al pueblo palestino.

Viva Engage, el ingenioso tablón de mensajes de Microsoft diseñado para competir con Slack, se describe a menudo como un "Facebook para el trabajo". Microsoft señala que la herramienta "fortalece las relaciones" entre los empleados que teletrabajan y los que hacen horario híbrido y "crea un sentido de pertenencia y propósito". Pero desde el comienzo de la guerra entre Israel y Hamás, según ha podido saber Business Insider, la plataforma se parece más al Facebook convencional: un lugar de hostilidad y ataques personales.

En octubre, según los mensajes internos vistos por Business Insider, un empleado de Microsoft compartió un post alabando los créditos fiscales para niños como una forma de reducir la pobreza. El post no mencionaba nada relacionado con la guerra. Pero la persona utilizaba la bandera palestina como avatar, y eso fue suficiente para levantar la liebre.

"¿Te has dado cuenta de que tu foto de perfil es similar a la bandera utilizada por un grupo terrorista que acaba de torturar y decapitar a cientos de niños y civiles?", preguntaba otro empleado.

En otro post, cuando otra persona expresó su preocupación por los civiles de Gaza, un compañero respondió: "Básicamente estás apoyando la violación, el asesinato y el secuestro de mujeres, niños y ancianos".

"Celebrar o apoyar a esta 'nación' no es diferente de celebrar o apoyar los tiroteos masivos de Uvalde o Sandy Hook", respondía otro compañero en alusión a tiroteos masivos recientes en Estados Unidos.

Algunos empleados pro palestinos también han utilizado un lenguaje incendiario en sus mensajes en Viva Engage. Uno de ellos calificó las acciones de Israel en Gaza de "limpieza étnica". Otro acusó a un compañero de trabajo que apoyaba a Israel de "permitir un genocidio en Gaza".

Microsoft, al igual que muchas empresas, se ha ido posicionando cada vez más en cuestiones sociales y políticas. Tras el asesinato de George Floyd en 2020, la empresa se comprometió a duplicar el número de empleados negros en puestos directivos para 2025. "Nos comprometemos a tomar medidas para ayudar a abordar la injusticia racial y la desigualdad, y creemos inequívocamente que las vidas de las personas negras importan", escribió entonces el CEO Satya Nadella. Cuando el Tribunal Supremo anuló el caso Roe contra Wade el año pasado, Kathleen Hogan, directora de personal de la empresa, envió un correo electrónico a toda la compañía, visto por Business Insider, en el que lo calificaba como "un día muy difícil para muchos de nosotros, incluyéndome a mí". 

Después de que Hamás atacara Israel el 7 de octubre, la empresa emitió varias declaraciones de apoyo a Israel, se ofreció a igualar las donaciones de los empleados a organizaciones israelíes, incluida la organización sin ánimo de lucro Amigos de las Fuerzas de Defensa de Israel, y concedió a los 3.000 empleados israelíes de Microsoft un pago de 3.000 dólares (unos 2.700 euros) para "gastos imprevistos a causa de la situación". 

Pero el debate que está teniendo lugar en la plataforma interna de Microsoft está poniendo a prueba la convivencia de los trabajadores con distintas ideas políticas, al igual que ha ocurrido en instituciones de élite, desde Harvard y Columbia hasta Silicon Valley y Wall Street. Los mensajes y correos electrónicos revisados por Business Insider ofrecen una visión de la ira con la que se está lidiando en las empresas a medida que la guerra avanza. Lo que en otro tiempo era un asunto reservado a la cafetera se ha trasladado a plataformas empresariales como Slack y Viva Engage, obligando a las empresas a decidir dónde trazar el límite de la discusión política en el trabajo. 

Microsoft ha intentado activamente regular el debate interno sobre la guerra. Ha aconsejado a los managers que "eviten hacer comentarios sobre la guerra" más allá de las declaraciones oficiales de la empresa. Ha cortado los comentarios a los mensajes de Viva Engage que consideraba demasiado incendiarios. Y al menos en un caso, un mando intermedio ha amonestado a un empleado por una publicación considerada inapropiada.

Nuestra declaración de principios habla de 'cada persona', pero da la sensación de que los empleados palestinos no existen

Pero internamente, las medidas de Microsoft solo han servido para avivar aún más las tensiones. Algunos trabajadores acusan a la empresa de moderar los mensajes que expresan preocupación por los palestinos, mientras que sus altos cargos expresan abiertamente su apoyo a Israel. "Lo que me parece especialmente preocupante es el doble rasero. Nuestros dirigentes hablan de política en el trabajo con mucha regularidad, como creo que deberían hacer. Este es el tema más tabú que he visto", dijo el empleado amonestado, al que se ordenó que dejara de publicar mensajes políticos en Viva Engage después de que compartieran noticias sobre víctimas civiles en Gaza.

Otros empleados se han hecho eco de esa preocupación. "Lo que es muy decepcionante de Microsoft es que elegimos esta empresa por sus valores y la declaración de su propósito de 'capacitar a cada persona y a cada organización del planeta para lograr más'. Nuestra misión habla de 'cada persona', pero parece que los empleados palestinos no existen", señala otro.

Microsoft insiste en que su papel en el debate ha sido ecuánime. "Hemos sido explícitos en que nuestra prioridad está con nuestros empleados". No estamos tomando 'partido'", indicó la empresa en un comunicado. Pero algunos de los trabajadores que apoyan a Israel parecen creer que la empresa comparte sus puntos de vista sobre la guerra (y se envalentonan para expresar hostilidad a los compañeros que consideran insuficientemente pro-Israel, sin temor a represalias).

"Espero que sepas que toda la empresa está leyendo tus comentarios", publicó uno en respuesta a un debate sobre las formas de prestar apoyo a los civiles palestinos afectados por la guerra. "Y esperemos que esos empleados se encuentren fuera de esta empresa", añadió otro.

Empresas isrealíes

Lo que complica el papel de Microsoft en el debate es la participación financiera de la empresa en Israel, donde tiene oficinas desde 1989. En 1991 abrió en Haifa su primer centro de investigación y desarrollo fuera de Estados Unidos, "una de las primeras grandes empresas tecnológicas en hacerlo en Israel", según Microsoft. Hoy tiene campus en Herzliya, Tel Aviv, Haifa y Nazaret. En 2021, la firma anunció que invertiría hasta 1.500 millones de dólares (unos 1.366 millones de euros) para construir un centro de datos en Israel y ampliar su I+D para chips. Nadella dijo a Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, que su país "es un centro de desarrollo muy importante para Microsoft."

Como muchas empresas, Microsoft y sus directivos se apresuraron a expresar su apoyo a Israel después de que Hamás desatara su asalto el 7 de octubre y tomara unos 240 rehenes. "Nuestros corazones están con todos vosotros tras el devastador ataque contra vuestro país. Vuestra seguridad es lo más importante para todos nosotros", escribió Charlie Bell, vicepresidente ejecutivo de seguridad de Microsoft, a los trabajadores israelíes. 

"Estamos con Israel", añadió Scott Guthrie, vicepresidente ejecutivo de la nube de Microsoft, en otro correo electrónico el 9 de octubre. "Mis pensamientos están con nuestros compañeros israelíes y judíos y con todos los afectados por estos acontecimientos, junto con sus amigos y familiares en todo el mundo", escribió Rajesh Jha, líder del equipo de experiencias y dispositivos, en Viva Engage el 10 de octubre.

Me entristece ver a partidarios del terror entre mis compañeros. Quienquiera que sugiera que esta masacre forma parte de alguna lucha por la libertad ha perdido toda humanidad

El post de Jha provocó una respuesta inmediata en el tablón de mensajes. "¿Podemos también ofrecer pensamientos, oraciones y bendiciones a todos y cada uno de nuestros compañeros palestinos que puedan estar temiendo por sus familias, amigos y por sí mismos? Este conflicto tiene dos caras humanas que se ven afectadas por la violencia de la política", escribió un empleado.

La respuesta, a su vez, enfureció a otro empleado. "Me entristece ver partidarios del terror entre mis compañeros. Quienquiera que sugiera que esta masacre forma parte de alguna lucha por la libertad ha perdido toda humanidad", escribió otro. Cuando Israel lanzó una contraofensiva en Gaza, empezaron a surgir fuertes discusiones en Viva Engage. "Ten por seguro que las Fuerzas de Defensa de Israel están haciendo todo lo posible para evitar víctimas civiles", publicó un empleado, "pero la gente de Gaza eligió a Hamás, los apoyó y se lo buscaron ellos mismos".

"¿Cómo puedes poner a civiles inocentes en la misma categoría que las organizaciones terroristas?", respondió otro empleado. "Matar a civiles inocentes de cualquier bando nunca está bien, y sentirse mal por todos los implicados es simplemente decencia humana básica".

"No lo estoy y estamos luchando para liberar a los israelíes y al pueblo de Gaza de estos terroristas. Intentar crear una simetría o describirlo como un conflicto con dos bandos legítimos es ignorante o inmoral", indicó de nuevo el primer trabajador.

En otro post, un empleado compartió un mensaje de preocupación por los trabajadores de Microsoft que tienen amigos y familiares en Palestina, diciendo: "Esas personas están siendo aniquiladas y sus medios de vida destruidos. Se les corta el acceso a la comida, al agua, a la electricidad y a los suministros médicos básicos. No son terroristas ni tienen una agenda contra los israelíes. Por favor, mantened la misma distancia entre ambas partes. Es lo menos que podéis hacer".

"Estamos hablando de terrorismo. No hay justificación para eso", señaló otro.

Otro comentario avivó aún más el fuego: "No somos capaces de contener el mal que nos infligieron el sábado por la mañana. Eso nos obliga a cambiar las reglas del juego. La gente de Hamás en Gaza será exterminada. El precio en vidas humanas será alto ya que los cobardes se esconden detrás de civiles.... Esta es una guerra de supervivencia para Israel. Pero puedo asegurar que la ganaremos".

Zuckerberg vs Musk

A medida que se intensificaban las luchas internas, los empleados presionaban a la empresa para que moderara el tono. "La dirección de Microsoft tiene que controlar muy bien los mensajes sobre este asunto. Se arriesgan a causar una angustia significativa a muchos empleados palestinos, árabes y judíos cuando se escriben comentarios precipitadamente y sin moderación", expresó un empleado.

"Los palestinos como yo recibimos cero apoyo de nuestra dirección. La empresa no ha sido imparcial y los compañeros de Israel han actuado de forma racista, y no reconocen ni respetan nuestro dolor. Debemos alinearnos y apoyarnos mutuamente. En estos momentos tan dolorosos hay que reconocer los errores que no se alinean con los valores y la cultura de Microsoft", escribió otro.

Otro trabajador se mostró en desacuerdo: "Las personas que alientan actos terroristas y crímenes de guerra no deberían recibir ningún apoyo. Israel tiene derecho a defenderse. El único sesgo que veo aquí es el tuyo, que no ves a Hamás responsable de lo que está ocurriendo ahora mismo en la franja de Gaza".

Pero cuando la empresa intervino en el debate, vetó los comentarios de muchas publicaciones que expresaban apoyo a la población de Palestina y Gaza. A mediados de octubre, un trabajador publicó que sentía una "fuerte desilusión con la empresa" por lo que consideraba "declaraciones unilaterales" de los altos dirigentes de Microsoft. "Me entristece ver cómo una empresa que promueve tanto la diversidad y la inclusión muestra una discriminación y una marginación tan fuertes. Me parece que la empresa es ajena al sufrimiento abrumador y desproporcionado del pueblo palestino", señaló. Microsoft vetó los comentarios tras 600 reacciones y 60 comentarios

La empresa también vetó los comentarios en otras publicaciones. Una decía, simplemente: "¡Exigimos un #CeseAlFuegoYa Microsoft!". Otro iba dirigido a los "más de 10.000 hombres, mujeres y niños de Gaza que han sido asesinados innecesariamente". Otro decía: "Es muy duro ser testigo de lo que solo puede describirse como una limpieza étnica, que no solo está respaldada por la mayoría de los medios de comunicación occidentales, sino que también es ignorada por la alta dirección de la empresa para la que trabajo todos los días". Cada uno de los mensajes cerrados iba acompañado de la misma nota del responsable de la comunidad, que invitaba a los empleados a "practicar la empatía y la amabilidad con los demás".

Microsoft, por su parte, insiste en que los comentarios incendiarios sobre la guerra representan lo que Letty Cherry, portavoz de la compañía, describe como "una porción muy pequeña de la conversación" en Viva Engage. "Desde que se desencadenaron estos acontecimientos hemos seguido reiterando a través de nuestros mensajes, acciones y esfuerzos filantrópicos que nuestro objetivo es la seguridad de nuestros empleados, que incluye a nuestros casi 3.000 empleados directamente afectados en Israel, así como a nuestros empleados palestinos, judíos y musulmanes en todo el mundo. Contamos con un proceso para moderar los comentarios, así como para tomar medidas ante comportamientos contrarios a la política o los valores de nuestra empresa", señaló Cherry en un comunicado.

Otras empresas también se han visto en apuros por el debate sobre la guerra de Gaza. Harvard y otras universidades de élite se han enfrentado a la reacción pública de importantes donantes enfurecidos por las declaraciones de estudiantes que consideran antiisraelíes. Davis Polk & Wardwell, uno de los mayores bufetes de abogados del mundo, ha rescindido ofertas de trabajo a estudiantes de las facultades de la Ivy League —las más prestigiosas de Estados Unidos— por criticar a Israel. Google, según The New York Times, "se ha hundido en un pantano de hostilidad e intolerancia" hacia los empleados musulmanes y judíos. Y Apple, según ha sabido Business Insider, ha suspendido indefinidamente sus canales de Slack para empleados judíos y musulmanes. (La compañía tiene 2.000 empleados en Israel, donde mantiene un centro de I+D al norte de Tel Aviv). "Estamos tomando esta medida para garantizar un ambiente respetuoso para nuestras comunidades durante un momento doloroso y trágico", dijo un empleado de Apple responsable del canal Slack musulmán.

En Microsoft, el intento de moderar el debate interno llegó finalmente hasta la cúpula. El 8 de noviembre, después de que más de 1.000 empleados firmaran una carta en Viva Engage instando a la empresa a apoyar un alto el fuego, Nadella publicó un mensaje propio. En él, el CEO expresaba su preocupación tanto por los empleados israelíes como por los palestinos.

"Es importante reconocer el dolor y el sufrimiento de tantas personas, incluidos nuestros compañeros, a medida que los acontecimientos en Israel, Gaza y la región circundante continúan desarrollándose. Estoy extendiendo mi más profundo pésame y apoyo a nuestros empleados israelíes y palestinos a nivel mundial que están consumidos por el dolor y la preocupación por sus seres queridos, así como a nuestros compañeros judíos y musulmanes que se enfrentan a un aumento aterrador en el antisemitismo y la islamofobia", expresó Nadella.

El CEO también instó a los empleados a moderar el tono de sus mensajes. "No hay absolutamente ningún lugar en nuestra empresa para el odio y la intolerancia de ningún tipo. Debemos seguir comprometiéndonos con la inclusión y la aceptación, y permanecer unidos contra el odio y la intolerancia allá donde los veamos", añadió.

El mensaje de Nadella no permitía comentarios.

Tampoco frenó el aluvión de rencor entre los empleados. El 16 de noviembre, apenas una semana después de que Nadella hiciera su llamamiento al civismo y el respeto, Microsoft impidió a los empleados publicar en el canal "Toda la empresa" de Viva Engage, que distribuye mensajes a los 400.000 empleados y proveedores de Microsoft. Para mantener el orden, Microsoft se vio obligada a cerrar una función clave de uno de sus productos más conocidos. La empresa, que dijo que el cambio llevaba "algún tiempo en desarrollo", comunicó a los trabajadores que limitaba el canal a "anuncios e información que todo el mundo debería conocer". 

Con este debate tan activo, al parecer, lo último que necesita la compañía es un "Facebook para el trabajo".

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