"Ya nos han estado matando de hambre": los actores de Hollywood en huelga por los salarios y la amenaza de la IA están preparados para la "guerra"

Para intérpretes como Laci Mosley, actriz de varias series, entre ellas el reboot de Paramount+ de iCarly, las últimas horas han sido dolorosas.

"Me he pasado la mayor parte de la mañana llorando", explicaba Mosley, de 32 años, a Business Insider el pasado jueves, cuando la dirección del sindicato de actores SAG-AFTRA convocó una huelga contra cientos de cadenas, streamers y estudios de Hollywood. 

Apenas unas horas después de que el sindicato anunciara su primer paro laboral en más de 40 años, Mosley explicó que ella y sus amigos ya estaban notando los efectos.

Mientras dure la huelga, Mosley —cuyo currículum incluye papeles en series como Lopez vs. Lopez, de la NBC, y Unos suegros de armas tomar, de Netflix— dice que tendrá que posponer el proyecto televisivo que estaba preparando.

Además, la contratación de otros actores en su podcast Scam Goddess —producido en colaboración con Sirius XM, Earwolf y la productora de Conan O'Brien, Team Coco— está prohibida, al menos si tienen intención de hablar de su trabajo. Según las normas del sindicato, los miembros tienen prohibido promocionar sus proyectos durante la huelga.

En unas apasionadas declaraciones el jueves, Fran Drescher, presidenta de SAG-AFTRA, calificó de "insultante" la conducta de las empresas de Hollywood en las negociaciones. Muchas de las preocupaciones que impulsan el paro de los actores —en particular, el temor a que la inteligencia artificial invada sus medios de vida— son compartidas por los trabajadores de todas las industrias, explicó a los periodistas en una rueda de prensa en Los Ángeles.

"Todos vamos a correr el riesgo de ser sustituidos por máquinas y grandes empresas, a las que les importa más Wall Street que tú y tu familia", dijo Drescher. "Todo el modelo de negocio ha cambiado por el streaming, lo digital y la IA", añadió.

Business Insider ha hablado con varios miembros de SAG-AFTRA sobre los temas más importantes para ellos y sobre cómo se mantendrán a sí mismos y a sus familias mientras dure la huelga. Los actores en activo entienden lo que está en juego y van a llevar esta lucha hasta el final, según Mosley, que añade que llevan demasiado tiempo soportando presiones financieras y una disminución de los ingresos secundarios. La adversidad ha dado paso a la tenacidad.

"De verdad creo que todos vamos a morir en esta colina", afirma. De lo contrario, añade, los estudios podrían "destruir todo lo que hemos construido".

"Tenemos que ir a la guerra".

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Los estudios "ya nos han estado matando de hambre", denuncian los actores

El viernes por la mañana empezaron a librarse las primeras batallas de esa guerra.

Miles de actores se echaron a las calles de Los Ángeles y Nueva York, formando piquetes y reforzando a los miembros del Sindicato de Guionistas de Estados Unidos, en huelga desde hace casi tres meses.

Ambos grupos protestan contra la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP, por sus siglas en inglés), la asociación que negocia en nombre de los empresarios de Hollywood. En los últimos días ha surgido la versión de que la AMPTP está intentando asediar a los sindicatos, hasta que sus miembros se vean obligados a ceder ante la presión financiera.

Los miembros del WGA, en particular, se han movilizado a raíz de un provocador artículo publicado la semana pasada en Deadline, en el que un "ejecutivo de un estudio" anónimo decía al medio: "El objetivo final es dejar que las cosas se alarguen hasta que los miembros del sindicato empiecen a perder sus pisos y sus casas".

"El día 72 ya se nos estaba resquebrajando el alma", escribió un miembro anónimo del WGA en The Hollywood Reporter. Pero "esas citas nos turboalimentaron", añade el escritor.

Un portavoz de la AMPTP ha declarado a Business Insider que las fuentes de Deadline "no hablan en nombre de nuestras empresas, que están comprometidas a llegar a un acuerdo y conseguir que nuestra industria vuelva a la actividad".

Mosley afirma que ella y otros miembros del sindicato son más resistentes de lo que la AMPTP podría suponer. 

"Ya nos han estado matando de hambre", asevera. "Estamos recibiendo nóminas que son céntimos por los derechos de imagen remanentes o ni siquiera eso", añade, "algo que la gente olvida cuando está sentada en sus torres de marfil".

Las empresas de Hollywood representadas por la AMPTP están "pensando que no podemos sobrevivir sin ellos, cuando todo lo que hemos estado haciendo es sobrevivir sin ellos", señala Mosley. "Todo el mundo ya está acostumbrado a pasar hambre y ya estamos haciendo actuaciones. Ya tenemos varios trabajos. Estamos preparados".

Tras el anuncio de la huelga de actores, los representantes de la AMPTP contraatacaron. "En lugar de seguir negociando, SAG-AFTRA nos ha puesto en un camino que profundizará las dificultades financieras de miles de personas que dependen de la industria para su subsistencia", dijo la asociación.

En un comunicado difundido el pasado jueves, la AMPTP esbozó algunas de sus propuestas a los actores. Entre ellas, un aumento salarial del 58% para las estrellas invitadas en programas de streaming de "alto presupuesto", aumentos para los artistas secundarios y los actores suplentes que leen los diálogos durante los ensayos, el "mayor aumento porcentual de los sueldos mínimos" en más de tres décadas, y una "innovadora propuesta de inteligencia artificial" destinada a abordar una de las principales preocupaciones de los actores: el avance implacable de la tecnología.

Pero en entrevistas de prensa y en los piquetes de Los Ángeles el viernes, Drescher y Duncan Crabtree-Ireland, director ejecutivo de SAG-AFTRA y principal negociador, han seguido criticando duramente las ofertas de la AMPTP y repitiendo un mantra de sus declaraciones del mismo jueves por la mañana: "Se acabó la fiesta".

"Tenemos un mes o dos antes de quedarnos sin techo"

Las protecciones ofrecidas por la AMPTP han hecho poco por apaciguar los temores de gente como Sam Russell, actor de 45 años y recién llegado a la SAG-AFTRA tras obtener su carné sindical el año pasado.

Russell decidió dedicarse a la interpretación tras dos décadas como estilista, y ya ha conseguido trabajos en proyectos como Hospital General y Oppenheimer, la esperada película de Christopher Nolan que se estrena este fin de semana, en la que formó parte del reparto.

Los protagonistas de esa película, entre ellos Matt Damon, Emily Blunt y Rami Malek, abandonaron su estreno en Londres la semana pasada en señal de unidad con la SAG-AFTRA. "Es devastador", dice Russell. "Es muy triste para los fans. Es muy triste para todos los implicados en los proyectos".

Pero lo que más preocupa a Russell es la posibilidad de que las herramientas de IA den a las empresas de AMPTP el poder de reducir el salario de los artistas secundarios o sustituirlos por completo. "Eso cierra las puertas a la gente que, como yo, intente abrirse camino en el futuro", afirma.

Pero lo que más preocupa a Russell es la posibilidad de que las herramientas de IA den a las empresas de AMPTP el poder de reducir el salario de los artistas secundarios o sustituirlos por completo. "Eso cierra las puertas a la gente que, como yo, intente abrirse camino en el futuro", afirma.

La idea de que las "réplicas digitales" de los artistas que trabajan en segundo plano podrían ser apropiadas por las productoras sin su consentimiento o a cambio de un pago es "falsa", asegura el portavoz de la AMPTP. "De hecho, la actual propuesta de la AMPTP sólo permite a una empresa utilizar la réplica digital de un actor secundario en la película para la que trabaje. Cualquier otro uso requiere el consentimiento del actor y el acuerdo para el uso, sujeto a un pago mínimo", afirma el portavoz en un comunicado.

Russell dice que planea pasar la mayor parte de la huelga buscando otras formas de trabajo. "Soy esa persona de clase trabajadora a la que le queda un mes o dos antes de quedarse sin casa", añade. "Siempre tengo que seguir buscándome la vida".

Poco antes de que se convocara la huelga, el CEO de Disney, Bob Iger, lanzó un mensaje desafiante sobre los movimientos de actores y guionistas, calificándolos de "muy inquietantes".

"Tienen un nivel de expectativas que no es realista", dijo Iger durante una entrevista televisada por la CNBC desde el cónclave anual de altos directivos de la industria audiovisual en Sun Valley (Idaho).

Los miembros del sindicato se apresuraron a tachar sus declaraciones de incendiarias y fuera de lugar. "La gente en posiciones de poder como Bob siempre va a convertir en villanos a los que piden lo mínimo", sentenció Mosley.

Las declaraciones de Iger se produjeron después de que Disney anunciara el miércoles que permanecería en la compañía dos años más, lo que le permitiría ganar varios millones más en incentivos anuales. Según Jonathan Handel, abogado especializado en entretenimiento y colaborador de Puck, estos comentarios podrían suscitar dudas sobre por qué los artistas no reciben bonificaciones por crear propiedad intelectual de éxito, como las exitosas franquicias de streaming.

"¿Por qué no tenemos una métrica de éxito para los remanentes por streaming?", se pregunta, esbozando las posibles dudas de actores y guionistas. "Si tienes tanto dinero para repartir, ¿dónde está mi pequeña y diminuta parte?".

"Hemos luchado mucho para llegar hasta aquí y lo seguiremos haciendo para sobrevivir"

Carson Rowland, estrella de Dulces Magnolias de Netflix, tiene papeles recurrentes en Pretty Little Liars: Original Sin y American Housewife de ABC estaba en su casa en el sur de Florida con su esposa el viernes cuando estalló la huelga.

El actor de 25 años lleva allí desde mayo, cuando la huelga de guionistas prácticamente paralizó la producción en Los Ángeles y Nueva York esta primavera.

El mes pasado, el matrimonio anunció que espera su primer hijo para noviembre. "Estoy intentando formar una familia, y la verdad es que me da bastante miedo", afirma Rowland, quien añade que la pareja está financieramente saneada y que recientemente ha revisado su presupuesto para ajustar los gastos. La semana pasada, dice, su agente le animó a centrarse en el boom de oportunidades que puede surgir cuando esto termine.

Rowland espera que la SAG-AFTRA pueda conseguir una mayor protección para los actores que hacen malabares con múltiples ofertas, ya que se ha enfrentado al dilema de tener que rechazar trabajos debido a contratos muy exigentes que retienen a los actores cuando podrían estar trabajando.

Mientras tanto, ha aprobado el examen de asesor financiero y ha asumido un puesto de gestión empresarial en Atlas Financial Advisors, en Boca Ratón. Pero lo que más desean Rowland y sus amigos es un poco de normalidad.

"Un par de amigos y yo bromeamos: 'Sólo queremos que haya un poco de normalidad'", dice, refiriéndose al doble golpe de la pandemia y ahora la huelga.

De vuelta a Los Ángeles, Mosley se lamenta de la sensación de verse apartada de la "alegría" de su oficio, posiblemente durante meses.

Actuar "es el propósito de mi vida", dice entre lágrimas. "No saben cuánto tiempo lleva hacer lo que hacemos y cuánto corazón tenemos que tener para luchar contra quienes intentan acabar con nuestra industria", afirma refiriéndose a los estudios.

"Hemos luchado mucho para llegar hasta aquí y lo seguiremos haciendo para sobrevivir".