Órdago a la vivienda: ¿Son un brindis al sol las medidas del Gobierno?

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez

REUTERS/Jon Nazca/File Photo

  • Aunque lo anunciado hasta ahora tenga apariencia de medidas consolidadas, lo cierto es que la mayoría son solo promesas. Promesas difíciles de cumplir. En BI España analizamos por qué.
  • Ayudas para hipotecas… pero para pocos jóvenes, nuevos pisos… dentro de 10 años, préstamos… para propietarios descontentos, o pisos de la Sareb… en ciudades sin demanda.


Con las elecciones a la vuelta de la esquina, el Gobierno ha puesto los ladrillos sobre la mesa. En las últimas semanas no deja de lanzar medidas de vivienda. Casi tantas, como días quedan para el 28 de mayo.

La vivienda se ha convertido en el gran tema electoral. En cuestión de días, el Ejecutivo ha aprobado la nueva ley de vivienda, que llevaba 2 años encallada, el reparto de 50.000 pisos de la Sareb entre las comunidades autónomas, una línea de crédito de 4.000 millones de euros para financiar 43.000 pisos de alquiler a precio asequible, ayudas a jóvenes para pedir hipotecas, o la construcción de 20.000 viviendas en suelos de Defensa.

Ha hecho falta, eso sí, que llegaran las elecciones, para que el drama de la vivienda en España —un problema que lleva arrastrándose mucho tiempo— llegue a estar en el centro del debate. Nada como la llegada inminente de un deadline político para hacer grandes anuncios.

Y ahí está precisamente el peligro. Aunque lo anunciado hasta ahora tenga apariencia de medidas consolidadas, lo cierto es que la mayoría son solo promesas. Promesas, en muchos casos, difíciles de cumplir, por diversas razones. Algo que, sin duda, aporta un marcado carácter electoralista.

"El PSOE está nervioso. El experto demoscópico les ha contado que les vota poca gente joven, y uno de los grandes problemas del colectivo es el del acceso a la vivienda", señala Gonzalo Bernardos, profesor Titular y director del Máster Inmobiliario de la Universidad de Barcelona.

La parte buena de estos anuncios es que la necesidad acuciante de sacar más vivienda al mercado está ahí. "Todo el esfuerzo dedicado a aumentar la oferta de vivienda asequible es prometedor y va en la dirección adecuada para resolver el problema", señala un informe publicado por EsadeEcPol.

La mala, que podría quedar en un mero brindis al sol. Entre otras cosas, porque la legislatura está a punto de terminar. Las elecciones están a la vuelta de la esquina, y para sacar oferta al mercado no solo hacen falta anuncios: hace falta tiempo para desarrollar esas medidas.

"Esto es un brindis al sol. Ninguna de estas medidas son de hoy para mañana. En cuanto se pasen las elecciones, se olvidarán", lamenta Bernardos. 

En Business Insider España hemos analizado, uno por uno, los últimos anuncios, para saber hasta qué punto son medidas realizables o por qué podrían quedar en un órdago a la grande.

Vivienda terraza piso

Ayudas para pedir hipotecas… pero a pocos jóvenes

Los jóvenes son, desde hace tiempo, el colectivo que más está sufriendo el drama habitacional en España. La precariedad laboral que arrastran, sumada a un mercado inmobiliario al rojo vivo, han provocado que emanciparse sea una utopía para la mayoría de jóvenes.

¿En qué consiste la medida? Para mitigar este problema y ayudar al acceso a la compra de vivienda por parte de los más jóvenes, el Consejo de Ministros aprobó esta semana la concesión de avales para jóvenes para la compra de vivienda habitual. Como los bancos no conceden hipotecas por el 100% del valor de compra, sino hasta el 80%, el Estado avalará hasta un 20-25% restante.

¿Por qué puede ser un brindis al sol? La medida sólo beneficiará a 50.000 jóvenes en toda España, una cifra residual, teniendo en cuenta los millones de jóvenes menores de 35 con dificultades de acceso a la vivienda. 

Además, matiza Bernardos, "tal y como estamos con las subidas de tipos de interés y con los bancos cerrando el grifo del crédito, a ver quién pide una hipoteca ahora". Y quién lo concede: "Le están pidiendo a los bancos que hagan lo que llevan años diciendo que no se podía hacer: dar financiación al 100%", añade.

Un grupo de personas en una ilustración

20.000 pisos en suelo militar… dentro de 10 años

¿En qué consiste la medida? El Ministerio de Movilidad, Transportes y Agenda Urbana comprará, a través de la Entidad Pública de Suelos (SEPES), hasta 8,25 millones de metros cuadrados de suelo propiedad del Ministerio de Defensa para levantar 20.000 viviendas en toda España que se destinarán a alquiler asequible.

¿Por qué puede ser un brindis al sol? Porque las viviendas no son churros. Construir vivienda lleva tiempo. Pero es que, además, en este caso estamos hablando de suelo del Ministerio de Defensa, por lo que habría que cambiar su calificación para uso residencial. 

"Sacar suelo rápidamente no es posible, pero es que no estamos hablando solo del tiempo que lleva levantar los pisos. Si además de urbanizar tienes que cambiar la calificación de agrícola/industrial a residencial te puedes pasar más de 10 años para hacerlo", critica Bernardos. 

De aquí a 10 años puede cambiar el Gobierno más de una vez. Y, si eso pasa, esta medida puede quedar en una promesa más que se lleva el viento. “El problema de la vivienda en España no se soluciona con una ley. Hace falta un pacto de Estado, una estrategia por parte de todos los actores de la sociedad”, señala Beatriz Toribio, directora general de Masteos.

Unos obreros en la construcción de un bloque de pisos en Barcelona.

Préstamos para alquileres baratos… para propietarios descontentos

¿En qué consiste la medida? El Gobierno se gastará 4.000 millones de euros en préstamos a propietarios para ampliar el parque de vivienda social. El objetivo es movilizar hasta 43.000 viviendas en edificios energéticamente eficientes, que deberán destinarse al alquiler social o a precios asequibles durante, al menos, 50 años.

¿Por qué puede ser un brindis al sol? La parte buena de esta medida es que no se trata de construir viviendas de cero, sino de rehabilitar inmuebles ya existentes y destinarlos a alquiler social. 

El problema es que, para que eso ocurra, el Gobierno está vendido a los propietarios, un segmento del mercado que no está precisamente contento después de la aprobación de la ley de vivienda, y cuyo principal temor es precisamente la pérdida de garantías relativa a la protección de su propiedad.

Ley de vivienda… competencia de las comunidades

¿En qué consiste? La aprobación de una ley de vivienda fue una de las grandes promesas del Gobierno de coalición, y será una de las últimas grandes leyes que llegarán al Senado antes de que termine la legislatura. El problema es que, pese a tratarse de una norma de carácter estatal, la aplicación de la mayoría de las medidas que incluye está a merced de las comunidades. 

¿Por qué puede ser un brindis al sol? Las competencias en materia de vivienda están cedidas a las comunidades y ayuntamientos. En resumen: si una comunidad no quiere aplicar medidas como el control de alquileres o el impuesto a pisos vacíos, no tiene por qué hacerlo. Como reconocen fuentes del propio Ministerio de Movilidad, Transporte y Agenda urbana, “es la comunidad la que decide si declarar o no un área tensionada”. 

“La ley de vivienda está vendida a las comunidades”, resume Bernardos. 

La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, a finales de 2022.

 Un 20% de vivienda pública en 20 años… una quimera

¿En qué consiste? A mediados de abril, la ministra de Movilidad, Transportes y Agenda urbana, Raquel Sánchez, aseguró que en 20 años se alcanzará el objetivo de conseguir el 20% de vivienda pública en España.

¿Por qué puede ser un brindis al sol? Como explican desde EsadEcPol, se trata de una promesa "difícil de imaginar", ya que exigiría que cada año de aquí a 2043 España sumara tantas viviendas al parque social como las que existen a día de hoy.

"Para producir toda esa vivienda, necesitaríamos producir 300.000 viviendas sociales y asequibles al año, cuando ahora mismo estamos promoviendo 150.000 como mucho a precio libre", aclara Toribio. Viviendas sociales al año se producen menos de 10.000.

Una manifestación por el derecho a la vivienda celebrada en Madrid en 2015.

50.000 viviendas de la Sareb… en ciudades sin demanda

¿En qué consiste? El Estado repartirá 50.000 pisos de la Sareb (el conocido como banco malo) para que las administraciones públicas los destinen a alquiler asequible y contribuir a destensar alquileres en algunas ciudades.

En un momento en el que falta oferta urgentemente y construirla llevará años, priorizar reconversión de viviendas a corto plazo para empezar a destensar el mercado cuanto antes es una medida acertada. 

Promoción de vivienda en Seseña

¿Por qué puede ser un brindis al sol?  El problema es que buena parte de esa oferta se ubica en territorios donde la demanda brilla por su ausencia, por lo que no está claro que solucionara gran cosa. 

De esas casi 50.000 viviendas, poco más de 7.000 están en capitales de provincia, mientras que la mayoría se encuentra en territorios con baja demanda e, incluso, en desiertos demográficos. Además, cerca de la mitad de las viviendas de la Sareb necesitan algún tipo de reparación, y 15.000 son solares sin construir, lo que hace pensar que no estarán listas antes de 2025-2027.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.