Neuralink presenta a su primer paciente humano, un joven tetrapléjico de 29 años que afirma que el chip cerebral "no es perfecto", pero le ha cambiado la vida

Lloyd Lee
| Traducido por: 
Una ilustración de Neuralink, la firma de implantes cerebrales propiedad de Elon Musk.

Jonathan Raa/NurPhoto vía Getty

  • Elon Musk anunció en enero que su compañía de tecnología neuronal había implantado un microchip en su primer paciente humano. 
  • Neuralink ha dado a conocer ahora a esa persona durante una retransmisión en directo: Noland Arbaugh, un joven tetrapléjico de 29 años.

Neuralink, la empresa de tecnología neuronal de Elon Musk, ha revelado este miércoles en una retransmisión en directo que su primer paciente humano, que ha sido sometido al implante de un microchip cerebral, es un joven de 29 años que se quedó tetrapléjico tras sufrir un grave accidente de submarinismo hace alrededor de 8 años.

El paciente, Noland Arbaugh, ha asegurado durante la retransmisión —que se ha emitido en X, la red social anteriormente conocida como Twitter propiedad de Musk— que el chip "no es perfecto", pero que ya le ha aportado muchas mejoras a su vida, dándole la capacidad de jugar a videojuegos durante horas sin tener que depender de sus familiares.

"No es perfecto. Diría que nos hemos encontrado con algunos problemas. No quiero que la gente piense que este es el final del viaje. Queda mucho trabajo por hacer, pero ya ha cambiado mi vida", ha expresado Arbaugh, que ha aparecido manteniendo una conversación con Bliss Chapman, ingeniero de Neuralink.

La compañía de tecnología neuronal, que se lanzó en 2016, ha estado trabajando en un implante de cerebral que podría permitir a las personas controlar ordenadores con sus cerebros. Musk anunció en enero que Neuralink había implantado uno de sus microchips en un ser humano por primera vez, tras varios años de pruebas realizadas en monos.

primates monos fallecidos experimento Neuralink Elon Musk

Esos experimentos con animales habían recibido numerosas críticas después de que el Comité de Médicos por una Medicina Responsable (PCRM, por sus siglas en inglés), un colectivo estadounidense, acusase a la empresa de someter a los monos a "un sufrimiento extremo como resultado de un cuidado inadecuado de los animales y de los implantes experimentales altamente invasivos durante los experimentos".

PCRM pidió a los organismos reguladores de Estados Unidos que investigasen al dueño de Neuralink por fraude de valores después de que Musk afirmase en una publicación de X que "ningún mono" había muerto "como resultado de un implante de Neuralink". El multimillonario aseguró después que las instalaciones de la compañía de chips eran como "el paraíso de los monos".

El colectivo de deontología médica estadounidense le envió entonces una carta a la Comisión de Bolsa y de Valores de EEUU (SEC) en la que denunció que Musk sabía que eso era "falso", pero todavía no ha trascendido si la SEC pretende investigar a Neuralink ante las acusaciones de PCRM.

Por ahora la empresa ha pasado a realizar ensayos con humanos.

Durante el streaming de este miércoles, se ha podido ver a Arbaugh utilizando una silla especializada, sentado frente a un ordenador portátil. El joven de 29 años parecía controlar una partida de ajedrez mientras sus manos permanecían en los reposabrazos de la silla.

"Me encanta jugar al ajedrez y esta es una de las cosas que me habéis permitido hacer, algo que no he podido hacer mucho en los últimos años y menos de esta manera", ha señalado Arbaugh refiriéndose a Neuralink. "Tenía que usar un palo de ratón y esas cosas, pero ahora todo se hace con el cerebro".

 

El joven ha relatado cómo se dislocó partes de la médula espinal en un "extraño accidente de submarinismo" hace unos ocho años que le dejó paralizado desde debajo de los hombros. Su estado limitaba su capacidad para jugar a su videojuego favorito, Civilization VI, porque solo podía jugar unas pocas horas seguidas antes de necesitar ayuda de su familia para recolocar su postura corporal.

"Básicamente, había renunciado a jugar a ese juego", ha indicado, y ha añadido que es un "gran juego" que requiere mucho tiempo sentado. "Tengo que preocuparme por muchas cosas: que me salgan úlceras por presión y cosas así. Así que no pude jugar tanto como quería".

Con el chip de Neuralink, Arbaugh ha expresado que ha podido jugar al videojuego durante varias horas tumbado en su cama y que la "mayor restricción" hasta ahora ha sido tener que volver a cargar el implante después de pasar varias horas jugando.

"De esa forma, juego durante ocho horas, tengo que bajarme y dejar que se cargue durante un rato y luego espero poder jugar un poco más", ha comentado.

Arbaugh ha asegurado que controlar el chip de Neuralink pronto se hizo "intuitivo" y que, para mover el cursor del ordenador, por ejemplo, solo tiene que imaginarse que el cursor se mueve: "Básicamente es como usar la fuerza con un cursor".

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.