OpenAI está a punto de iniciar una nueva ronda de financiación con una valoración que será de, al menos, 100.000 millones de dólares (90.705 millones de euros), pudiendo superar con creces la cifra, según informa Bloomberg. La empresa aún está en proceso de conversaciones prematuras, donde no se conocen las condiciones ni el calendario a seguir.

En caso de que la ronda de financiación llegue a buen puerto, OpenAI se convertiría en la segunda startup más valiosa de Estados Unidos, superada solo por SpaceX, de Elon Musk.

La empresa está a punto de completar una Oferta Pública de Adquisición a principios de enero, por la que los trabajadores podrían vender sus acciones, valoradas en 86.000 millones de dólares (78.006 millones de euros). La operación está dirigida por Thrive Capital y ha recibido más demanda de inversores que disponibilidad.

El crecimiento que ha experimentado este 2023 OpenAI refleja la expectación por la inteligencia artificial y cómo el lanzamiento de ChatGPT ha cambiado el acceso a esta tecnología por parte de los usuarios. Todo ello, sin necesidad de tener altos conocimientos.

Hasta el momento, Microsoft ha invertido 11.791 millones de euros en el proyecto, fomentando que gigantes como Amazon o Alphabet busquen un rival a la altura.

Alianza con G42

Además, la compañía clave en inteligencia artificial también está trabajando con G42 para obtener financiación para una nueva empresa de chips. No queda claro si la financiación de ambos proyectos está relacionada, pero por el momento, OpenAI espera obtener entre 8.000 y 10.000 millones de dólares (7.256 - 9.070 millones de euros) de la mano de G42.

Esto encaja con el objetivo del proyecto Tigris, con el que la startup ha estado buscando capital para la fabricación de chips. Ahora, el propósito sería producir semiconductores que puedan competir con los de Nvidia, que domina el mercado.

Ya el pasado mes de octubre, G42 anunció una asociación con OpenAI "para ofrecer soluciones de IA de vanguardia a los Emiratos Árabes y los mercados regionales".  

Con todo, parece que tras la crisis por la salida y reincorporación del CEO, Sam Altman, OpenAI vuelve a ser estable y mira al futuro con nuevos proyectos.