Esta es la forma en la que un programador utilizó ChatGPT para encontrar apartamento en Berlín después de haber pasado meses mirando ofertas

Son tantas las posibilidades que ofrece ChatGPT, el generador de texto por inteligencia artificial de OpenAI, que la gente acude en masa a esta herramienta para realizar tareas como planificar sus vacaciones, mejorar sus perfiles en aplicaciones de citas e incluso perder peso. Un programador reconvertido en inversor ha utilizado ChatGPT para encontrar apartamento sin complicaciones.

Daniel Dippold, de 28 años, es fundador y CEO de la empresa de capital riesgo EWOR, y llevaba 4 meses intentando encontrar un piso de alquiler en Berlín para su novia y para él. Los portales inmobiliarios alemanes como Immo Scout24, immowelt o Immonet no les ofrecían viviendas de su agrado y, cuando intentó recurrir a su red de contactos, tampoco hubo suerte.

"Me preocupé mucho porque, literalmente, no había nadie capaz de ofrecerme un piso", asegura Dippold a Business Insider. 

Entonces, el joven comenzó a utilizar ChatGPT en su trabajo y, después de estar "programando con él todo el tiempo", se sintió inspirado por las capacidades del chatbot. Dippold se preguntó si podría utilizar ChatGPT para encontrar piso.

"Cuando ya estaba realmente agotado de buscar, pensé: 'Oye, ¿puedo generar algo que me lo facilite con GPT?", se preguntó. Y funcionó.

En primer lugar, Dippold le pidió a ChatGPT que le sugiriese 20 cosas que podía hacer para encontrar piso utilizando "un método un poco más ingenioso y centrado en la tecnología" para buscar en plataformas online. 

El chatbot le dio 20 opciones, entre ellas, configurar alertas automáticas en webs de vivienda y desarrollar un modelo de aprendizaje automático para predecir en qué zonas se encuentran las mejores ofertas. 

Algunas de estas sugerencias "le inspiraron", pero otras no eran prácticas. Así que le pidió a la herramienta de OpenAI que generase 40 sugerencias más. Se decantó por su favorita: crear una base de datos con todos los gestores inmobiliarios públicos y privados de Berlín con los que ponerse en contacto. 

Le gustó esta opción porque podía preguntarles si tenían pisos que pudiesen salir pronto al mercado y así adelantarse a su competencia.

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A continuación, le pidió a ChatGPT que generase en Python un web scraper —una herramienta que se dedica a extraer datos de las páginas web— capaz de crear una base de datos con los nombres de todos los administradores de fincas de la capital alemana. 

El chatbot le ofreció una secuencia de comandos y, después de que Dippold retocase un poco el código, el bot generó una base de datos con más de 100 empresas de gestión inmobiliaria, cada una con varios inmuebles con su dirección, un número de teléfono y un correo de contacto. 

"Eso aceleró aún más el proceso", afirma. 

A partir de ahí, redactó manualmente varios correos en alemán —GPT es mejor en inglés, sugiere— a cada inmobiliaria de la lista. En ellos incluyó información de contacto y las razones por las que su pareja y él serían buenos inquilinos. Recibió 35 respuestas en solo un día. 

Business Insider ha verificado este proceso con capturas de pantalla de las respuestas del chatbot y con correos electrónicos de las autoridades de vivienda. 

Como no quería responder manualmente a cada correo electrónico, Dippold le pidió a ChatGPT que programase un código para generar respuestas automáticas que incluyesen documentos personales como sus pasaportes o sus nóminas pasadas. De ese modo, la pareja del programador pudo enviar sus solicitudes antes que otros posibles inquilinos.

Dippold redujo la lista a 3 viviendas que su novia visitó más tarde en función del tamaño, el precio y la ubicación que ambos preferían. En este momento la pareja se dispone a elegir entre uno de los 2 pisos que aceptaron sus solicitudes gracias a ChatGPT. 

Según cuenta este empresario e inversor de 28 años, utilizar el programa de OpenAI para encontrar vivienda ha sido una "solución creativa" que le ha resultado "más rápida" y de "mayor calidad" que los métodos tradicionales de búsqueda de pisos. 

Aun así, Dippold admite que ChatGPT no es perfecto. Muchas de las soluciones sugeridas por el chatbot han sido una "absoluta basura", como la idea de diseñar un generador de texto para hablar con los propietarios o el hecho de firmar un contrato de alquiler sin llegar a ver el piso en cuestión. 

En ocasiones la inteligencia artificial solo entendía indicaciones breves con poco contexto, generaba código fuente "defectuoso", plagado de errores, u ofrecía respuestas que "simplemente eran erróneas". Sin embargo, Dippold fue capaz de encontrar soluciones preguntando a ChatGPT por otras cuestiones y recurriendo a sus propios conocimientos de programación para corregir errores. 

Como declarado nómada digital, no hay duda de que este joven alemán volverá a utilizar el chatbot de OpenAI para encontrar piso en el futuro. 

"Sin duda, volvería a hacerlo", sostiene Dippold. 

Aclaración: immowelt forma parte del Grupo AVIV, que a su vez pertenece a Axel Springer, la empresa matriz de Business Insider.