La regla no debería dolerte y así es como puedes lograr que deje de hacerlo, según una especialista en salud hormonal

Que te digan que la regla podría no dolerte es como si te confirmaran que los unicornios existen y que encima vas a tener uno. Algo casi mágico.

Piensa que te liberan de tener que experimentar terribles calambres abdominales de manera mensual. Dolores que comienzan entre 1 y 3 día antes del período y disminuyen en 2 o 3 días una vez llegada la regla. Malestares que en en ocasiones pueden llegar incluso a afectar en el día a día de quien los padece. Algunos estudios han detectado como estos dolores en adolescentes pueden vincularse con problemas de ausentismo, disminución del rendimiento académico, alteraciones en el estado de ánimo y afectación de las relaciones interpersonales.

Y aunque se asuman como normales, lo cierto es que los dolores menstruales, conocidos como dismenorrea, se consideran una anomalía o alteración de la menstruación. Entre los factores que incrementan el riesgo de padecerlos se incluyen ser menor de 30 años, tener un índice de masa corporal bajo, flujos abundantes o ciclos más largos.

Pueden deberse a dos causas. 

Por un lado, la dismenorrea secundaria está relacionada con un problema médico no detectado como puedan ser endometriosis, fibromas uterinos o infecciones entre otras. 

La dismenorrea primaria, en cambio, no está causada por ninguna afección. Se vincula a un exceso (o mayor presencia) de prostaglandinas, unas sustancias químicas involucradas en el dolor y la inflamación, que entran en escena cuando, durante el ciclo, tu útero se contrae.

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Se estima que entre un 25% y un 60% de las mujeres experimenta este tipo de calambres menstruales. El problema, se tiende a dar por sentado que tiene que ser así y no se hace nada por remediarlo. 

"Tenemos muy normalizado que la regla tiene que doler y lo vivimos así con resignación. No se hace nada para evitarlo, pero sí que podemos hacerlo. Desde el estilo de vida, desde la alimentación sí que podemos hacer cosas para disminuir o incluso eliminar el dolor", asegura a Business Insider España Marta León, especialista en nutrición y salud hormonal y autora del libro Alimentación y Salud femenina.Cuida tus hormonas comiendo rico, en el que ofrece consejos y recetas para mejorar estos ámbitos de la salud.

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Si tu dolor menstrual no se debe a un problema médico, entonces seguramente este venga derivado "un estado inflamatorio o unos malos hábitos de vida", como señala León. Ambos, factores sobre los que fácilmente puedes influir.

La menstruación es un estado inflamatorio en sí. Si tu alimentación y estilo de vida contribuyen a que tu cuerpo lo esté de manera crónica, es más probable que viva peores reglas. 

"Si conseguimos modular o reducir las sustancias inflamatorias en el organismo durante todo el mes favoreceremos que la intensidad de la última fase del ciclo sea más leve", apunta la especialista en el capítulo de su libro dedicado a este tema.

¿Qué significa eso? Que una vez más la solución a tus problemas está en comer bien.

"La alimentación nos puede ayudar haciendo un tipo de alimentación antiinflamatoria que prácticamente está basada en alimentos naturales y frescos", aconseja León.

En este escenario, la especialista en nutrición recomienda apostar por la comida mediterránea, señalada por la ciencia como la mejor dieta para combatir la inflamación.

Así, intenta primar en tus platos, sobre todo días antes a la regla, la ingesta de verduras de hoja verde, frutas de temporada y pescado, "fundamental para nuestra salud menstrual puesto que el omega 3 es un antiinflamatorio muy eficaz", remarca la autora.

También toca dejar de sucumbir a esos caprichos poco saludables que te pide el cuerpo durante esos días. "Ya que las grasas saturadas y los azúcares contribuirán a tu estado inflamatorio crónico".

Lo mismo con el alcohol.

El alcohol, afecta negativamente a una experiencia menstrual, influenciando "en que haya o no haya dolor o que la intensidad de este sea mayor o mucho menor", señala Leon.

"Cuanto menos bebamos mejor, pero de manera estratégica, sería muy importante que durante la fase premenstrual, (antes y durante la regla), intentes reducir hasta el punto de eliminar prácticamente la cantidad de alcohol ingerida. Seguramente te encuentres mejor de cara a la siguiente menstruación", afirma.