Soy nómada digital, trabajo en el sector tecnológico y ya soy jefe: viajar constantemente no me ha frenado

Este artículo está basado en una conversación con Andre Maxwell, un nómada digital que trabaja en la empresa de seguridad en la nube Okta. La transcripción ha sido editada por motivos de extensión y claridad.

Estaba en Tulum, México, cuando empecé a trabajar en Okta en marzo de 2022 como arquitecto de soluciones. Ya había sido nómada digital durante casi un año, trabajando como ingeniero de ciberseguridad en una empresa tecnológica más pequeña.

Muchos trabajos en empresas todavía eran principalmente a distancia, y podía desempeñar mi papel en Okta en remoto. Presenté mi candidatura y realicé mi entrevista por internet. Cuando conseguí el trabajo, cogí mi ordenador en Dallas. Ahí es donde estaba mi última dirección permanente y mis cosas —ahora guardadas en un almacén—, y desde allí seguí viajando.

Desde entonces, he visitado 16 países, entre ellos Tailandia, Japón, México, Finlandia y Austria. Cambio de lugar cada pocas semanas o meses. El mío es un estilo de vida único, pero creo en el equilibrio entre el trabajo y vida privada.

La logística de teletrabajar mientras se viaja

Trabajo de 9 de la mañana a 5 de la tarde de lunes a viernes, según hora estándar del centro (siete horas menos que en España), esté donde esté. Cuando empecé a viajar, adapté mi horario de sueño al de mi empresa. Empiezo a trabajar a las 5 de la tarde, hora local, desde Dubai o a las 10 de la noche desde Japón. Normalmente cojo el ritmo en un par de días.

Encontrar una buena conexión a internet es siempre mi máxima prioridad: planifico con antelación antes de viajar a un nuevo lugar. He trabajado desde lugares que no suelen tener infraestructuras muy fiables. Cuando estuve en Tulum, solían producirse cortes de electricidad debido a las inclemencias del tiempo. Hice un mapa de los sitios, como hoteles, con generadores de reserva para asegurarme de que nunca me quedaba sin internet ni electricidad mientras me alojaba allí.

El coste de la vida en espacios soleados y costeros de Estados Unidos, como California, es mucho más alto que en muchos de los países a los que viajo. El menor coste de la vida, combinado con mi salario estadounidense, compensa mis gastos de viaje.

Viajar significa que puedo aprovechar el sol

Nunca viajo a lugares donde tenga que empezar a trabajar por la mañana. Como búho nocturno, prefiero tener el día para mí y trabajar por la noche.

Por ejemplo, trabajar a la hora central de Barcelona me viene bien, ya que empiezo a las 15.00 o 16.00. Si estoy hecho un vertedero emocional y no me encuentro bien, puedo tomarme el día para mí gracias a la diferencia horaria. Me despierto, me pierdo en mis pensamientos, hago algo que me hace feliz y me recupero mentalmente antes de empezar la jornada laboral.

Persigo el verano. No soporto el frío. Por la mañana, salgo a pasear. Desayuno y voy al gimnasio.

Muchos de mis viajes se inspiran en la comida. Soy un foodie de corazón. Descubrir nuevos restaurantes y cafés en una ciudad costera, cerca del agua y con el sol brillando sobre mí, hace que los sacrificios de la vida nómada digital merezcan la pena.

Para la mayoría de la gente, no ver a su familia, ajustar los horarios de sueño y vivir con una maleta sería insoportable. Pero yo estoy viviendo la vida de mis sueños y esos sacrificios no me parecen tan grandes. Hablo con mi familia a menudo. Ver nuevos lugares, perseguir el sol y vivir nuevas experiencias es más importante que la sensación de rutina en un entorno familiar.

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Cómo ascendí trabajando a distancia

Me ascendieron a alto responsable en enero. Tengo veintitantos años. Aunque soy relativamente joven para este puesto en comparación con lo que algunos dirían que es "la media del sector", tengo 10 años de experiencia. Estos conocimientos me han ayudado a tener éxito en mi nuevo puesto.

Solicité el ascenso y pasé por el proceso de solicitud. No sé si tenía competencia, pero me ascendieron porque se me conoce por mi buen trabajo. Ser conocido por un trabajo estelar hace que sea más fácil ascender dentro de las filas de cualquier organización. Mi equilibrio entre trabajo y vida personal contribuye a mi rendimiento.

Ser nómada digital nunca ha sido un problema en el trabajo. Rindo bien, y eso es lo que le importa a mi empresa. Nunca dejo que nada de lo que ocurre en mi vida personal afecte a mi vida laboral. Mi carrera es algo de lo que me siento muy orgulloso. Sigo queriendo superarme. Y creo que eso me ayudó a llegar a la posición en la que estoy ahora.

Quería dedicarme a la gestión para centrarme en racionalizar los procesos empresariales: cómo funciona mi equipo, la mejor manera de relacionarnos con nuestros clientes y ofrecerles la mejor calidad posible. Las personas que dirijo también están en remoto y todos trabajamos de forma independiente, por lo que un entorno de oficina no beneficiaría a nuestro flujo de trabajo.

No tengo miedo a perderme la experiencia de trabajar en una oficina

No me preocupa volver a una oficina porque he estado de cara al cliente toda mi carrera. Si tu trabajo depende principalmente de ti y de tu capacidad de rendimiento, creo que es mucho más fácil optar por el nomadismo digital. La gente que trabaja en equipo tiene menos flexibilidad y puede beneficiarse del tiempo cara a cara.

Puede que llegara a gustarme el aspecto comunitario de una oficina y las happy hours, pero nunca lo he experimentado, así que no me siento peor sin ello.

Conozco gente nueva todo el tiempo viajando. Más de la que conocería si trabajara todos los días en la misma oficina, así que no siento que me esté perdiendo ninguno de los aspectos más personales de trabajar en una oficina.

El valor de un empleado también depende de su felicidad

Un equilibrio saludable entre trabajo y vida personal produce mejores resultados laborales. Salir del trabajo y estar en una zona nueva que te gusta estimula el cerebro de forma diferente. Trabajo mejor porque mis viajes me hacen feliz.

Me encanta mi trabajo. Cada nuevo entorno en el que entro, cada nueva ciudad o país, me devuelve la felicidad. Una persona psicológicamente sana es más valiosa para una empresa.