Los tipos de insomnio que puedes padecer

Dormir lo suficiente es necesario para encontrarte bien. Ya que tu cuerpo lleva a cabo muchas e importantes funciones durante este periodo, necesarias para sentirte saludable a corto y largo plazo.

Cuando tienes insomnio conseguir esto se vuelve más difícil. A las personas con este tipo de problema del sueño les cuesta iniciar el sueño, mantenerlo o tienden a despertarse demasiado pronto no son capaces de volver a dormir. El sueño por tanto no es reparador o es de mala calidad. 

Esto puede deberse a factores biológicos, psicológicos y sociales. En la mayoría de los casos, el resultado es el mismo: una cantidad de sueño inadecuada que afecta a la calidad de vida. Asimismo esta incapacidad para dormir adecuadamente puede darse en un momento puntual o mantenerse en el tiempo.

Tipos de insomnio según la duración

Tus problemas de sueño pueden aparecer y desaparecer o ser continuos.

Según Harvard, un problema de sueño a corto plazo suele estar relacionado con el estrés. Este insomnio puede durar días o semanas. El insomnio crónico, a menudo es un síntoma de otro problema de salud, como depresión o dolor crónico y es menos común que el tipo de corto plazo.

De manera más concreta la universidad clasifica el insomnio según su duración:

• Insomnio transitorio: dura menos de un mes
• Insomnio a corto plazo: entre uno y 6 meses.
• Insomnio crónico: más de seis meses

Para la Sleep Foundation el insomnio se considera crónico si una persona tiene problemas para conciliar el sueño o permanecer dormido al menos 3 noches por semana durante 3 meses o más. Entre las causas pontenciales incluyen situaciones estresantes, pero también horarios de sueño irregulares, mala higiene del sueño, pesadillas persistentes, trastornos de salud mental, problemas físicos o neurológicos subyacentes, medicamentos u otros problemas del sueño.

Insomnio primario y secundario

Desde la American Academy of Sleep Medicine el insomnio puede ser primario cuando no puede atribuirse a una causa médica, psiquiátrica o ambiental existente. 

El insomnio secundario en cambio ocurre cuando los síntomas surgen de una enfermedad médica primaria, trastornos mentales u otros trastornos del sueño. También puede surgir del uso, abuso o exposición a determinadas sustancias como el alcohol o las drogas. En ocasiones, tener dificultad para dormir puede empeorar la condición médica o psiquiátrica y dificultar su tratamiento. Por ejemplo, indica Harvard, las personas con depresión e insomnio no responden tan bien al tratamiento  como las personas deprimidas sin insomnio.

Otros tipos de insomnio

Si bien el trastorno del sueño causado por el insomnio se clasifica principalmente como de corta duración o crónico, existen otros términos que pueden usarse para describirlo.

Según Sleep Foundation puede hablarse de:

Insomnio al inicio del sueño

Se da cuando hay dificultad para conciliar el sueño al comienzo de la noche. Se asocia con la idea de dar vueltas y vueltas sin poder quedarse dormido. Incluso después de pasar entre 20 y 30 minutos en la cama.

Insomnio de mantenimiento del sueño

En la mayoría de los casos, conlleva despertarse al menos una vez durante la noche y luchar por volver a dormir durante al menos 20 a 30 minutos.

"El sueño fragmentado asociado con un mantenimiento deficiente del sueño significa una disminución tanto en la cantidad como en la calidad del sueño, lo que genera mayores posibilidades de sufrir somnolencia o lentitud durante el día", apuntan.

Insomnio al despertar temprano en la mañana

Implica despertarse mucho antes de que una persona quiera o planee hacerlo. La incapacidad de dormir la cantidad deseada de horas de sueño puede afectar la función física y mental de una persona al día siguiente.

Insomnio mixto

Puede aplicarse a personas que tienen una combinación de problemas relacionados con el inicio y el mantenimiento del sueño y los despertares temprano en la mañana.

Cómo tratar el insomnio

Más allá de los medicamentos, hacer cambios de comportamiento y estilo de vida puede mejorar la calidad del sueño. A diferencia de los fármacos estas modificaciones no tienen los efectos secundarios.

Es adecuado favorecer una buena higiene del sueño. Los expertos coinciden en señalar la terapia cognitivo conductual entre los tratamientos para el insomnio más adecuados. Si este problema deriva de una afección subyacente ayudará asimismo tratar esta.