Trompetas de la muerte: 8 recetas para aprovechar la seta favorita de los amantes de la trufa

Trompetas de la muerte

Jean-Pol Grandmont/Wikipedia

  • Las trompetas de la muerte son setas aromáticas y de sabor muy profundo que puedes degustar de muchas maneras como puedes comprobar en estas recetas. 
  • Apodada como la trufa de los pobres, trompeta negra o cuerno de la abundancia, las encontrarás frescas durante el otoño y deshidratadas durante todo el año.

A finales de verano, una seta de colores negro azulón y gris ceniza comienza a poblar las zonas musgosas y a crecer a la sombra de robles, castaños y hayas: son las trompetas de la muerte (Craterellus cornucopioides). 

También se llaman trompetas negras, cuernos de la abundancia o incluso trufas de los pobres, debido a su exquisito sabor compartido con la trufa negra. En Cataluña se conoce como rossinyol negre, y en Euskadi, saltzaperretxiko beltz.

Según La Casa de las Setas, se trata de una especie de seta silvestre principalmente otoñal, aunque puede empezar a aparecer a finales de verano y prolongar sus salidas hasta bien entrado el invierno. En cuanto a las zonas, encontrarás trompetas de la muerte en zonas húmedas como líquenes y musgo, así como debajo de hojas en descomposición.

Cómo identificar trompetas de la muerte

A diferencia de otras setas que se confunden con especies no comestibles o venenosas, las trompetas de la muerte son muy características y de aspecto único. Su particular fisonomía hace que recolectarlas a la hora de salir al monte a por setas sea muy sencillo.

Su forma es atrompetada —como un embudo hueco por dentro— y habitualmente presentan un color que oscila entre el gris ceniza y el negro azulón. Cuanto más húmeda es la zona de su hábitat, más oscuras son. Poseen un sombrero amplio, elástico y ondulado de unos 12 centímetros de diámetro.

Además, su textura al tacto es suave y su consistencia, muy fina. La cutícula es lisa y a veces, con finas vetas longitudinales. El borde es irregular. No tiene láminas, y su carne es escasa, elástica y muy potente. 

 

Las trompetas de la muerte pueden conservarse en buen estado unos 3 días en la nevera, y para consumirla es preciso cocinarla, ya que de lo contrario resulta indigesta. También se puede secar, congelar después de saltearse o hacer conservas en aceite o en vinagre. Es habitual encontrarla deshidratada y en polvo —o en forma de harina— en los supermercados. 

Entre los nutrientes que aportan las trompetas de la muerte, destacan el cobre y el zinc, junto a las vitaminas del grupo B, las proteínas y los antioxidantes. Refuerzan el sistema inmune, aportan aminoácidos esenciales y previenen alteraciones en la glándula tiroides.

Esta seta fresca de gran valor gastronómico: sirve para guisos de carne, guarniciones, arroces, salteados, revueltos y mucho más. Si no tienes ideas, aquí encontrarás un buen puñado. 

8 recetas con trompetas de la muerte para disfrutar de la seta más aromática

El fricandó es un estofado tradicional catalán a base de carne de ternera y setas.
El fricandó es un estofado tradicional catalán a base de carne de ternera y setas.

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Disfruta de estas ricas setas de temporada: te conquistará su sabor. Para limpiarlas, debes hacerlo muy rápido, secarlas con papel de cocina y no dejar que absorban el agua. Lo mejor es hacerlo con un cepillo o pincel, eliminando los restos de tierra y quitando las partes que estén estropeadas. 

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