La venta de vivienda caerá en 2023, pero el precio de los pisos seguirá subiendo, según BBVA Research
- Después de dos años de continua ebullición, la vivienda comienza a enfriarse: las ventas caerán el año que viene, pero el precio seguirá subiendo.
- La pérdida de confianza por la incertidumbre, la inflación y la subida de tipos lastran las compraventas.
Después de años de continua ebullición, el mercado de la vivienda comienza a enfriarse. La venta de pisos caerá probablemente el año que viene, lastrada por la inflación, la incertidumbre derivada de la guerra y la subida de tipos de interés.
Pero la caída no hará que los pisos sean más baratos: el precio seguirá subiendo.
El servicio de estudios de BBVA Research prevé una "ligera contracción de las ventas de casas para el año que viene, aunque el nivel seguirá siendo elevado", señala en un documento publicado hoy.
La vivienda resistió al COVID-19, e incluso apretó el nivel de ventas y precio, pero parece que el ciclo de subidas ha tocado techo. Por su parte, las viviendas iniciadas también se estancarán el año que viene.
"En los próximos meses, la economía española afronta una situación de menor crecimiento (1,0% en 2023, 0,8 puntos porcentuales menos que lo previsto en julio), inflación más elevada y política monetaria más restrictiva", explica BBVA Research.
Ya no hay tanta demanda de vivienda, entre otras cosas por la caída de la confianza derivada de un contexto macroeconómico incierto, la pérdida de poder adquisitivo derivada de la inflación, y el encarecimiento de los préstamos hipotecarios provocado por la subida de tipos de interés.
"La subida de tipos de interés, que coloca el euríbor a 12 meses alrededor del 2,6% en octubre, requerirá a los hogares un mayor esfuerzo para comprar una vivienda", señala el documento.
Para el servicio de estudios de BBVA, la oferta de viviendas sigue mostrando una peor evolución que las ventas residenciales, y esto podría seguir tensando precios: "La falta de suelo, la incertidumbre regulatoria y el encarecimiento de las materias primas podría dar respuesta a este desequilibrio".
De hecho, el servicio de estudios pronostica un encarecimiento de la vivienda del 2%, aunque en términos reales, teniendo en cuenta la inflación, significará un ajuste del 2,4%.
El incremento del coste de algunos materiales de construcción visto en los últimos meses ha comenzado a reducirse respecto al máximo del primer trimestre de 2022. Además, la consolidación de la progresiva reducción de los cuellos de botella y del coste de transporte, parece que contribuirá a afianzar esta reducción de precios, señala el informe.
Por otra parte, los datos de los salarios pactados en convenios sugieren una relativa escasez de mano de obra en el sector.
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