Después de situar a España como el cuarto país desarrollado que más ha ahorrado durante la pandemia, los españoles están contribuyendo a que uno de los sectores más golpeados por la crisis del COVID-19vuelva a sus niveles de facturación previos a la pandemia.

Estas últimas 2 semanas, las ventas de restaurantes, bares y locales de ocio han superado los niveles de facturación de 2019. 

Las ventas en restauración han recuperado 28 puntos porcentuales de diferencia tras caer en abril un 14% y recuperarse estas últimas 2 semanas hasta situarse un 14% por encima del mismo periodo prepandémico, según los datos de CaixaBank consultados por El Confidencial.

El indicador toma como referencia los datos de compras con tarjetas a partir de operaciones con tarjetas emitidas en España y TPV de CaixaBank. Calcula el consumo que habría existido en 2020 sin pandemia, según las compras semanales registradas en 2019 más el crecimiento experimentado hasta el mes de febrero de 2020. 

Estas son las comisiones que pagarás entre junio y diciembre, según el banco del que seas cliente, y algunos consejos para evitarlas

Los datos evidencian que la relajación de las restricciones tras el fin del estado de alarma ha dado un respiro a gran parte de este sector, uno de los motores económicos del país. De hecho, según el medio, se trata del mejor dato registrado desde el pasado verano. 

Cuando todavía no han llegado las vacaciones de verano, el turismo nacional también empieza a ver la luz al final del túnel. El gasto en alojamientos, agencias de viajes y tiendas de souvenirs se sitúa sólo un 7,7% por debajo de los niveles precrisis —mientras en abril este dato era de un 50% por debajo—. 

No obstante, el gasto de turistas internacionales tiene un gran peso en la balanza total y el descenso de ingresos en este apartado aún supera el 45%, según El Confidencial. 

Estos índices podrían recuperarse paulatinamente con la estrategia de España de abrir sus puertas sin ningún tipo de restricciones a los viajeros de países no comunitarios con una buena situación epidemiológica —es el caso de Reino Unido, donde no obstante los británicos están cancelando el 82% de las reservas hoteleras por las restricciones impuestas por el Gobierno de Boris Johnson—.