Volkswagen invertirá 180.000 millones de euros en los próximos 5 años para apostar por la electrificación

Volkswagen ha presentado los resultados de 2022 bastante esperanzado. El grupo ha obtenido un beneficio operativo de 22.500 millones de euros, un 13% más que en 2021. Sin embargo, aunque sus ventas han caído un 7%, lo cierto en sus modelos eléctricos han arrasado en el mercado, aumentando un 26%.

Debido a este auge de sus coches eléctricos, Volkswagen ha trazado el camino a seguir para estos próximos años. Por el momento, el grupo espera presentar nuevos modelos en todas sus marcas, destacando los nuevos ID.3, ID.7, ID. Buzz, el Cupra Tavascan y el Audi Q8 e-tron. Con el lanzamiento de estos nuevos modelos, la compañía espera alcanzar una cuota de eléctricos puros (BEV) de cerca del 10% de las entregas totales en 2023. 

"El año fiscal 2022 fue un año importante para el grupo Volkswagen. Los BEV representaron una participación récord del 7% de las entregas totales, un hito importante que aprovecharemos este año a medida que nuestra popular gama de modelos continúe creciendo", señala Oliver Blume, CEO de la compañía. 

Pero Volkswagen no se queda solo en la producción de nuevos modelos eléctricos. La compañía ha anunciado su intención de invertir 180.000 millones de euros entre 2023 y 2027, que irán destinados a estrategia de baterías del consorcio, el crecimiento de su presencia en Norteamérica, al aumento de la competitividad en digitalización y productos en China, así como la continuación del desarrollo de productos.

Además, ha señalado que el 68% de este dinero, unos 122.400 millones de euros, irán destinados a la electrificación y digitalización de sus marcas. Esto es más del 56% del último plan quinquenal. El objetivo de Volkswagen es que, a partir de 2025, uno de cada 5 vehículos que se vendan en todo el mundo sea de propulsión totalmente eléctrica. 

La compañía también tiene reservados 15.000 millones de euros para la construcción de fábricas de celdas de batería, bajo su nueva compañía destinada a este propósito, PowerCo, y para los gastos iniciales para asegurar las materias primas como parte de la implementación de la estrategia de baterías. 

Para 2030, se espera que PowerCo genere ventas anuales de más de 20.000 millones de euros. Además, habrá inversiones continuas en la última generación de motores de combustión. Se espera que el pico de inversión se alcance en 2025, después de lo cual seguirá disminuyendo.

Parte de esos 15.000 millones de euros pueden quedarse en España, ya que Volkswagen compró el pasado 9 de enero una parcela en Sagunto, Valencia, para construir una de sus gigafactorías. Esta operación supuso un desembolso de 63 millones de euros. Precisamente es en estas fábricas donde el grupo está haciendo sus inversiones más fuertes. 

"Aspiramos a generar de nuevo una sólida rentabilidad en el ejercicio en curso. Nuestra sólida base financiera nos coloca en posición de seguir invirtiendo en la electrificación y digitalización de nuestra compañía, incluso en un entorno económico desafiante", afirma Arno Antlitz, director financiero y de operaciones del grupo Volkswagen.

Aunque no solo de coches eléctricos vive Volkswagen. La compañía también se ha reservado una parte del dinero durante este plan quinquenal para destinarlo a los vehículos de combustión. Será la última inversión que haga en este tipo de motores.